•Historias de Cubitos•

Asfixia

La peli-negra aún no podía procesar la noticia que había recibido.

Había tenido constantes mareos, se agotaba con facilidad y se sentía sumamente receptiva con algunos olores.

Asumía que no era nada grave, pero comenzó a preocuparse cuando las náuseas comenzaban a hacerse más frecuentes.

Comenzaba a hacerse una idea de lo que podría estar pasando, se negaba en rotundo a siquiera tomarlo en consideración, porque eso solo traería recuerdos dolorosos.

Pero cuando Killer la encontró vomitando la obligó a ir con Shadoune, que si bien no era un médico como lo había sido Nia, recordó que había asistido como enfermera.

Había logrado escabullirse por algunos días del albino, quien en cuanto la encontró la llevo a la base del Imperio.

Shadoune acepto ayudarlos, por lo que después de hacer algunas preguntas a la peli-negra, y además de analizar los cambios físicos que presentaba la joven, les comunicó el muy probable motivo.

Aún no contaban con un hospital por lo que no tenía el material necesario, pero aun así menciono lo que parecía ser más que obvio.

Estaba embarazada.

Caminaron en silencio, de regreso a base, en el cual Cecililla había comenzado a sollozar y Killer solamente le reconfortaba dando palmadas en la espalda.

En cuanto llegaron a la base de la peli-negra se desmoronó, siendo Killer su pañuelo de lágrimas, la escuchaba en silencio mientras acariciaba su cabello, simplemente ofreciendo su apoyo.

*

Algunos días después, Cecililla se dirigía a la zona del Team Tenemos junto a Killer, quien la acompañaba para que no saliera huyendo en cuanto viera a Gona.

Ella sentía que en cualquier momento las piernas podrían fallarle, sentía temblar las rodillas con cada paso que daba, tenía una presión enorme en el pecho.

El camino hasta su base se había hecho demasiado corto y pronto se encontraba tocando la puerta de aquella base de colores tan peculiares.

Escucharon entonces un grito desde dentro de la casa, dando la autorización para que entrasen.

La peli-negra pensó en huir, aunque Killer no se lo permitirá, resignada se armó con un poco de valor y entró.

Escuchó inmediatamente algunas risas en algún lugar de la casa, se plantó en el suelo sin poder moverse, no se sentía capaz.

El albino entendió, por lo que fue el quien se adentró en la morada, mientras tanto Cecililla sentía que iba a desmayarse, tenía un nudo en la garganta y el estómago en un puño.

Pronto apareció el albino seguido del castaño, entonces la peli-negra se sintió palidecer, la garganta se le había cerrado mientras comenzaba a marearse.

-Hombre Ceci, Killer ¿Qué hacéis por aquí? Se os ve muy misteriosos- Los miro con detenimiento por algunos segundos- ¿Es algo con The Cult?- Preguntó divertido-

-¿Hay alguien?- Preguntó Cecililla bastante asustada-

-Pues estoy con Cristinini- La respuesta no hizo más que crear una expresión de susto en el rostro de la peli-negra- ¿Pasa algo?-

Cecililla comenzó a tartamudear, sin ser capaz de formular las palabras, se sentía sumamente mareada y sus piernas comenzaron a temblar mucho más.

-Gona venimos a decirte algo- Killer habló mientras sostenía a Cecililla que parecía cada vez más inestable- Ceci esta embarazada-

La expresión de Gona se congeló por un segundo, dando paso a la confusión, mirando a Cecililla como si esperará una respuesta.

La peli-negra no se sentía capaz de responder, y todo empeoró cuando escuchó la exclamación y un par de ojos azules asomarse por el marco de la puerta.

La rubia dominada por su curiosidad había decidido acercarse cuando escuchó la noticia.

En ese momento se encontraban todos callados, la tensión en la habitación era asfixiante.

-Ceci ¿Podriamos hablarlo en privado?- Preguntó mientras veía a Killer de reojo-

Pero Cecililla ya no aguantaba la presión y de pronto perdió la conciencia.

*

Cosas que surjen en llamada a las 4 am con los amigos.