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Josh se levantó bastante temprano después de no haber podido dormir más de dos horas, caminó alrededor del hotel durante un par de minutos hasta que vio una tenue luz encenderse al fondo de una de las calles  por la que había pasado al menos 3 veces ¿estaba tan distraído?

A las 6 de la mañana había una pequeña cafetería abierta, se sentó en una mesa para dos, una linda mesa de madera con decorados azules en los bordes, la silla era cómoda, más cómoda que su cama, había pasado una noche horrible.

—¿Estas listo para ordenar? — preguntó un lindo chico de ojos marrones claros y una brillante sonrisa. Josh no hablaba nada de español, pequeño punto que no había tenido en cuenta, levantó su rostro con una expresión de terror en el, tomó rápidamente su celular escribiendo en el traductor — entonces no hablas español — respondió el chico haciendo que sus mejillas se volvieran rojizas, sacó su celular igualmente escribiendo en el traductor.

"¿Estas listo para ordenar?"

Una pequeña sonrisa se dibujo en los labios de Josh, después de ver el menú y tampoco comprender nada.

—Hot cakes and — se sintió un poco avergonzado esperando que su desayuno no estuviera arruinado por su incapacidad de leer el menú — red bull

"Lo traeré en un momento"

Escuchó la voz del traductor antes de ver al chico caminar alejándose de él. Se sintió orgulloso al darse cuenta que había sobrevivido a pedir su desayuno en un país extranjero sin conocer el idioma.

— Here is your lunch — dijo el lindo chico dejando el red bull en una esquina de la mesa y el plato con hot cakes en el centro de la misma — ¿lo dije bien? — preguntó el mesero negando con la cabeza inmediatamente.

— Gracias — respondió Josh —did i say it right? — preguntó emocionado al ver que inmediatamente el mesero asentía.

Su desayuno era perfecto, era un gran día el clima era agradable, había un par de nubes, tenía un desayuno delicioso y su celular estaba lleno de notificaciones de las que no se había percatado.

Tyler:

¿Dónde estas? 

Le envió su ubicación sin pensarlo mucho y continuo comiendo.

Verlos entrar en la cafetería dolía pero no era algo a lo que debería prestarle atención cuando su delicioso desayuno se enfriaba, Jenna parecía realmente feliz, caminaba a un lado de Tyler hablando emocionada de lo mucho que lo había extrañado todo el tiempo que habían estado separados.

— ¡Josh! — gritó Jenna emocionada abrazando al mayor con fuerza — ¿estas almorzando ya? pensé que nos esperarías para comer juntos —Josh asintió dejando a la chica hablar realmente esperando a que Tyler dijera una palabra, lo que fuera, solo quería que la mirada de Joseph se posara sobre su rostro, su cabello, que lo viera con asco si eso quería pero que no lo ignorara — nosotros no hemos desayunado ¿está bien si nos sentamos contigo?

Una vez más Josh asintió llenando su boca de comida para así no tener que hablar, cabello rubio que aun desordenado se veía lindo, labios rosas, una sonrisa linda, ¿sus ojos siempre habían sido tan azules?, su rostro era lindo, linda era el adjetivo que la describía, sentía que debía protegerla sin importar nada, amable, con una risa contagiosa, divertida, comprendía porque Tyler la amaba.

Después de una hora, en la que intercambiaron pocas palabras, Jenna los dejó solos un momento en la mesa después de salir casi corriendo con la urgente necesidad de ir al baño.

— Te acostaste con ella ayer — dijo Josh sin querer ocultar más aquello, no podía callarlo mas tiempo y sonreír, necesitaba recoger los pedazos de su corazón roto y empezarlos a unir de nuevo.

—¿por qué lo preguntas? — Tyler bajó la mirada a sus manos las cuales jugaban bajo la mesa

— No es pregunta — susurró ignorando el latido de su corazón el cual le indicaba que todo estaría mal

— es mi esposa — contestó elevando un poco el tono de voz — ella quería hacerlo

—¿tu querías hacerlo? — se mordió la lengua, era una pregunta tonta porque lo destruiría si la respuesta no era lo que quería escuchar.

—yo quería hacerlo.—

Josh asintió, se dirigió a la caja para pagar el almuerzo y salió de la cafetería sin ver a Tyler, tenía que salir de ahí, el aire comenzaba a faltarle y en cuanto llegó a su cuarto de hotel dejó que sus lágrimas salieran una vez más.

¿Con quién se queda Rosie? [Joshler]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora