Capítulo 8 (parte 2)

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—Hola mamá —dije al cerrar la puerta.

—Por fin apareces Camila —dice mamá mirándome fijo como si estaba esperando mi llegada—, Necesito hablar sobre algo contigo.

—Voy por un vaso con agua a la cocina.

Uso eso de pretexto para zafarme de la conversación.

—Tomarás agua después de hablar conmigo —aclaró firme.

—Debo terminar las tareas de mañana.

—Harás todo lo que tengas que hacer luego —suspiro pesado—, Ahora ven y siéntate aquí, hablemos.

—Mamá...

—A veces actúas raro cariño y si no te conociera diría que me estás ocultando algo malo —refutó Mamá.

Sus ojos se fijaron en mi rostro analizando cada gesto que hacía y cada palabra que salía de mi boca.

—Créeme que no hay nada que tú no sepas sobre mí.

"A excepción del secuestro".

—Escuché lo que tú y Shade hablaban esta mañana.

Esto se estaba tornando más serio de lo que pensé y cada segundo se volvía mucho más complicado deshacerme de esta conversación que no quería tener con ella debido a las cosas de las que hablaba con mi hermano y que fuera posible que escuchara cosas que no deseaba por nada del mundo que se enterara.

Ojalá mi pasmo no se notara demasiado.

—No era nada importante.

—No me vas a convencer, ni me harás cambiar de opinión porque sé muy bien a quien tengo por hija.

—Dime ¿Qué fue lo que escuchaste? —le pregunté decidiendo tomar asiento a su lado como me había indicado.

Al ver sus ojos marrones supe que no sería fácil persuadirla si había escuchado algo que no debería. Era su palabra contra la mía.

—No mucho, solo que alguien te gusta ¿Quién es ese chico afortunado merecedor de tu atención cariño?

La pregunta me cayó como un balde lleno de agua fría. Un suspiro forzado salió de mi boca ¿De qué manera le iba a decir que me gustaba Christopher Vélez?

—Camila puedes confiar en mí, no te voy a juzgar.

Su mirada era animada. Ella no quitaba sus ojos de mi rostro ni por una milésima de segundos.

—Mamá... —tomé una bocanada de aire antes de continuar hablando. Se lo diría de una buena vez y sin rodeos—. Quien me gusta es el chico que está desaparecido. Christopher.

—¿Christopher Vélez? —recalcó.

Solo asentí con la cabeza. No había gestos de sorpresa en su cara sino de decepción. La sonrisa que formaban sus labios había desaparecido. No pude articular palabra alguna sabiendo lo que mamá sentía y me estaba demostrando en este preciso instante.

—Camila estás segura de lo que dices. Ese chico me parece muy peligroso tiene casi una semana desaparecido y la policía no ha dado con quién lo ha secuestrado siquiera —argumentó en tono serio.

Al escuchar eso me puse de pie en un santiamén.

—Prometiste que no me ibas a juzgar, pero veo que no puedo confiar en tu palabra.

—Solo lo dije porque pensaba que se trataba de un chico normal no un Vélez.

—Susan, él es un chico normal como cualquier otro en el pueblo.

Estúpido Secuestro《Christopher Vélez》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora