La chica de al lado. [1.5 #ECDAL]

1. Princesita.

[el capítulo va dedicado al comentario número 100 👁👄👁] que comiencen los juegos del hambre y que la suerte esté de vuestro lado...
Capítulo dedicado a: @_jazmincita_

Actualidad...

M A T T

—otro trago Cindy, hoy es un gran día para llegar ebrio a casa— digo deslizando mi vaso sobre la barra.

Cindy solo se limita a rodar los ojos. A pesar de que nos llevemos por veinte y cinco años de diferencia—y que probablemente podría ser mi madre— es lo más cercano que tengo a una amiga. Sí, una amiga, pero una bastante jodida y tocabolas, así como me da tragos también me da sermones que duran horas y que finalmente terminan por importarme un carajo, aunque le demuestro lo contrario para que no sienta que acaba de desperdiciar minutos importantes de su vida.

— ¿Cuál es el motivo por el que hoy quieres celebrar? Porque tú celebras hasta porque es lunes—bufa.

— Qué amargada eres Cindy, ¿la vida no es hermosa para simplemente querer celebrar por celebrar?—digo irónico y me encojo de hombros,— hoy por la noche llegarán vecinos nuevos y John quiere que me comporte, ya sabes... que sea el hijo ejemplar que siempre ha deseado que sea, pero no iré.

Soy consciente de que sin John, mi vida sería aún más jodida de lo que ya es, y que probablemente me esté comportando como un malagradecido con mi... padre adoptivo, pero la verdad al no ir a recibirlos, le estoy haciendo un favor, porque siempre termino por joder todo, y digamos que no soy muy bueno socializando. Siendo las cinco y treinta de la tarde Cindy sirve otro chupito de tequila pero luego aparta la botella y la guarda en el bar.

— Suficiente Matthew, es hora de que vayas a casa y te des una ducha, ¿sabes que luces espantoso, no?

Sus palabras me hacen un poco de sentido. Llevo tres días sin llegar a casa. Desde que Lindsey dio una gran fiesta porque sus padres estaban ausentes y quería "celebrar el regreso a clases" que no me he molestado en decirle a John donde he estado. Siempre ha sido así, desaparezco un par de días y luego regreso a él.

Toco mi pecho ofendido,— ¿Tan temprano y echándome, Cindy?

Mi móvil vibra interrumpiendo nuestra conversación, indicando un mensaje de Lindsey.

"Lo de anoche estuvo buenísimo, que lástima que, como siempre, no amaneciste conmigo en mi cama. Ya extraño un tercer round."

Lindsey, hace un par de meses que comencé a acostarme con la pelirroja, y debo admitir que en la cama es jodidamente ardiente, pero solo es eso, un deseo netamente sexual, y ella lo sabe tanto como yo, hemos quedado en un mutuo acuerdo de utilizarnos de vez en cuando, para satisfacer nuestros deseos y luego dejarlo estar, pero sin embargo ella insiste a ratos, en querer un poco más, pero eso jamás sucederá.

Jamás he logrado amanecer con una chica, solo es sexo, y desaparecer, pero eso algunas no lo entienden muy bien, aunque siempre sea honesto al respecto.

Me levanto del asiento junto a la barra y le dejo una buena cantidad de billetes a Cindy en el jarrón de propina. Ella me fulmina con la mirada pero yo le devuelvo la cara de odio, sabe que no me gusta que me regrese el dinero. No estoy siendo caritativo, estoy pagando su labor como trabajadora, y sé que el borracho de su marido a penas le da dinero para sustentar los gastos de su hogar o a sus hijos. Ella lo necesita y no aceptaré un no por respuesta.

No me gusta que me digan no. Nadie me dice que no. No a mí.

— ¿Por más que te insista, no te llevarás tu dinero y no irás a saludar a la familia nueva, cierto?—dice ya rendida. Me conoce bien.