El Color De Mi Vida [Rubegetta] Parte 2

Capitulo 21

Narra Vegetta

-ya estoy listo, apúrate cabezón!. -grite desde la entrada.

Hoy era un día especial, pues por primera vez en años los dioses nos dieron un espacio donde podemos liberar a nuestros animales, además de que esta zona también incluía comida ilimitada, aprovecharía esto para tener una especie de cita con mi Ozito...

-...perdón la demora, estaba despidiéndome de Coringa y Lobo Plateado...-hablo al baja, yo sonreí y cerré la puerta.

-pues vamos rápido antes de que se acabe el día. -hable caminando a la salida.

-...ni siquiera me demore tanto...-lo escuche decir, al instante reí.

-vale, no te pongas triste, súbete y elijamos una zona. -él asintió y se montó al Chocobo.

Conduje por todo el pueblo, dando un giro por la casa de Alex, ambos miramos por la zona y habían varios Chocobos, dejándome guiar por eso, baje y ate al mío al lado de los otros. La zona era muy extensa y sin duda hermosa.

-Vege, que esperamos!, vamos!. -grito emocionado, estaba a punto de quitarse su ropa cuando lo detuve.

-no te la quites aquí...-hable colocando mis manos en su cintura, mire alrededor y habían unos arbustos a un lado. -...vamos ahí, estoy seguro que nadie te vera...

Él asintió levemente sonrojado, ambos nos tomamos de las manos y caminamos en los arbustos, estos eran perfectos pues nos tapaban del todo, ya seguro de que nadie vería a mi Ozito nos comenzamos a quitar la ropa, yo guarde está en una pequeña bolsa, al acabar alce mi vista y por primera vez pude ver su animal.

Tenía un pelaje de un castaño claro hermoso, del mismo tono que sus orejitas que sobresalen en su forma humana, además su tamaño no era muy grande, eso lo hacía ver muy adorable, sin perder mucho tiempo tome mi forma animal.

Al estar listo vi como Rubius se acercó curioso a mí, al estar cerca mío me comenzó a oler, al instante moví mi cola de un lado a otro, lo olí un momento, su delicioso aroma a fresas era un poco más intenso, sin evitarlo lamí su mejilla mientras me tiraba encima, ambos caímos al suelo, yo sobre él, solo con mirar sus verdosos ojos supe que se sentía apenado, alegre moví más mi cola y me frote sobre el para dejar mi aroma impregnado.

Al asegurarme que solo tenía mi aroma sobre su pelaje lo deje en paz, él se paró y un poco tímido se acercó, me lamio la mejilla y salió de los arbustos, yo al instante moví mi cola. Como hace mucho que no liberaba mi animal decidí estirarme, estire mis patas delanteras y di un leve gruñido, lo mismo hice con las traseras, cogí la bolsa en mi hocico y salí de los arbustos.

Mire por todo el lugar y no estaba mi Ozito, al instante gruñí, rápidamente me regrese donde el Chocobo deje la bolsa ahí y regrese, baje mi hocico y comencé a olfatear, al instante encontré el rastro de sus feromonas, rápidamente comencé a correr siguiendo el rastro después de unos segundos lo vi a lo lejos, al parecer estaba con alguien más, me acerque rápidamente donde él, pero antes de poder llegar algo me salto encima.

Ambos rodamos unos segundos por el suelo, yo gruñí en tono amenazante, abrí mis ojos y era otro lobo, los dos nos separamos, di el primer paso, me acerque a él y lo olfatee, él hizo lo mismo, sentí su fuerte aroma a Ají, al instante le salte encima.

-Staxx, estás loco chaval?!. -hable mientras movía mi cola, al ser otro Lobo podía entenderme.

-Vegetta!, no te reconocí, pensé que ibas a atacar a esos omegas. -hablo también moviendo su cola. -...es mejor que regresemos, Alex está nervioso.

-lo marcaste?. -pregunte quitándome de encima.

-fue lo mejor que me ha pasado en estos días...-ambos comenzamos a caminar en dirección al estanque. -...Rubius, a lo lejos sentí tus feromonas en él, están saliendo?.