Mi Dulce Omega (Sungpil) ( Jaehyungparkian)

19. Pareja incorrecta

POV YOUNG.K

Mi corazón dolió un poco más al verlo tan débil, sé que él se hace el fuerte, que se defiende que lucha todos los días con esta sociedad que juzga hasta lo que no le importa. Odio que Pil siga sufriendo por Sungjin, que siga ligado en alma a ese sujeto, pero no soy nadie y lo más cruel es que ese mismo día que Pil sufría, mi corazón también sintió un gran vacío, es extraño, no era por mi mejor amigo, era un dolor mucho más grande como si mi pareja sufriera. Luego de tres largos meses decidimos vivir juntos, para muchos algo descabellado, para nosotros una compañía muy grata, amo a mi mejor amigo, y por más que muchos lo vean mal, jamás lo dejará de lado, somos compañeros de dolor, de amistad, de compresión, pero sobre todo de un amor al que no sabemos si lograremos conocer algún día.

—¿No has soñado con tu omega? —Pregunta Pil y asiento.

—Si muchas veces, de niño fuiste tú, pero luego veía imágenes borrosas de un chico, para después ver solo oscuridad, dolor y nada más —.¿Será que siempre será así?, pensé

—Mi Young cuánto quisiera que ese chico llegará a tu vida y llenara ese vacío que guardas. Te he arrastrado conmigo solo a sufrir—Lo detuve, él no tiene nada que ver con esto, fue solo una patraña rara de la vida.

—No digas nada más, tú y yo somos unos solitarios con corazones rotos, que nos tenemos el uno al otro, y así no seamos pareja, nos volveremos viejitos acompañándonos.

—Te amo mi alfa, mejor y único amigo.

—Yo más mi Pili.

Nos abrazamos sonriendo, ya tenemos seis meses de vivir juntos y nos hemos acomodado muy bien, al principio fue gracioso, pero luego ya nos acostumbramos a vernos hasta en ropa interior, nos ayudamos en el celo, sin llegar a solo caricias con ayuda de los supresores. Es doloroso, pero prefiero eso, a buscar un omega, soy algo así como la pareja de Pil y no le seré infiel así nos seamos alfa y omega.

POV JAE

Sentarme en la cama me dolió mucho y ver a Sungjin en el suelo abrazando sus rodillas, destrozo lo que quedaba de mi, la mordida fue por instinto y mi lobo no me quiere hablar. Se veía arrepentido y aunque no lo crean quise devolver el tiempo, siempre desee que la marca fuera hecha como muchos comentaban con amor y que al sentir sus colmillos te invadía un placer enorme, mi caso no fue ese, aún me duele el cuello y lo único que me invade es la tristeza.

—S-Sungjin necesito...ayuda —levanto su mirada y me vio con lastima.

—¿Estas bien? ¿Te duele algo?

—Todo me duele, pero llévame al baño, por favor —me ayudó a ponerme de pie y por mi cara de dolor, sacó fuerzas para cargarme.

—Haz lo que tengas que hacer y me llamas para regresar a la habitación.

—Gr-gracias —me vi al espejo y no me reconocía, mi cuello estaba marcado aún con la herida reciente y todo mi cuerpo tenía puntos morados por los chupetones que me hizo Sungjin, deseaba desaparecer.

<No hagas ninguna locura.>

—Pensé que ya no querías saber de mí.