Tras un mes de trabajo sin parar, tanto Carla como Greco se tomaron un pequeño descanso. Ese día, en lugar de descansar cada uno en su casa, Carla decidió ir a visitar a Greco a su hogar.
Greco vivía en un barrio humilde a las afueras de la ciudad. Nada más llamar a la puerta, Greco la recibió recién despertado, sin camiseta:
- Carla, ¿qué haces aquí?, son las...2 de la tarde.
- ¡Sorpresa!- dijo extendiendo sus brazos y moviendo los dedos.
Greco la invitó a entrar a su hogar y observó a una pequeña perra acercarse lentamente a ellos. Carla amaba los animales y desde que era pequeña siempre quiso tener uno, pero su padre no se lo permitió nunca ya que era mucha responsabilidad para una niña tan pequeña.
Greco observó como Soyla y Carla se llevaron bien desde el primer momento.
- Bueno, voy a darme una ducha y nos vamos a dar una vuelta, ¿quieres tomar algo?
- No gracias, me quedaré jugando con ella - le sonrió.
Tras varios minutos, Greco se duchó y se vistió, pero antes de salir de casa, Carla acarició por última vez a Soyla.
- Hasta luego pequeña, pórtate bien.
Cogieron un coche y se dirigieron a uno de los mejores restaurantes de la ciudad, el McDonalds, pidieron las hamburguesas para llevar y se dirigieron a la playa para pasar la tarde.
- ¿Qué tal en el trabajo Greco? No te suelo ver mucho de servicio - preguntó Carla.
- Bueno... estas semanas hemos estado metiendo en la perpetua a muchas personas y he estado muy ocupado.
En ese momento, Carla decidió girar ligeramente la cabeza y observó que encima del Pier, había un hombre observándola fijamente, sin apartar su vista de ella. Se quedaron ambos mirando fijamente durante varios segundos, hasta que Greco decidió hablar:
- ¿Nos metemos en el agua?
- Sí, vamos - dijo mientras se levantó y siguió mirándole fijamente.
Estuvieron más de media hora dentro del agua jugando a mojarse y pasándoselo bien. Una vez salieron y se secaron, Carla decidió ir a por algo de comer en el Pier, el lugar más cercano. Nada más recoger unas palomitas y bebidas, vio a un lado de las vallas, al hombre que la estaba observando, y se dió cuenta de que esa persona era Tonet. Inmediatamente se acercó a él.
- Tonet... ¿por qué me observas?
- Tengo mis motivos.
Nada más decirlo, apartó a Carla y comenzó a caminar.
- ¿Por qué?- dijo Carla.
Al escuchar eso, se detuvo en seco. - Tú ten cuidado con quien te juntas, porque la gente que da mayor confianza es la primera que te traiciona.
Inmediatamente, aunque se encontraba sorprendida volvió junto con Greco.
Cuando el sol ya se puso convirtiéndose en el anochecer, decidieron volver al coche, pero antes de subir, Carla dijo:
- Oye... ¿podría quedarme a dormir en tu casa? - dijo mirando al suelo, algo tímida.
- De acuerdo, quédate.
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La chica del pelo escarlata
FanficLa llegada de una chica a la ciudad de Spain RP cambiará la forma en la que los personajes se desarrollen. ¿Quién es esta chica? ¿Se unirá a la Mafia o al CNP?