DustBunny Week

Día 1: Primer encuentro.

— Kurogiri, sube el volumen—. Murmuró Shigaraki, rascando de manera descuidada la piel de su mandíbula.

Eran años con ese hábito que ahora parecía incorregible, ni siquiera era tedioso para él, rascar su piel reseca era un reflejo que aumentaba acorde a su ansiedad.

A pesar de que el control remoto de la pequeña televisión estaba más cerca del joven que de él, Kurogiri alzó su brazo, tomando el pequeño aparato para acatar la petición.

El desgaste a causa del tiempo provocó un fallo en el control, obligando a Shigaraki a esperar que este funcionara. Esa falla no le agradó al joven, quien ante ese mínimo descontento soltó un gruñido.

Mientras daba suaves golpes al control remoto, Kurogiri vio las latas vacías de refresco que rodeaban al menor. Tenía días con una mala actitud y un claro vacío existencial. Eran semanas sin cuidar en lo más mínimo su alimentación, salud o higiene.

"Él debería tomar más agua" pensó Kurogiri, no queriendo reclamar. Después de todo, Shigaraki Tomura era un niño de 16 años, y sus condiciones no eran como las de cualquier otro  joven de su edad. Eran días difíciles para él, aún más por la falta de comunicación que tenía con su maestro y supuesto padre.

El control remoto recuperó su función, y el volumen de la televisión subió al instante. Los gritos del programa no se hicieron esperar, la voz de Present Mic era perfectamente comprensible a pesar de los alaridos del público, quienes ansiaban ver a las exhibiciones de los estudiantes de primer año.

— El festival deportivo de la UA.

El comentario entre dientes fue suficiente para que el mayor voltease su mirada hacia él.

— ¿Desea que cambie el canal, Shigaraki?

Durante unos segundos, no obtuvo respuesta alguna. Hasta que Shigaraki se negó ligeramente con la cabeza.

Los siguientes minutos pasaron de manera rápida, Shigaraki mirando desinteresado la carrera de los estudiantes, riendo un poco cada vez que alguno de ellos se quedaba atrás por los robots guardianes.

— Como nuestra ganadora del primer lugar en la carrera de obstáculos: ¡Usagiyama Rumi!

Del túnel con la cinta de meta, salió una chica de baja estatura y piel morena de forma victoriosa, alzando sus brazos y dándose el tiempo para impulsarse con un salto considerablemente largo, ganándose más alaridos por parte del público.

"¿Un conejo?"

No lo había notado antes por la mancha blanca que era su largo cabello alborotado, pero logró distinguir un par de orejas de conejo asomarse sobre su cabeza. Quizá era algo linda.

El destello de interés pasó rápidamente, dejando a Shigaraki aún más ansioso durante las siguientes etapas del festival.

Hasta los enfrentamientos en parejas.

La chica conejo, ahora con su cabello perfectamente atado, contra un tipo que fácilmente le doblaba la estatura.

Iban a matarla. ¿Esto es siquiera legal? ¿Cuál es el límite de daño permitido?

Rascó un poco la piel de su mejilla derecha, nervioso.

Aún con el rival de claramente el doble de su tamaño, la chica avanzó, sonriendo despreocupada y mirando a la audiencia con burla. Desbordando seguridad.

Kurogiri miró con interés la forma en la que Shigaraki se inclinó hacia el frente, concentrándose por completo en la pantalla frente a él. Absorbiendo cada detalle de las imágenes que eran emitidas.