le bébé mafieux (Chanhun)

Te amo

—¿Qué mierda ocurre Kim?— Preguntó alterado Chanyeol— ¡Responde pedazo de mierda!

—Hay otro jugador con ustedes— Habló Kim— Hay un cazador nuevo que también va por Oh Sehun.

—Si no hablas bien, cuando te vea..— Dijo Chanyeol enfadado— Te voy a moler a golpes por ser nada específico.

—Alguien les tendió una trampa a JongIn y a usted— El hombre al otro lado de la línea sonaba agitado— Tiene que llevarse al mesero de ahí y escapar antes que sea tarde, suerte señor.

Y Kim colgó.

Mierda.

Corrió escaleras arriba, a buscar a su nene, con cada paso que deba, sentía su corazón el doble de acelerado que el anterior.

Entró a la habitación, escuchando el agua de la regadera abierta, todo el peso acumulado sobre sus hombros se vació al ver la ropa de su nene en la cama.

¡Estaba a salvo, carajo! Y eso era lo más importante de todo.

Se sentó en la cama a esperar que Sehun terminara de bañarse, para largarse en ese mismo momento a la protección de su propia mansión, teniendo en sus fuertes brazos a su nene.

Cerró los ojos por un momento intentando terminar de quitar todo el estrés sufrido en menos de 24 horas.

Escuchó el agua dejar de correr, para luego, ver salir a Sehun del baño con una toalla atada en la cintura.

Si estuvieran en otras circunstancias distintas en ese mismo momento se lo hubiera cogido, pero para su desgracia tenían a alguien cazándolos y tiempo era lo que menos tenían.

—Me voy a vestir y nos vamos— Susurró Sehun mientras se dejaba caer la toalla de cuerpo sin timidez alguna.

Chanyeol asintió y se tumbó boca arriba en la cama, no quería decirle nada a su nene sobre la situación crítica que estaban pasando, creyó que podía ser peligroso por el embarazo escuchar algo así de serio.

Y tenía razón ¿Cómo diablos iba a decirle que su vida corría peligro por su culpa? Sentía verdadero remordimiento saber que por culpa de ser un maldito jefe de la mafia, su nene e hijo corrían peligro.

Sintió su teléfono vibrar en su bolsillo, vio que era una llamada entrante de Kim, miró a Sehun que aún se estaba colocando el camisón y le avisó que iba a bajar un momento a contestar, Sehun respondió un simple "de acuerdo" y al oír eso salió de la habitación.

—¿Qué ocurre Kim? Ya estoy con Sehun en la habitación de JongIn, pronto nos iremos- Respondió.

No obtuvo respuesta.

—¿Kim?— Silencio total era lo que había al otro lado de la línea— Kim, ¿Qué ocurre?

—Señor, le dije que saliera de ahí lo mas antes posible, le juro que hice todo lo que estaba a mi alcance, pero van por ustedes, no hay tiempo, escóndanse en un lugar seguro y no hagan ruido, mataron a toda nuestra gente en el cuartel— La voz de Kim sonaba agitada— Lo siento mucho señor, cuide mucho a Sehun.

—Kim ¿Dónde demonios estás? ¿Te encuentras bien?— Preguntó lo menos alterado que pudo— ¿Qué hicieron con los amigos de Sehun?

—Ellos están bien, señor— La voz de su asistente se escuchó cada vez más baja— Suerte y ojalá y lo logren.

Y colgó de nuevo.

A lo lejos escuchó el sonido de varias camionetas siendo manejadas con una rapidez impresionante.

—¡Sehun!— Chanyeol gritó subiendo las escaleras lo más rápido que pudo.

—¿Qué ocurre?— Sehun salió asustado de la habitación.

—Debemos irnos en este mismo momento de aquí— Chanyeol lo tomó de la mano y lo arrastró por el pasillo de manera apresurada, el ruido de los vehículos deteniéndose le indicó que los hombres estaban a punto de entrar a la casa, tanteo el bolsillo de trasero de su pantalón, encontrando su arma cargada.

Que bueno que siempre cargaba una con él.

—¿Qué está pasando Chanyeol?— Preguntó Sehun con temor— ¿Qué hacen tantas camionetas afuera?

Chanyeol suspiró  y los metió a ambos en la habitación de limpieza, cerró la puerta con seguro, corrió las cortinas y vació el armario de limpieza.

—Nene, quiero que te metas a ese armario y no salgas por nada del mundo ¿De acuerdo?— Chanyeol lo tomó por las mejillas, viendo el verdadero terror en el rostro de Sehun— Quiero que estés en silencio y no intentes abrir la puerta, cielo ¿Me lo prometes?

—¿Qué esta pasando Chanyeol?— Susurró Sehun con lágrimas en los ojos— Tengo mucho miedo.

—Todo estará bien, te lo prometo, solo necesito que hagas lo que te pido, por favor, nene— Chanyeol juntó las frentes de ambos— Quiero que cuando no escuches nada de ruido salgas, se que me van a llevar con ellos, nos están buscando, pero sólo saldré yo, quiero que te quedes aquí, es por tú bien y el del bebé.

—¿Qué pasará contigo?— Susurró Sehun negando y aferrándose a él en un abrazo.

Ambos escucharon pasos por toda la casa: los hombres ya estaban revisando toda la parte de abajo.

—Siempre quise tener un niño, pero si es niña con eso me basta— Chanyeol lo tomó por el mentón y le dio un beso apasionante en los labios, sintió las lágrimas de Sehun bañarlos a ambos— Sean felices y por el dinero no te preocupes, Kim depositó tres millones de dólares a tu cuenta.

—Chanyeol...— Sehun  intentó acercarlo a él, pero Chanyeol le retiró las manos y se las besó— Hay espacio para ti también aquí.

Chanyeol negó con una sonrisa triste, le acarició por encima del camisón el bultito que comenzaba a formarse y luego dejó un beso en el.

—Te amo, Sehun— Susurró con lo que parecía una lágrima— Gracias por enseñarme lo que es hacer todo por amor.

—¡Chanyeol!— Gritó asustado Sehun antes de que el mafioso lo encerrara en el armario— ¡Chanyeol!

—Quiero que por primera vez en tú vida me hagas caso, por favor Sehun, por favor, quiero que te quedes aquí hasta que no escuches algún ruido— Susurró con suavidad al otro lado— Te amo, Sehun, te amo, carajo, lo siento por no ser el hombre que tu querías.

—También te amo, Chanyeol, así de bruto y todo, te amo— Susurró Sehun con dificultad debido al dolor que sentía en el pecho— No quiero que nos dejes solos.

—Siempre estaré ahí, nene— Se escuchó como empezaban a forzar la puerta de la habitación— Quiero que sean felices ambos.

Y la puerta fue abierta con brutalidad.

Sehun escuchó varios disparos en la habitación, no pudo más y vio todo negro antes de caer al suelo.