La memoria terminó, y ahora Rick abre los ojos con lentitud, dando cansados parpadeos. Está algo desorientado, pero al poner una mano sobre su cabeza, sintiendo el casco ahí, regresa al contexto del tema.
Cuando consigue separar el cuello del respaldo, ve a un costado, ahí está su nieto, con el puto uniforme puesto y de rodillas, mirando hacia abajo. Parece estar llorando.Tal vez sea efecto del alcohol. Pero eso no tiene sentido, ha estado sobrio por semanas. Es Morty, sin dudas, el que suelta sollozos.
—Mo-morty —balbucea, levantándose para ir a tomarlo.
El castaño oye su voz y alza la vista. Deja escapar un clásico chillido, del susto que le dio.
—¡Rick! ¿E-estás bien? —Se reincorpora y atiende a su abuelo de inmediato. Ni toma el tiempo de limpiar las lágrimas que caen en contra de su voluntad.
Está avergonzado de que ese aspecto suyo éste siendo visto por él. Hace tanto que no le regalaba un drama emocional.El peliceleste no responde, sólo gruñe sacándose el casco y saliendo de ese mullido asiento. La última memoria que vio todavía lo aflige, y aún le retumba en el pecho esa inexplicable sensación de querer volver al pasado. Sólo para contemplar una vez más, en persona, ese rostro asustado de lo nuevo y grato por hacer sobrevivido. Lo llenaba de regodeo y alegría cuando su nieto sonreía sinceramente tras una aventura, anunciando lo mucho que le gustó.
Esa expresión de hace dos años.
¿Cómo regresar a las viejas andadas?
Esas primeras que marcaron su rutina, las que cambiaron valores en Morty, y las que le enseñaron cosas que la patética escuela jamás podría hacer.
—Rick, mírame.. —vuelve a llamar, ahora acortando distancia.
Ya se ha limpiado la evidencia de llanto—. ¿Qué haces aquí?Esa cara preocupada que sobrepiensa cada cosa ha regresado. Las pupilas se le ensanchan al verlo.
—No hay nada que hacer —miente, yendo a otro lado de la habitación para alejarse un momento.
Morty lo mira, e intenta disipar el ambiente. Ya no sabe como presentar una disculpa, ni cómo improvisarla.
—¿De qué era el recuerdo? —pregunta, viendo el vial que Rick puso en el casco.
—Ugghh, cosas que hiciste mal, pero que decidí limpiarlas de tu cabeza. ¿No ves que es celeste? —A escondidas, está metiendo la mano en su bata para asegurarse de algo. El castaño no lo nota.
—Pensé que ya no eras un ratón de biblioteca ordenando todo por colores —bromea, pensando que el mayor necesita oír algo bueno del pasado.
Aunque Morty no tiene idea de que acaba de joderse a sí mismo.
—Já —responde nomás. Ahora, regresa a donde estaba antes, junto a su nieto.
El menor tiene un intento de sonrisa.
—¿Qui-quieres ir arriba a ver la tele? Puedo hacer palomitas —invita, animando a que el otro lo siga. Quiere compensar su falta de empatía.
Pero Rick se acerca peligrosamente a él, no tiene intenciones de responder eso. Morty da pasos hacia atrás, intimidado. Hasta que su espalda choca con uno de los estantes que guarda los viales. Queda acorralado.
—Nuestro tiempo nos pertenece —entona, inclinándose mientras toma su mentón. Lo eleva un poco, viendo antes esos ojos con miedo y confusión.
Descaradamente, apega sus labios con los del castaño, sacándole una gran impresión a él. Trata de apartarse pero la boca y brazos de Rick lo retiene demasiado bien, el aire se le va. Es un beso muy húmedo.
Se separa, aunque no va a dejarle ventaja a Morty, saca rápidamente de su bata esa pistola que conoce bien; la encargada de mantener abastecida de memorias la habitación.
Apunta al rostro de Smith y jala el gatillo.Creía que dialogar con Rick Sánchez podría ser tranquilo. Que tal vez, luego de tantas estupideces que pasaron juntos, se tendrían la paciencia mutua para estrechar mucho más ese lazo y ser serios por primera vez. Pero se ha equivocado.
Un destello se había apresurado a cegarlo antes de limpiarse la boca. Volteando los ojos, cae al suelo, ya sin consciencia.
Quiere llorar, sabiendo que no tiene regreso a lo que ha hecho.
Rick se encargará de extraer los recuerdos de dos años. Piensa llevarlo a una aventura una vez más.
Una vez más. Una vez más.
Se promete devolver cada fragmento de sus recuerdos al terminar. Se lo jura, para bajar el peso que ha creado para sí mismo. Pero no está seguro de nada. No quiere devolverlo.
Aunque quiere reír, quiere llorar. Ya le ha hecho bastante daño a su nieto, todo para omitir el dolor de la soledad. Se niega a dejarlo ir. Es egoísta.
Ese beso fue un impulso. Intenta hacerse creer que no importó. Ama a Morty, y no está seguro de qué forma. Le recuerda a una charla que tuvo con Summer.
Piensa en su familia sin querer.
"¡Llévame a la luna!" Le dijo Beth cuando era niña, alzando los brazos para que la cargue.
Cuánto lamentaba lo que terminó haciéndole a su hijo...—Soy un terrible padre —sentenció, sentándose en el piso—. Y un terrible abuelo...
Cuando está sobrio, sus acciones son más peligrosas que cuando tiene una botella a la mitad en la mano. Lo es, porque está más consciente que nunca...
Arrastra el cuerpo de Morty hasta la silla y lo deja ahí. Cargarlo se le hace extraño, quiere pedirle perdón. Empieza a configurar y a ajustar el cambio de sus recuerdos.
Lo único que logra despejar su mente por un momento, es el hecho de que Josh será plantado.
Se detiene un momento para carcajear por ese desgraciado, pero retoma su melancolía al instante, recordando que ÉL es el desgraciado que no le suelta la correa a quien ama.
Ha sido el karma, vaya.
THE END
Quería alargar esto mostrando algo de Josh pero todo me guió hasta acá. Tampoco tenía ganas de crear tensión, celos y drama que sea tan cliché
Íbamos a acabar en la misma. So, este es el final, señores.La intención era hacer algo con el tema emocional y la soledad de Rick, además de la obvia dependencia que tiene hacia Morty.
Siento que esto es algo que haría para mantenerlo con él, ya que cada vez más, Morty se aleja de él, y se ve que lo necesita para seguir ahí.
Soy un asco cerrando historias, por eso el final abierto. Aunque igual quedó del asco.
En mi opinión: una bonita cochinada 👺👌
Yo me despido, chau 💜
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❝Don't go, I'm alone❞ Rickorty
Fanfictionᴴᵃᵖᵖᶤˡʸ ʷᵃᶤᵗᶤᶰᵍ ᴬˡˡ ᵒᶰ ᵐʸ ᵒʷᶰ ᵁᶰᵈᵉʳ ᵗʰᵉ ᵉᶰᵈˡᵉˢˢ ˢᵏʸ Morty consigue trabajo y ya no tiene tiempo para Rick.