Jueves

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Dicen que las letras tienen enorme poder ante el espectador que en ellas se enfrasca. Pueden ser el consuelo a unas lágrimas de pena, el complemento u ocasión de dichas y alegrías, tener un mensaje de anhelo o incluso romperte el corazón.

Pueden conseguir crear un mundo, una historia o tan solo una escena con lo que recitan.

Y era justo lo que le pasaba a Todoroki esa lluviosa mañana de jueves que llegó a la escuela, y para variar, encontró una nota en post-it de color naranja pegada a su casillero.

No debió leerla ¿A quien culparía por tener imaginación?

"Maldigo al gusano de donde sacaron la seda con la que hicieron la sábana que cubría el colchón donde tu bastardo padre puso pasión para concebir semejante fenómeno.

–Alguien que no dice piropos.

P.D: En ese entonces ya existían los condones ¿Sabes? Hácelo saber a Papi Endeavor."

Enserio, no debió leerla.

¿Ahora quien le quitaría severo trauma de imaginar aquello?

Un escalofrío recorrió su cuerpo entero mientras que simultáneamente un tick se presentó en su ojo derecho.

Con movimientos robóticos puso la nota donde las demás y siguió su rutina escolar.

— Todoroki-kun, buen día. –Le sonrió Midoriya. — ¿Te encuentras bien? Luces muy pálido.

— Odio los gusanos.

— Ahm...

— Y a mi viejo.

"Alguien" era una persona muy cruel con Shoto.

Just Rude Notes [BakuTodo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora