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Los cinco adolescentes se sentaron en sus respectivos escritorios.
Richie le había dado unas gafas de sol a Eddie para cubrir sus ojos rojos a causa de la marihuana. Ya era hora de ir a casa luego de un largo sábado en detención.
El Sr. Wise entró a la biblioteca y miró a los estudiantes. Beverly actuaba natural, Stanley sonreía sin motivo, Bill tenía la mirada perdida, y Eddie reía entre dientes con sus gafas puestas. Richie al ver todo ese espectáculo se dio un facepalm.
El Sr. Wise olfateó. ⎯ Beverly Marsh, ¿usted fumó aquí?
La pelirroja sonrió ⎯ Un poquito, sí.
El mayor caminó hasta su escritorio y se inclinó hacia ella. ⎯ ¿acaso les dio marihuana a estos chicos, Marsh?
Beverly suspiro. ⎯ No, no lo hice. Eso seria estupido de mi parte, ¿verdad?
Stanley rió.
El Sr. Wise frunció el ceño y caminó hacia Stan. ⎯ Hey, niño. ¿qué es lo que te causa tanta gracia?
El rizado lo miró. ⎯ Nada, sólo... usted sabe, su miserable vida, tener que lidear con todos nosotros.
El mayor frente a él miró sus ojos rojos. ⎯ Detención por el resto del mes para ti y para Marsh. ¿alguien más?
De repente, Eddie cayó de su silla y se rió de ello en el suelo. El Sr. Wise caminó hacia él. ⎯ ¡Levantese, jovencito! ¡Tú también tendrás detención por el resto del mes!
Eddie rió y dijo "Okey" sin dejar de reír y sin levantarse del suelo. El mayor tomó a Eddie de sus brazos y lo jaló. El asmático hizo una mueca de dolor y soltó un pequeño "¡Ow!"
Richie se levantó de su asiento y lo empujó alejando al Sr. Wise de Eddie. ⎯ ¡no lo toque! Richie cargó a Eddie estilo nupcial y lo llevó a su silla.
El señor Wise frunció el ceño. ⎯ ¿Me acaba de empujar, Tozier?
Richie frunció el ceño y se acercó al mayor. ⎯ Se supone que los profesores no deben tocar a los alumnos ¿verdad?
⎯ ¡Eso es todo! ¡Todo un mes entero de detención para todos ustedes! ¡Cuatro sábados para venir, dama y caballeros! Dijo el señor Wise para luego irse a pasos pesados y gritar ⎯ ¡Pueden irse, los veo la próxima semana!
Richie suspiró y observó al Gran Bill que estuvo callado todo este tiempo. Bill sonrió. ⎯ ¿Lo hice b-b-bien?
Richie rió y palmeó la espalda de Bill. ⎯ Si, tío, lo hiciste bien.
⎯ Bueno, nos vemos muchachos. Me iré a casa, los veo el sábado. Dijo Beverly levantándose y recogiendo sus cosas para luego caminar sin ganas fuera de la biblioteca.
⎯ N-no creo que Stanley esté en c-c-condiciones para p-pedalear hasta su casa. Dijo Bill.
⎯ Si, tampoco la princesa de aquí. Dijo Richie levantando suavemente a Eddie de su asiento. ⎯ ¿qué te parece si llevas a Stan Orin a casa? y yo llevaré a este pequeño.
Bill se levantó de su escritorio y tomo la mano de Stanley. ⎯ Claro, n-no hay problema. Adiós. Dijo Bill caminando con un Stanley riendo fuera de la biblioteca.
Eddie tomó las gafas de sol en su rostro y las colocó en el cabello de Richie. ⎯ Estúpidas gafas. Richie rió y las cogió para colgarlas en su camiseta.
⎯ Vamos, Eds, ⎯ ¿dónde vives? Dijo Richie caminando con Eddie por las calles. Finalmente estaban fuera de la escuela.
Eddie frunció el ceño. ⎯ No me llames Eds.
Richie sonrió. ⎯ Vale, Eddie Spaghetti, ⎯ ¿dónde se encuentran tus aposentos? Dijo Richie en un raro acento que Eddie nunca había escuchado.
Eddie rió. Era un sonido al cual Richie podia acostumbrarse. Él ya la amaba. ⎯ Ew, ¿qué fue ese nombre?
⎯ No lo sé. ¿igual te gusta? Preguntó Richie, alborotando el cabello de Eddie. El asmático alejó las manos de Richie. ⎯ Cualquier nombre que me des lo odiaré. Pero vivo en.. ya sabes, una casa. Es una linda casa en realidad, pórtico verde y-y... cosas.
Richie frunció el ceño en confusión. ⎯ ¿No sabes el nombre de tu calle? Preguntó Richie.
Eddie caminaba torpemente. ⎯ Nope. Dijo Eddie soltando una risita.
Richie sonrió por eso. ⎯ Eres muy cute, Kaspbrak, ¿sabías?
Eddie se sonrojó. ⎯ Uh.. oh, ¡mira! Esa es mi- ¡esa es mi casa! Y lo era.
La casa de Eddie Kaspbrak era exactamente como Eddie vagamente la describió.
Richie tragó saliva avergonzado. ⎯ Claro. Dijo rascando su nuca. ⎯ Te veo el próximo sábado, Eds.
El pequeño asmático beso la mejilla de Richie sin decir una palabra, a causa de los centímetros de más del azabache, Eddie hizo puntilla de pie. Luego caminó hacia el pórtico y saludó a Richie. ⎯ Bye, Richie. El castaño caminó a la puerta de su casa y cerró la puerta tras de sí.
Richie suspiró y pateó el suelo para seguir caminando a su propia casa. ⎯ ¿qué mierda fue eso? ¿eres muy cute? mierda, Tozier, calma tus malditas bolas.
Así es como Richie Tozier se dio cuenta de que estaba cayendo por Eddie Kaspbrak.
