Por fin era lunes volvería a su trabajo, eso la hacía sentir aliviada, se levantó muy temprano aun el sol no salía se alisto y tomos sus cosas, salio sin hacer tanto ruido para no molestar a los demás, cuando abrió la puerta para ir a su auto una voz la detuvo.
- Señorita ¿va a salir? – Luna estaba ya de pie.
- Si Luna tengo que ir a trabajar – Amy respondió con una gran sonrisa – podrias desacerte de esto – le entrego una bolsa
- Si señorita yo me encargo – tomo la bolsa – permítame prepararlo algo para que coma.
- No es necesario, en la clínica lo hare – Amy continuo con su camino – nos vemos en la noche adiós, que tengas lindo dia.
- Igualmente – cuando Amy salio ella reviso el contenido de la bolsa – hoo por dios es su vestido.
Amy tomo su auto y comenzó su largo camino, el paisaje antes de llegar a su destino era hermoso, el sol estaba empezando a salir, llego poco antes de las 8 de la mañana, a la primera persona que vio fue a Rei.
- Doctora – grito esta – que bueno que esta de regreso.
- Rei que gusto verte, te extrañe mucho – y se abrazaron.
- Pensé que no la dejarían regresar – rei lloraba son control.
- No sean tonta jamos podría dejarlos, ustedes son mi familia – Amy la consoló.
- Que bueno que estés de regreso – Richard llego a la clínica.
- Richard – se acerco y lo abrazo – te extrañe amigo.
- Yo también – esa ultima palabra fue un golpe a su corazón pero di igual manera correspondio el abrazo -
- No sabes lo feliz que estoy de estar aquí, la semana se me hizo eterna – Amy realmente estaba contenta.
- ¿Ese infeliz te ha tratado mal? – Richard enseguida pregunto.
- No, gracias a dios tenemos el minimo contacto, solo nos hemos visto unas cuantas ocacionas – Amy dijo nerviosa.
- Si el se atreve a tocarte lo pagara caro – la furia en la mirada de Richard era evidente.
- Richard tranquilízate todo esta bien, además se defenderme.
El dia estuvo algo ajetreado, pues varios pacientes esperaron hasta que amy regresara para hacerse sus chequeos, por fin había acadado de revisar a su ultimo paciente del dia, se recargo sobre su silla y cerro un momento los ojos, golpearon la puerta.
- Adelante – dijo amy.
- Doctora aquí le traigo un café – rei entro al consultorio.
- Gracias rei, de verda lo necesito – acepto la taza - ¿Qué pasa te noto nerviosa?
- Doctora, yo quiero preguntar ¿Por qué acepto esto? – Rei no podía con la duda.
- No puedo permitir que nos quiten este lugar.
- Pero pudimos haber encontrado otro – Rei quería dar opciones.
- No es tan fácil – negó con la cabeza – mi papa no lo haría tan fácil.
- ¿tiene tantio poder? –no lo creía.
- Teniendo dinero casi nada es imposible – comenzó a beber su café.
- Aun creo no debio aceptar, además ese es problema de su hermana ¿Por qué tenia usted que rescatarla? – estaba molesta.
- El prometido de mi hermana no es cualquier persona, y la posición tanto de el y de mi familia no les conviene los escandalo – tomo un poco de café – un mes antes de la boda surgió el rumor de que mi hermana huyo y el haber sus pendido la boda seria todo un escandalo.
- ¿Quién es el importante prometido? –dijo en tono burlon.
- Zoicite chiba – dijo muy seria.
- ¿Zoicite? – la sonrisa de Rei se borro - ¿su hermana se comprometio con el? – no lo creía.
- Asi es, por eso la importancia de que esta ceremonia de celebrar.
- ¿pero porque tiene que vivir con el? – tenia demasiadas dudas.
- Es parte del espectáculo – contesto segura.
- Pero es un espectáculo muy arriesgado, según los periodistas es Zoicite es una persona de un genio terrible.
- Lose.
- ¿El le ha hecho algo? – Rei se asusto.
- No, pero ya tuvimos nuestro primer enfrentamiento – dijo Amy calmadamente.
- ¿Cómo fue eso? – eso la puso muy nerviosa.
- Tiene la idea de que lo voy a obedecer en todo, pero se equivoca, acepte remplazar a mi hermana pero no voy a dejer que nadie me intimide.
- Doctora no sabe cuanto la admiro.
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Remplazo
FanfictionRemplazo. Prologo Amy Mizuno es una joven de 22 años, es una orgullosa doctora que trabaja en una pequeña clínica que se encuentra en una zona remota lejos de la ciudad, era feliz viviendo y trabajando ahí la ciudad tenia recuerdos muy dolorosos par...