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Existe una leyenda de una flor mágica con propiedades curanderas, un día, la reina del Reino Corona enfermo, estaba muy mal, el rey ordenó a todo el reino buscar esa tal flor, al encontrarla, la reina tomó el agua que habían hecho con los pétalos de ésta, después de un tiempo mejoro y nueve meses luego dió a luz a una hermosa princesa, con un brillante cabello dorado. Una bruja, al enterarse de que las propiedades curanderas que ella usaba para volverse más joven seguían en la pequeña, no dudo en secuestrarla y hacerse pasar por su madre el tiempo que fuera necesario. Ahora la pequeña tiene siete años de edad recién cumplidos hoy, sus padres aún la buscan, aún sigue con la esperanza de que la pequeña vuelva a casa.

- ¡Rapunzel, cariño, hora del cepillado! -.

- ¡Ya voy madre! -.

La pequeña niña de hermosa cabellera bajo corriendo las escaleras y se sentó en la silla de siempre.

- Adelante querida, comienza -.

- 𝑭𝒍𝒐𝒓 𝒒𝒖𝒆 𝒅𝒂 𝒇𝒖𝒍𝒈𝒐𝒓, 𝒄𝒐𝒏 𝒕𝒖 𝒃𝒓𝒊𝒍𝒍𝒐 𝒇𝒊𝒆𝒍, 𝒎𝒖𝒆𝒗𝒆 𝒆𝒍 𝒕𝒊𝒆𝒎𝒑𝒐 𝒂𝒕𝒓𝒂́𝒔, 𝒗𝒐𝒍𝒗𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒂 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒇𝒖𝒆, 𝒒𝒖𝒊𝒕𝒂 𝒆𝒏𝒇𝒆𝒓𝒎𝒆𝒅𝒂𝒅 𝒚 𝒆𝒍 𝒅𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐 𝒄𝒓𝒖𝒆𝒍, 𝒕𝒓𝒂𝒆 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒑𝒆𝒓𝒅𝒊́ 𝒗𝒐𝒍𝒗𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒂 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒇𝒖𝒆 . . . 𝑨 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒇𝒖𝒆 . . . -.

A cada palabra que la pequeña cantaba, la madre rejuvenecia, gracias a una de las muchas virtudes de su hija. Al terminar de cepillar su cabello el cual era nada más un poco más largo que ella misma, le dió permiso para que pintara una pared con pinturas de caracoles blancos que le había traído de su último viaje.

- ¿Que te parece que hoy cenemos sopa de avellanas? -.

- ¡Me encantaría madre! -.

La señora se arregló con una capa, tomó su cesta y bajo las escaleras de la salida secreta que tenía la torre dejando a Rapunzel por su cuenta.

- ¡Pascal, ya puedes salir! -.

Un pequeño camaleón bebé salió de la cortina y corrió con sus mini patitas a uno de los hombros de Rapunzel.

- Madre dijo que podía pintar en esa pared de allá, ¿alguna idea? -.

Bajo por el brazo de la niña, llegó al estante y dejó caer un libro, con algo de fuerza cambio las páginas hasta llegar a una ilustración del guardián del frío.

- ¿Jack Frost? -.

Pascal asintió rápidamente mirándola sonriendo.

- Buena elección -.

Tomo las pinturas correspondientes y pinto una mini silueta en la pared, sin muchos detalles, se prometió a si misma que con el paso de los años pintaria una pared más grande de las que llevan al techo con ayuda de su cabello que ya estaría más largo. Guardo todos sus útiles y se volvió a cepillar el cabello solo por gusto. Horas más tarde, oscureció, ella como cada cumpleaños se posaba en la ventana para ver las luces flotantes.

- Es hermoso, ¿no es así Pascal? -.

Hizo soniditos en forma de contestación y se apoyo en el brazo de la niña, ya que su madre aún no llegaba, cuando las luces desaparecieron ella cerró la ventana, prendió unas cuantas velas y se fue a su cuarto a dormir.

𝗗𝗘𝗦𝗧𝗜𝗡𝗬 || 𝐓𝐡𝐞 𝐁𝐢𝐠 𝐅𝐨𝐮𝐫🧸🖇️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora