Coincidir.

60.

Narra Hugo.

Su celular no paraba de sonar pero estaba en vibrador. Ella dormía en mis brazos, volvimos a casa y comimos algo entre silencio para luego subir a la habitación, entre llanto se quedó dormida. Esto me dolía igual que ella, pero me dolía más verla así, destrozada. Agarré su móvil, era Sam, así que atendí.

Sam: Eva, amiga.- soltó y me pare despacio sin despertarla.

Hugo: soy yo hermana.- escuche su suspiro.- Eva se quedó dormida.

Sam: está mal, no.- pregunto.

Hugo: demasiado, pero tendría que habérmelo dicho.

Sam: entiéndela, no es un tema fácil.- salí un rato al balcón.

Hugo: lo se.- solté sin más.

Sam: tu cómo estás.

Hugo: igual que ella, pero me duele más verla sufrir así como la encontré y estuvo hasta hace rato.

Sam: juntos van a poder con esto, aparte hay alguna chance, tal vez si hablan con el médico puede ayudarlos.- tenia razón.

Hugo: ojalá, gracias por venir a decirme hermana, tal vez ella nunca me lo iba a decir y nos hubiéramos perdido.

Sam: sabía que lo iba hacer, no podía permitir que pase ese dolor sola.

Hugo: eres la mejor sabes, te amo.

Sam: y yo a ti hermanito.- sonreí. Seguimos hablando un poco más y luego nos despedimos. Puse a cargar su móvil y me acosté al lado de ella de nuevo, directo a dormir.

Me levante y seguía durmiendo, eran las 9 de la mañana así que baje a preparar el desayuno, había hablado con Flavio para que me cancele todo lo que tenía hoy, solo quería pasar el día con ella. Estaba haciendo los zumos cuando me abraza por detrás.

Hugo: buenos días.- acaricio su brazo sin darme vuelta.

Eva: buen día amor.- estaba seguro que aún estaba dormida por su voz. Me di vuelta y la abracé.- ya te vas.- pregunto.

Hugo: no, he cancelado lo que tenía hoy en la agenda.- ella se separó y se sentó en la mesada.

Eva: Hugo, no es necesario, en serio ve y has tu cosas normal.- dijo suspirando y me acerque negando.

Hugo: no me puedo tomar un día para mi mujer.- pregunte mientras agarré su cara y acaricie su mejilla.

Eva: no soy tu mujer.- dijo mirándome con una sonrisa y mire para el costado reboleando los ojos.- y si puedes, pero no quiero que dejes tus cosas, ya las dejaste por mucho tiempo antes.

Hugo: bla bla bla.- dije acercándome a besarla.- qué te parece si salimos y nos vamos lejos, organizamos un picnic.- me miro con una sonrisa.

Eva: te amo.- me dijo mirándome fijo.- y si quiero.- sonreí.

Hugo: te amo.- bese su nariz.- venga a desayunar.- ella me ayudo y terminamos para luego ponernos a desayunar.

A eso de las 14hs salimos, estábamos yendo a un lugar tranquilo, fuera de Madrid pero no era tan lejos. Íbamos riendo y cantando con la música fuerte. Llegamos a un lugar, no había nadie, había una pequeña laguna, el agua bien transparente, jamás había visto este lugar.

Eva: que lindo lugar.- dijo mirando.- y no hay nadie.- sonrio.

Hugo: lo encontramos de casualidad, no lo conocía la verdad.- ella me miro.- estaba conduciendo sin rumbo.- rei.