Rose. © Taekook | Vkook

15

Jungkook's POV

—Hyung, buen día.

—Hola bebé— saludó mientras se adentraba a la cocina.

—¿Descansaste bien?— pregunté mientras dejaba el desayuno de ambos sobre la mesa.

—Ujum— asintió refregándose los ojos mientras se acercaba a mí —Pero te extrañé— musitó contra mi oído mientras me abrazaba por la espalda.

Sonreí cuando depósito un beso en mi cuello.

—Mhm, ahora siéntate a desayunar que se enfría.

—Pensé que SeokJin se había ido a su casa— murmuró mientras se sentaba, pero alcancé a escucharlo y solté una carcajada.

Lo observé mientras mordía una de las tostadas con mermelada.

—No me mifes afi— frunció el ceño y solté una leve risita al sentir un déjà vu.

—Mmh, claro que puedo. Vi la cosita más bonita y angelical de este universo.

Frunció más su ceño mientras terminaba de masticar y sonreía con su clásica sonrisa cuadrada que me hacía delirar.

—Tae... ¿Crees que hoy podamos salir a pasear?

—¿Una cita?— clavó su mirada en mi expectante, haciéndome sonrojar.

—S-sí, al shopping.

Asintió con ese brillo especial en los ojos y sonreí en respuesta.

—Taeee. Sé que hace mucho no usabas tu teléfono, pero vinimos a una citaa.

Rio observándome de reojo y al ver mi ceño fruncido sonrió dejándolo de lado y guardándolo en su bolsillo.

—Eres una ternurita— volvió a reír posando su cabeza en mi hombro, consiguiendo que riera también por su risa contagiosa.

—Bobo.

—Pero este bobo te ama— levantó su vista hacia mí y sentí mis piernas temblar ante lo profundo de su mirada.

Vinimos a una cita, Kook. Una cita, contrólate.

Reí nervioso.

—Uhm, ¿Qué vamos a pedir?

Sonrió bonito olvidando la tensión sexual de hace unos segundos.

—¿Qué te parece unos tés de cereza y un pastel de crema y frutilla?

—Me agrada— sonreí intentando calmarme.

—Esta bien, yo iré a comprarlos. Ahora vuelvo— plantó un beso en mi coronilla.

Mierda, mierda, mierda.