Restos de un mensajero

Capítulo 9: De helados y antorchas

Nota del autor:

Voy a guardar la mayoría de las gracias y tal después del capítulo. Quédese si quiere escuchar mi plan para continuar esta historia y actualizaciones generales.

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"Habla"

Descargo de responsabilidad: no soy propietario de Fallout, RWBY ni de ningún personaje asociado.

Restos de un mensajero

Capítulo 9: De helados y antorchas

"Tú hiciste las balas", preguntó Six mirando los suministros que había reunido hasta ahora.

"Sí", Carmine respondió con una sonrisa de confianza en su rostro.

"¿Has hecho tus ejercicios por el día?" Joshua puntuó su pregunta desmaterializando los suministros en la pequeña mesa.

"Sí", respondió ella de nuevo.

Esta vez, el Correo detuvo su interrogatorio para mirarla. Una sonrisa cruzó su rostro debajo de las vendas mientras continuaba, "¿Te acuerdas de no tener una cabeza grande?"

Una pequeña mueca se formó en la cara de la niña en respuesta cuando la ex gobernante de Vegas le dio unas palmaditas en la cabeza.

"Estoy bromeando, estoy bromeando". El hombre vendado sabía que tenía que aplacarla o recibiría otro comentario acerca de cómo necesitaba dejar de meterse con ella y tratarla como un adulto.

"Bien", respondió Carmine antes de girar sobre sus talones y dirigirse hacia la puerta.

Seis materializó un pequeño caramelo que había comprado en el mercado hace unos días antes de decir "cuidado" y arrojárselo.

La chica pelirroja se volvió a tiempo para coger el caramelo en sus manos. "Buen trabajo en tu entrenamiento", elogió Joshua mientras se volvía hacia la mesa.

Una pequeña extensión en el rostro de Carmine cuando salió de la habitación prácticamente radiante.

Habían pasado aproximadamente dos semanas desde el viaje del dúo al mercado y Six había preparado la mayoría de sus suministros. Alimentos, agua, ropa, gravámenes y los suministros básicos para llegar a Vale y mezclarse.

Eso también significaba que había estado en Remnant durante dos meses según las fechas que había estado siguiendo. Dar o tomar una semana.

Ya había obtenido los suministros y reparado su rifle antimaterial y desde que lo había reconstruido desde cero, Six le dio la capacidad de disparar rondas de polvo también. Si bien las balas de polvo no tenían el mismo impacto y velocidad que las rondas de pólvora, cuando las combinabas con polvo quemado, explotaban con incluso más intensidad que sus rondas explosivas habituales.

Tenía todas las armas y suministros que necesitaba para llegar a Vale y tener los fondos suficientes para vivir allí hasta encontrar un trabajo. Técnicamente podría marcharse hoy, pero el Mensajero no fue más que cauteloso. Quería tener un excedente de munición y gravamen antes de llegar allí. Seis pensaron que esperaría una semana más o menos antes de irse.

"El almuerzo está listo", gritó Richter desde la cocina.

Six empacó lo que estaba haciendo antes de salir de su puerta y dirigirse a la improvisada mesa de comedor que había preparado la familia Spring.

Esto era lo que más le gustaba a Six de este mundo, la comida. Incluso después de dos meses de comida remanente, la boca del Correo se hizo agua al ver pan tostado, tomates, tocino y varias bebidas alineadas.