Olvidemos la guerra Santa, Parte 2. [Finalizada]

Capítulo 2.1: Hermano, hay muchas cosas que debemos platicar (Por Saga).

Antes de comenzar...

Estoy pensando hacer un Kanon-Saga (o como lo conozcan ustedes), pero aun no me decido en hacerlo así bien bien, pero pues veré que sale de mi cabecita :3, es que van a pasar varias cosas, que no creó que sea conveniente contarlas, ustedes ya las leeran XD

Bueno les dejo este capi

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Estaba un tanto molesto por no haber sido un buen padre por no cuidar a mis hijos, que no sabía qué hacer. Caminaba dentro y fuera del santuario y de las casas, viendo como todos estaban más tranquilos, pero yo... ahora me quede huérfilo, por cierto, así se le llama cuando pierdes a un hijo.

Decidí ir a comprar fruta y otras cosas al pueblo que se encontraba aún más lejos de la casa de Aries, obvio no quería estar cerca de todo este lio de caballeros y guerra santa.

En el camino, al pasar por un hermoso bosque, le pedí cochero que detuviera el carruaje. Baje y le pedí que me esperara, luego camine hasta llegar a un riachuelo. Estaba tan concentrado que no me percate de que en una orilla se encontraba una mujer un tanto golpeada, fui en su auxilio al notarla. La levante y la lleve nuevamente al carruaje, le peli al hombre que me llevara a un doctor, y así fue, llegamos lo más rápido que pudo. Aquel doctor la recostó en la cama y comenzó a revisarla.

-disculpe caballero ¿puede esperar afuera en lo que revisó a su esposa?

-¡eh! -exclamé sonrojado-

Solo asentí, salí de la habitación y al pasar como unos 40 minutos, fue a verme.

-Al parecer su esposa está bien, solo unos golpes, así que ¿Qué fue lo que paso? ¿debería llamar a la policía?

-¡eh!, ¡¿Qué?!, obvio no, porque ella no es mi esposa, la encontré así cerca de un río, ¿Cómo cree que golpearía a alguien?, además yo soy un hombre casado con un omega -respondí ofendido-

-¡oh!, discúlpeme no sabía de eso, entonces debemos esperar hasta que despierte, por cierto ¿podría venir mañana?

-¿para qué?

-para que declare su versión a la autoridad, sé que es molesto, pero por favor

-esta bien, vendré más o menos a esta hora, no se preocupe

Después de dejar a aquella mujer, me dispuse a comprar lo necesario para llevárselo a Shion, pues él junto a mi Luco y Phantasos empezarían a alimentar huérfanos de las aldeas cercanas de las casas.

Me encontraba de regreso en el santuario cuando presentí que se acercaba algo hacia mí a toda velocidad, alcance a colocar mis brazos para bloquear su ataque.

-¡Maldito viejo!

Al escuchar su voz, me di cuenta al instante que se trataba de uno de esos gemelos odiosos.