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Neil era un imán de problemas. Andrew no recordaba muchos detalles, pero lo sabía con certeza. Así que no estaba tan sorprendido cuando Neil admitió que había peleado con un paparazzi y que todo había sido grabado por docenas de diferentes personas en la tienda. Suponía que debería al menos, estar complacido de que el idiota no había sido arrestado.

Dicho idiota estaba sentado en la silla a un lado, haciendo ecuaciones en su teléfono y completamente inconsciente de cuán atractivo estaba con su cabello mojado cayendo por su cara. Andrew realmente necesitaba algo más en lo que ocupar su mente, pero las opciones eran limitadas cuando no podía lidiar más que unos minutos mirando la pantalla. Dudaba que leer un libro sería más fácil para su cabeza. Al menos, ya no necesitaba esa estúpida sonda, ahora que había probado que podía caminar al baño por su cuenta. Pequeños pasos.

Un destello de recuerdos vino, no uno completo, solo un relámpago de él sentado en el sillón de Colombia viendo una película con sus pies en el regazo de Neil. Había tenido bastantes de esos en la mañana, breves instantes de la sorprendente vida ordinaria que había construido. La información no parecía estar descargándose de golpe más, sino viniendo en pequeñas explosiones que eran más fáciles de manejar. La mayoría de los recuerdos no tenían nada que ver con Neil. Ahora sabía cómo lucía su departamento, y su casero; recordó la primera vez que puso sus cosas en frente del estadio de Boston, y manejar con Nicky y Aaron, y Kevin agarrando su caso en la cancha, y besarse con Roland en el cuarto trasero de Eden's Twilight. Pero solo unas pocas con Neil que tenían ese raro sentimiento de estabilidad. Era molesto, de verdad; no reconocía esa versión de sí mismo y no estaba totalmente seguro de que quería hacerlo.

El celular de Neil vibró y miró a Andrew con una sonrisa. "Oh, Allison me está gritando. Ya debieron haber subido el video. Sip. ¿quieres verlo?"

Andrew se movió para que hubiera suficiente espacio para que Neil se sentara en la cama. Neil dudo solo por un segundo antes de sentarse cuidadosamente en el borde. Sostuvo el celular en alto y tecleo. Bajo el titular de Twitter, "#10NeilJosten acaba a un reportero" estaba un breve video.

No estaba ni de cerca tan malo como Andrew había esperado. Estaba vagamente decepcionado por la falta de violencia, pero tenía que admitir que estaba... impresionado. De verdad, ese nivel de redirección requería un pensamiento rápido, especialmente en instantes. Neil dejó caer el celular en la cama y lo miró ansiosamente. "Espero que eso estuvo bien, no hemos realmente decidido en si vamos a salir o no, pero no quiero negar esto tampoco."

No hay esto, quería decir Andrew, y no sabía por qué esa respuesta vino tan automáticamente cuando claramente había un esto. En cambio, miró a Neil y dijo, "Séptimo." la expresión en blanco de Neil era cómica, así que continuó. "Quisiste decir el séptimo círculo del infierno. El sexto es herejía, el séptimo es violencia. Aunque diría que la sociedad está realmente atrapada en el cuarto. Codicia."

La mandíbula de Neil literalmente se cayó, y Andrew palmeó debajo de su barbilla, tratando de ignorar el extraño sentimiento en sus entrañas ante el contacto.

"¿Qué demonios, Drew?" Neil empezó a reírse. "¿Cuándo leíste... lo que sea donde aparece eso?"

"Tú niño ignorante, ¿hiciste referencia al infierno de Dante sin saber qué es?"

"¿Cuándo leíste el Infierno de Dante, entonces?"

Andrew se encogió de hombros. "Juvie."

"Leíste el Infierno de Dante en juvie. Eso parece como una rara elección, tengo que ser honesto."

"No había mucha variedad de libros, y hay una cantidad de veces donde es demasiado que leas siempre el cuarto libro de Harry Potter. Quiero decir, no importa qué, Cedric se muere." Neil se vio perplejo y Andrew se preguntó si debería haberle dado una alerta de spoiler. Demasiado tarde. "Y me negué a leer toda la mierda religiosa que seguían dándome. El Infierno de Dante era un compromiso."

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