Una semana se paso rápidamente, amy se encontraba en la clinica dando las ultimas indicaciónes ya que se ausentaría por una semana.
- No entiendo porque estas haciendo esto – Ricahrd no podía creer la situación.
- Mi padre no me dejo opción y no puedo permitir que esta gente se quede sin este servicio – amy trato de justificar.
- Siempre existe otra opción – Richard estaba desesperado.
- Richard estaré bien – ella tomo su mano.
- No es justo que te sacrifiques por las estupideces de tu hermana – su voz reflejaba su enojo.
- Doctora regrese pronto – rei la abrazo mientras lloraba.
- Tonta solo será una semana – amy acaricio la cabeza de esta – tengo que marcharme.
Cuando amy salió de la clínica un auto negro ya la esperaba, ella se negó a subir alegando que utilizaría su propio auto, aunque eso no evitio que la estuvieran escoltando y se aseguraron que llevara el vestido de novia. el camino duro casi dos horas, pero al fin estaba delante de aquella casa donde vivio los momentos mas dolorosos de su vida, nada mas entrar se encontró con su padre y la esposa de este, Setsuna, una mujer alta, delgada, con su cabello largo verdoso y esos ojos extraño que en apariencia son cafés pero si los miras con atención notaras un tono rojizo en ellos.
- Al fin llegas, mis hombres me dijeron que no quisiste venir en al auto que envié – Sabio Kaio era un hombre impaciente y amy lo sabía muy bien.
- Decidi venir en mi propio auto – contesto secamente – lo necesito porque debo volver a mi trabajo la próxima semana.
- ¿seguiras trabajando en ese lugar? – Sabio puso cara de desaprobar su decisión.
- Claro, no veo porque tenga que cambiar mi dinámica de vida – ella no se inmuto.
- Me parece bien – Setsuna hablo – debes estar consiente que solo eres un remplazo y no debes acostumbrarte a lo que es de mi hija – dijo esto último con mucho énfasis
- Si por mi fuera no estaría aquí, pero alguien tiene métodos muy convincentes – y fijo su vista en su padre.
- Basta de platicas absurdas – interrumpio Sabio – ya preparamos una habitación para esta noche, vallamos a cenar para irnos a descansar mañana sera un dia muy ocupado.
Pasaron al comedor donde la cena estuvo en total silencio, Amy comió rápido para poder retirarse, ese ambiente era abrumador y no podía soportarlo, cuando entro a la habitación se dio cuenta que se esmeraron en hacerle saber que no era bienvenida, ella soltó una risita y negó con su cabeza, los muebles estaban llenos de polvo y la cama estaba sin hacer. Después de poner todo en orden tomo un baño, al salir saco su vestido de la caja donde lo guardo durante mucho tiempo, era un vestido hermoso, en cuello v con pequeñas mangas, ajustado hasta la cintura y con la falda no muy amplia que tenia pequeños apliques de cristal que brillaban con la luz, ella dejo caer algunas lagrimas pues no quería usarlo, no para ese motivo el de remplazar a alguien.
La mañana llego rápido, el ruido del exterior la despertó, al poco rato su padre llamo a la puerta y le dijo que tenía una hora para estar lista, era el tiempo mas que suficiente para estarlo, ella no se esmeraría para un dia que no era suyo, tomo el vestido y se lo coloco, se puso un maquillaje de lo mas sencillo, en cuanto a las joyas solo uso unos hermosos aretes en los cuales colgaban unos hermosos cristales azules que combinaban perfectamente con sus ojos y cabello, al terminar se paro junto a la ventana y observo todo el espectáculo que se estaba montando en el jardín, todo eso era para que la prensa que cubria el evento no sospechara nada. Había llegado la hora en que ella entraba a escena, respiro profundamente y comenzó su camino.
Se dirigieron al lugar donde se llevaría a cabo la ceremonia, amy tuvo que caminar hacia donde se encontraba su prometido, gracias al cielo había muy pocos invitados, hasta que estuvo a su lado al fin pudo ver la cara del hombre que seria su marido durante un año.
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Remplazo
FanfictionRemplazo. Prologo Amy Mizuno es una joven de 22 años, es una orgullosa doctora que trabaja en una pequeña clínica que se encuentra en una zona remota lejos de la ciudad, era feliz viviendo y trabajando ahí la ciudad tenia recuerdos muy dolorosos par...