Agony » Harry Styles (COMPLETA)

Capítulo 12

El automóvil se detuvo. Lou y yo bajamos para abrir, nuevamente, las puertas de las chicas.

Al comienzo, temí que la madre de Annie pudiese haberle contado algo acerca de nuestro último encuentro, pero deseché esa idea en el mismo instante en que me miró.

Ella me observó con despecho, con burla. No lo hizo con aquella mirada de lástima como lo había hecho Louis hace algunos años, ni con la que me había visto su madre días atrás.

Annie estaba muy enojada conmigo y la tensión entre nosotros era demasiado notoria. No quería arruinar la cita de mi mejor amigo y pensé que rendirme sería la mejor opción, el podría disfrutar de su noche sin mi. Pero me di cuenta de que si lo hacía, sería el peor mejor amigo del mundo.

—Lou —lo detuve antes de que llegara a la puerta del auto. Di la vuelta para quedar a su lado—, mi casa está como a quince minutos de este restaurant. Necesitamos otro plan.

—Veinte minutos en auto que son treinta minutos a pie con Annie a solas ¿qué más quieres?

—Quiero irme a casa, ella realmente está disgustada, además sabes que tengo que regresar temprano hoy.

Era viernes por la tarde, día de tortura para mi. Era tradición entre yo y mi padre que cada viernes que llegara borracho a casa tenía que preparar su comida. Tal como lo hacían mi madre y mi hermana en el pasado.

—Déjalo ya Harry —dijo cansado—. ¿Dónde está el Harry Styles que conozco?

Giré mi rostro y pude ver que las chicas veían nuestra discusión a través del vidrio. Seguramente pensaban que estábamos teniendo un problema. Betty nos miraba con preocupación y me sentí realmente culpable. No quería a rruinarlo para ella.

— ¿Te gusta la chica? Ve por ella hermano, Annie está siguiendo sin ti y la estás dejando escapar. ¿No tenias ningún problema follándote a todo el instituto y lo tienes para ella?

—Sabes que es diferente.

—Lo sé Harry —bufó pasando los dedos por su cabello—. Solo necesito ver en tus ojos la confianza y la fuerza de mi mejor amigo. Estás dejando que tu padre arruine otra de las buenas cosas en tu vida, por favor no permitas eso.

Asentí con la cabeza y Lou me dio una palmada en el brazo. De alguna manera eso me hizo sentir mejor. Louis siempre sabía que decir para que yo me sintiera mejor. Él siempre estuvo ahí en los peores momentos de mi vida levantando mis pedazos cada vez que caía.

Le dediqué una de las más sinceras sonrisas que pude darle en ese momento y rodeamos el auto para —al fin— abrir las puertas de las chicas. Aún podía sentirme falto de confianza e inseguro de lo que pudiese pasar, pero como lo había dicho Louis yo no tenía que darle el poder a mi padre de arruinar otra cosa en mi vida. Bastante poder le había dado al dejarlo golpearme, asustarme, amedrentarme... no iba a permitirlo esta vez.

Abrí la puerta para Annie y le tendí mi brazo para que lo tomara y así lo hizo. Le dediqué un guiño cargado de picardía, a lo que ella solo respondió rodando sus hermosos ojos.

Iba a conseguir que ella me perdonara, e iba a poner en ello todo mi tiempo y dedicación.

Tal como había planeado mi mejor amigo, dejé las luces de mi coche encendidas, rogando porque ninguna de las chicas se diera cuenta. En ese momento no pensé que tal vez mi padre se enfadaría por arruinar el auto.

Decidí que me olvidaría de todo. Me dedicaría a disfrutar de la noche con mi mejor amigo, su chica y por supuesto con la mía. Me preocuparía de mi padre borracho más tarde.