Maratón 2/3

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Aaron se levanta molesto del sofá.

-¿Acaso están ustedes volviéndose locos? -Cuestiona.

-Hijo... -Susurra su madre.

-¿Se les olvida que tengo novia? -Estaba alzando la voz.

-Te conocemos, es solo una fachada lo más seguro -Dice el padre calmado.

-¿Qué sabes tu? ¡TU NO SABES NADA! -Aaron estaba explotando.

-A mi no me hablas así -Levanta su brazo pero se detiene.

-Solo eso falta, que me vayas a pegar por no querer casarme con cualquier rubia plástica y hueca -Se intenta calmar -Por lo menos mi novia si sabe lo que es luchar por conseguir lo que quiere, no como las clases de chicas que están acostumbrados a tratar.

-Inoa es una mujer trabajadora, hijo -Su madre intenta hacerlo entrar en razón.

-Bien por ella, pero yo me caso con quien a mi me de la gana -Se va molesto.

-Si sales por esa puerta olvídate de trabajar en la empresa -El padre juega su carta.

-No serías capaz... -Voltea.

-Ponme a prueba -Le reta.

-No puedes quitarme algo que he levantado yo -Una lagrima sale de su ojo.

-Legalmente si puedo -Sonríe.

-Eres un hijo de puta -La madre abre los ojos como platos.

-Como digas. Solo ven con tu novia -Se levanta.

-Adiós, hijo -Los padres se van.

Silencio.

-Quiero que te vayas, por favor -Le señala la puerta.

-Soy tu prometida y es mi casa también -Intenta besarle.

La empuja levemente para apartarla.

-No me gustan las rubias -Pone cara de asco.

-¿Y esto si? -Se quita el vestido. No llevaba nada debajo.

-Wao -Exclama Aaron.

-¿Ves como si te gusto? -Sonríe.

-Déjame terminar. Wao, confirmo que eres una plástica -Se gira en dirección a su habitación -Buenas noches, Iloa -Dice.

-¡Es Inoa! -Responde.

-Como digas -Se encierra en su habitación.

...

Selena hace una mueca y toca su cabeza, parecía dolerle bastante.

Se levanta con pesar y abre las cortinas, todo su cuerpo dolía. Camina hacia el baño y toma su cepillo de dientes.

Se mira al espejo mientras coloca pasta dental.

Tocan la puerta.

Selena, mientras aún se cepillaba, camina hacia la entrada. Vuelven a tocar. Selena balbuceaba mientras abría.

Cameron.

Ella estaba en shock.

-Aún cuando te cepillas, eres hermosa -Selena corre a sus brazos. Lo abraza como nunca.

-¿Cómo te sientes, Seli? -Se separa de ella.

Selena camina hacia el lavabo de la cocina y toma un vaso. Se llena con agua la boca y escupe.

-Te he extrañado tanto -Vuelve a abrazarlo.

-Estás pasando por un momento difícil, y pues, nuestras diferencias quedan a un lado cuando uno necesita del otro.

Soy La Stripper De Mi JefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora