Soy La Stripper De Mi Jefe

Parte 9

Candy sin pensarlo dos veces acude hacia Selena, quien se encontraba hecha pedazos llorando desconsoladamente sobre el césped del parque. Toma del cuerpo de su triste amiga y la abraza.

-Todo estará bien -Consuela a Selena.

No dejaba de llorar. Lloraba y lloraba y nada más no se imaginaba la causa de su desgracia.

Las risas de los niños cesaron, era como si todo el parque estuviese de luto. Observaban curiosos todos a su alrededor. Nadie decía ni hacía nada. Solo eran espectadores de aquella trágica escena.

A duras penas, Selena se levanta del suelo y seca sus lagrimas, gimoteaba y sorbía la nariz en ocasiones. Dejándose acariciar y mimar por su amiga, camina hacia su auto, no quería montar una escena, pero en verdad ya todo el parque estaba atento. Todos esperando un momento impactante, y la verdad, es que lo impactante ya estaba sucediendo. Selena no sabía aún que al único ser amado que tenía, no había muerto de forma natural. No lo soportaría. Nadie sabía quien era, nadie sospechaba de nadie. Todo era como una ficha en blanco. No había nada.

Candy entra a Selena en su auto y la recuesta en la parte de atrás.

Respira profundamente.

Candy observa con terror la jeringa que se encontraba en la parte de adelante del auto. En un movimiento rápido entra y la esconde sigilosamente en uno de los bolsillos de su chaqueta.

-¿A dónde quieres ir? -Cuestiona Candy nerviosa.

-Solo quiero ver a mi papá -Sorbe su nariz. Lloraba silenciosamente.

Candy la observa por el espejo unos segundos, estaba destrozada, y eso la hizo sonreír de manera sádica mientras ponía en marcha el auto hacia el hospital.

El camino era silencioso, solo se escuchaba el pequeño zumbido del aire acondicionado en funcionamiento.

Una vez en el hospital Selena avanza el paso y entra corriendo al lugar. Candy la sigue. Sube las escaleras de dos en dos intentando alcanzar a su amiga. Era muy veloz.

-¡Selena! ¡Espera! -Vocifera Candy agitada.

Cuando por fin logra alcanzarla la observa detalladamente. Se había parado frente a Andrea. Las dos se acercaron y se abrazaron. Sus miradas estaban perdidas, vacías, tristes. Ambas sufriendo su pérdida.

Candy se acerca lentamente, nadie debía reconocerla, aunque en parte no lo harían, pues, era muy buena en lo que hacía.

El doctor de Carl, el padre de Selena, se acerca. Estaba acompañado de un policía. Andrea y Selena se separan.

-Buenas tardes, señoritas -Saluda el policía- Soy el capitán Alec Jones, estoy encargado del caso del señor Carl Smith.

Selena mira con confusión.

-¿De qué habla? -Deja de llorar.

-Su padre fue asesinado, señorita -Selena abre los ojos como platos y observa a Andrea.

-Pero ¿cómo?...

-Una de las enfermeras de su padre le ha avisado al doctor acerca de un pinchazo desconcertante que se encontraba en el cuello de su padre, le han llenado la arteria de aire con una jeringa, lo que le ha producido una angina de pecho, que fue la causa de su muerte. La persona que lo hizo tenía todo muy bien planificado, pues, nadie notó nada extraño.

Selena seguía en shock.

Sus lágrimas volvieron a salir, era obvio, pues primero muere su padre y luego descubre que fue asesinado.

-¿Qué pasará ahora? -Intenta hablar calmada pero su llanto no se lo permitía.

-Le haremos unas preguntas y, luego, con la orden de un juez, observaremos los vídeos de seguridad, para saber, o por lo menos, buscar sospechosos.