Peleando contra las lágrimas, la abracé tan fuertemente como pude. Su cuerpo se sentía tan delicado como su hubiera estado en los últimos días de su vida mortal.
—Lo siento; lo siento, mamá. Lo que dije antes, no quise...
—Lo sé —susurró—. Todo está bien. Simplemente estoy aliviada porque estás a salvo.
Podría haberla sostenido para siempre, esperando que se calentara otra vez, pero ella se alejó. Detrás de ella, los otros reunidos, todos peor que cansados, pero ninguno estaba sangrando.
—Te dije que no fueras a ella —dijo mi madre, y me tomó un momento darme cuenta de que le estaba hablando a Henry—. No debiste haber ido a ninguna parte en tu condición.
Henry hizo una mueca, y puso una mano en mi espalda, como si no pudiera hacer un movimiento sin tocarme. No iba a quejarme.
—Podrías haber estado más que molesta si no lo hubiera hecho —dijo.
—Probablemente —admitió mi madre, y nos besó a ambos en la frente—.Gracias por cuidar de ella.
—Hey, ¿qué hay de mí? —dijo James, y ella se hizo a un lado para que el pudiera unirse a nosotros—. Yo hice la mayor parte del trabajo.
—Tú insististe en dejarte caer en Nueva York en vez de África, como te dije que hicieras —dijo mi madre, severamente—. Podrías haberla traído de regreso días atrás.
James se encogió de hombros tímidamente.
—Sí, bien. Henry estaba estable, y no sería un viaje si no hay un viaje involucrado, ya sabes.
—No pretendas que era algo más que tú queriendo pasar más tiempo con ella —dijo Henry.
James sonrió.
—¿Puedes culparme? No es la única de ustedes que se molesta conmigo por más de unos minutos cada vez.
—Me pregunto por qué es eso —dijo mi madre, empujándolo con su cadera, y él sonrió.
Detrás de ellos, alguien aclaró su garganta, y la sonrisa de mi madre se desvaneció. Walter dio un paso adelante.
—Hermano —le dijo a Henry —Bienvenido de nuevo. ¿Estás bien?
Algo brilló en los ojos de Henry, como si estuviera tomando una decisión. No había una pregunta real sobre lo que era, la última vez que ellos habían hablado, había sido por una discusión sobre mí. Pero ahora yo estaba a salvo y había cosas más importantes de las que preocuparse. Como rescatar a Milo.
Enfádate con él después de la guerra, pensé, lanzando el pensamiento hacia Henry. El Consejo ya está lo suficientemente fracturado.
La ceja de Henry se arqueó, y aunque no me miró, sus hombros se relajaron. Al final se dirigió a su hermano.
—Estaré bien pronto. ¿Cómo fue la batalla?
—Fue lo que fue —dijo Walter, exhalando. Incluso él no podía esconder su alivio ante el aparente perdón de Henry—. Mañana atacaremos de nuevo y lo continuaremos haciendo hasta que hayamos hecho los avances necesarios para permitir una estrategia ganadora. James nos habló de tu descubrimiento en el Partenón. Quizás eso nos dará una pista acerca del plan de Cronos.
—Quizá —dijo Henry. Walter lo miró como si lo estuviera evaluando y yo automáticamente me moví en un intento de proteger a Henry de su calculadora mirada.
—Y tú, hermano —dijo Walter—. ¿Te unirás a nosotros tan pronto como estés recuperado?
—Como estoy fuera de mi reino, no puedo imaginar que mi contribución vaya a ser una gran cosa. Pero sí —dijo en voz baja—. Me uniré a ustedes.
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THE GODDESS INHERITANCE #5
RomanceAmor o vida. Henry o su hijo. El fin de su familia o el fin del mundo. Kate debe elegir. Durante nueve meses de cautiverio, Kate Winters ha sobrevivido a una diosa celosa, un vengativo Titan y un embarazo que nunca pidió. Ahora la Reina de los Diose...