SooYoung y JiWoo son novias desde muy pequeñas, están a punto de casarse y esperan la llegada de su primer hijo. Pero una fatal noche SooYoung encuentra a JiWoo en el piso de la cocina, muerta.
Los forenses dicen que fue un accidente doméstico.
Me...
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JungEun escuchó un estruendo en el primer piso, estaba segura que era SooYoung en una pelea con HongJoong, tenía qué detenerla antes de que cometiera una locura y se perjudique a si misma.
Tomó las fotos tan rápido como pudo y los guardó en uno de los cajones que se encontraba en el lugar.
Otro estruendo.
Pareciera que alguien habia caído sobre la mesita de vidrio que se encontraba en medio de la sala.
—¡Maldicion! — JungEun corrió escaleras arriba, encontrando lo que ya suponía, HongJoong había caído sobre la mesa de cristal con SooYoung encima y ambos se golpeaban.
—¡¿Cómo pudiste hacerlo?! — a SooYoung no le importaba el dolor que sentía en su rostro y manos— ¡Te odio! — gritaba— ¡Te odio! ¡tú me la quitaste! ¡la alejaste de mi lado! — la ira en la mirada de SooYoung era increíble, detuvo los golpes y sin penas en un momento en lo que estaba haciendo, comenzó a ahorcar su cuello— ¡Te quiero muerto! ¡quien debió morir eras tú! ¡No ella!
—¡Detente! — JungEun llegó a su lado y quiso alejarla pero SooYoung la empujó con un brazo y siguió ahorcándolo con mucha más fuerza.
El chico trataba de quitar las manos de SooYoung con desesperación pero le era imposible, el aire no tenia por donde entrar ni salir y su rostro cada vez enrojecía más.
JungEun se apuró en levantarse y abrazó a SooYoung de la cintura, forcejeando con ella para alejarla, consiguiéndolo y logrando que HongJoong pueda respirar.
—¡Suéltame! ¡Por un carajo suéltame JungEun! ¡Lo voy a matar!
—¡Tranquilízate! — forcejaba— ¡Debes de pensar! ¡Aquí no puedes hacer nada!
HongJoong respiraba agitadamente mientras se arrastraba entre tropezones hasta la puerta, queriendo huir.
—¡Él la mató Lip! — pronunció con dolor— ¡Mató a JiWoo!
—Déjalo que se vaya— le habló con tranquilidad mientras también lo miraba con desprecio.
—Oh— el chico escuchó— vaya, con que era eso— HongJoong se detuvo cuando estaba a punto de salir, estaba agitado y se sobaba el cuello mientras una sonrisa comenzó a adornar su rostro— ¿hablas de JiWoo? — SooYoung se removió en los brazos de JungEun, tratando de ir contra él pero no pudo hacer mucho— creo saber ahora que hacías en mi casa— sonrió— me imagino que ya encontraste las fotos, bueno, eran unos lindos recuerdos que guardé.
—¡Eres un...!
—Shhh, estoy hablando— calló HongJoong con seriedad— Sí, yo la maté— sonrió como un niño— ¿Te gustaron las fotos?
—No caigas en su juego— susurró JungEun— te está provocando SooYoung, comprendo lo que estás sintiendo pero aquí no podemos hacer nada contra él.
