Capitulo 25

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Narra Luzu

-...Auron, has recibido noticias?...-pregunte sentándome en el sofá, por primera vez todos los Omegas se habían quedado dormidos.

-aun nada, deben estar que llegan. -hablo enrollando su brazo por encima de mi hombro, pero eso aún me tenía preocupado.

-y si les paso algo?, que tal si están en peligro?. -volví a preguntar, Auron solo rio y se paró a la puerta ya que estaban tocando.

-tranquilo mi niño, no es como si estuvieran muertos...-dijo abriendo la puerta.

Al instante Vegetta y Rubius ingresaron apurados, ambos cubiertos por sangre y con múltiples heridas, pero el que se veía en peor estado era Vegetta, en ese momento dejo a Rubius en el sofá y tiro la bolsa con los supresores.

-aquí están esos supresores...-hablo con su voz algo irritada y sentándose en el sofá exhausto.

-pero que cojones les paso?!. -hablo Auron acercándose corriendo a donde ellos, yo también me acerque donde Rubius.

-solo les digo que mandaron a Rubén a un pueblo de Alfas que secuestran y venden Omegas, tuve mucha suerte al ir con él!. -hablo Vegetta mientras Auron lo revisaba.

-si fueron al pueblo correcto?, todos los años voy solo y siempre me reciben unos Omegas. -hable preocupado mientras revisaba las heridas de Rubius.

-Luzu, esos Alfas vendían Omegas, me iban a secuestrar para venderme...lo más probable es que los Omegas que te recibían terminaron así...-cogí un paño que tenía y limpie la sangre que tenía, así hasta llegar a su cuello, donde tenía una marca, al instante lo vi preocupado. -...tranquilo...-susurro dándome a entender de que la marca no lo hizo ninguno de sus atacantes.

-enserio perdón a ustedes dos, ya mismo hablo con los oficiales para que encarcelen a esos Alfas. -dije parándome, para traer medicina.

-...Luzu, ya no es necesario, yo me encargue de eso...-hablo Vegetta, yo solo suspire, no vuelvo a dejar que vaya solo con Rubius a una misión.

-solo es que Vegetta descanse un poco, veo que tomo pociones de curación, así que solo necesita reunir energía. -hablo Auron, yo le pase las vendas y se acercó a Rubius. -quédate quieto calvo, aplicare una medicina.

-que tan grave fue todo?, están en muy mal estado...-pregunte viendo como Auron aplicaba una crema en todas las heridas de Rubén.

-tan grave como para exterminar un pueblo entero y que Vegetta estuviera muerto varios segundos. -al decir eso los mire sorprendidos, Auron acabo de vendar a Rubén por lo tanto hable.

-...si quieren se pueden quedar aquí, lo mejor es que descansen lo más pronto posible...-dije preocupado, pero Vegetta negó.

-gracias Luzu, pero ahora solo quiero estar con mi Ozito. -dijo parándose y cargando a Rabis.

-por favor, cuídense...

Narra Vegetta

Al llegar a casa acosté a mi Ozito sobre la cama y me recosté a su lado, al instante con cuidado lo acerque a mi cuerpo y lo abrace, lo abrace mientras le daba muchas caricias y besos, aunque todo ya hay pasado yo me sentía mal, mal por todo lo que paso y sobre todo por la marca, esa marca que dije que la haría en un momento increíble...

-Vege...estas bien?...-lo escuche hablar después de unos minutos, yo solo lo mire con una sonrisa.

-porque preguntas?. -hable tratando de sonar bien, pero él me miro con obviedad.

-primero no te has separado de mi ni un centímetro desde que nos acostamos, y segundo, te siento triste. -al instante deje de fingir que estaba bien, me senté en la cama y puse una mano sobre la venda de su cuello.

El Color De Mi Vida [Rubegetta] Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora