16.

2.6K 76 3
                                    

Narra Eva.

Salimos a comer a un restaurante súper bonito, tenía una vista increíble y no había demasiadas personas.

Eva: que linda vista.- sonreí mirando.

Hugo: me encanta, quiero una casa donde tenga una vista asi.- asistí.

Eva: que raro que no la tienes todavía.- reimos.

Hugo: es que de España no me muevo, aunque no estaría mal tener alguna para cuando se quiere escapar de todo.

Eva: la verdad que no, estaría bueno.

Hugo: compramos alguna.- me miro y acaricio mi mano.

Eva: dale.- reí, pensé que me estaba jodiendo.

Hugo: estoy preguntándote en serio.- me dijo con una sonrisa y lo mire.- no tiene nada malo que tengamos un lugar para nosotros, para cuando nos queremos escapar de toda la locura que vivimos.

Eva: pensé que me jodias.- nego y sonreí.- no sé qué decirte, estaría bueno la verdad, un lugar donde solo seamos tú y yo.- asistio.- una isla no puede ser.- pregunte en broma.

Hugo: quieres una isla, te la compro eh.- rei negando.

Eva: bueno luego lo vemos bien, pero estaría bueno.

Hugo: aceptas.- me dijo canchero.

Eva: aceptó.- le tiré un beso y mordió su labio.

La comida llegó y seguimos hablando de nuestras cosas, comimos tranquilos y sin apuro. Eran las 00hs y nos subimos al auto que habíamos alquilado para estos días. Había sido una hermosa noche como siempre que estaba con el.

Hugo: que te parece si vamos a tomar unos tragos por ahí.- asistí.

Eva: si como quieras, le voy a mandar a sam para que disfrute su noche.- rei agarrando mi cel.

Hugo: acuérdate que estás hablando de mi hermana.- reimos.

Eva: lo siento, se me pasa.- ella me había contestado rapidísimo festejando y yo me reí.- listo ya está, donde quieres ir.- lo mire y me levanto los hombros.

Hugo: buscamos alguno, total nadie nos apura.- puso su mano en mi pierna y empezamos andar sin rumbo.

Encontramos un bar que se convertía en boliche luego de la 1 de la mañana, así que entramos haber si nos convencía y así fue, así que nos quedamos ahí.

Narra Hugo.

Las horas pasaban, los tragos seguían acompañados de risas y baile. Se habían acercado a pedirnos algunas fotos pero por suerte no fueron muchas.

Eva: la mina que vino hace rato no te saca la mirada de encima y me estoy cabreando.- dijo en mi oído y reí.- no entiendo la risita.

Hugo: pero que celos hay por aquí.- reboleo sus ojos y le dio un trago largo a su vaso.- madre mía.- dije negando.- no te preocupes, yo solo tengo ojos para ti.- agarro de mi cuello para acercar nuestros labios en un beso intenso y largo.

Eva: nos vamos a casa.- y yo asistí dejando un beso corto.

Arrancamos para volver a casa, eran las 5 de la mañana. Entramos entre risa y nos hacíamos callar mutuamente.

Eva: tal vez no están durmiendo.- me dijo con picardía.

Hugo: Eva, por Dios calla.- soltó una carcajada.- se me vinieron unas imágenes a mi mente, necesito borrarlas ya.- rio más fuerte.

Coincidir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora