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Capítulo 3: No Soy Eleanor

– Estoy muy cansada, esto parece que se está complicando en vez de mejorarlo, Louis evita que saque el tema a toda costa y se molesta muchísimo cuando quiero seguir hablando sobre eso, Harry no me contesta los mil mensajes que le envío, no me sorprendería que en cualquier momento me bloquee... ¿Qué hago ahora?, lo estoy intentando Angel.

– Si dices que resolviendo este dilema amoroso regresaras a casa... Supongo que tendrás que hacer hasta lo imposible Carol. Según lo que leí, es importante que cumplas con tu objetivo... Aquí las cosas se están complicando, el Doctor les está dando la opción a tus padres de desconectarte, pero ellos no harán eso, confían en qué despertaras tarde o temprano.

Carol llevó sus manos a su cabello y dejó salir el aire de sus labios en un fuerte suspiro de frustración, estaba asustada, tenía que admitirlo. Ella nunca había experimentado una situación amorosa como la que Louis y Harry tienen, es más, jamás había tenido una relación lo suficientemente larga como para saber que hacer en estos casos. Ha tenido encuentros con algunas personas, pero jamás pasaban de la segunda cita o encuentros sexuales. Aunque si había ocasiones en que alguna chica o chico intentaban que las cosas fueran más serias, pero ella huía de inmediato de eso, no estaba lista para lidiar con romanticismo.

¡Por supuesto que no iba a saber como resolver algo tan grande como esto! Era como poner a un ratón en una habitación llena de gatos.

– ¿Cómo una chica de 19 años va a resolver un problema ajeno que lleva años formándose? ¡Es imposible!

– Jota, tal vez una chica de California con 19 años no pueda hacer nada pero ahora estas en el cuerpo de Eleanor Calder con 28 años, ¡puedes hacer lo que sea! Harry es un amor, todo el mundo sabe que extraña a Louis, tarde o temprano querrá hablar y es ahí donde tu comenzarás con el plan. ¡Deja de echarle mierda al amor e intentalo! Todos te extrañamos aquí.

Caroline volvió a suspirar y asintió, sabiendo que Angel no podía verla de todos modos. Le agradeció y luego le colgó, pues no podía estar hablando con él toda la noche. Lo pensó bien, necesitaba urgentemente regresar a su vida, extrañaba a sus padres y amigos, no podía permanecer mucho tiempo en el cuerpo de Eleanor. Cayó dormida una hora después gracias a las pastillas para dormir que se había encontrado en el baño de la modelo, no sabía que Eleanor tomaba pastillas para dormir y parecía que las consumía seguido, pues había dos botecitos vacíos y uno abierto en su cajón del mueble a un lado de la cama.

Las primeras noches en el cuerpo de Eleanor, siempre soñaba cosas muy extrañas y que al despertar no tenían sentido, ahora con las pastillas podía dormir sin tener ningún sueño raro.

Al día siguiente despertó e hizo la rutina que ya acostumbraba, solo que sin Louis, el día de ayer había mencionado que iría temprano al trabajo para comenzar a trabajar con las canciones que ya tenía a la mano, ella no sabía nada sobre eso por lo que no le reclamo o algo por el estilo. Se sintió muy sola, tenía que admitirlo.

– Bruce, ¿te has enamorado? – le preguntó al animal mientras le sujetaba su rostro, él nombrado sólo movio su cola como respuesta, Carol hizo una mueca – ¿Eso que significa? ¿Si, no? Necesito un consejo de un experto.

Se rindió y le soltó, el perro una vez libre le lamio la cara y regresó a jugar con el otro animal, mientras Caroline los miraba sentada en el césped. Era demasiado aburrido su día a día, no hacía nada y su único trabajo era sacarse fotos o comunicar de vez en cuando que estaba viviendo con Louis a través de las redes sociales, nada más y ahora tenía que lidiar con Louis y Harry, hacer que ambos se enamoren otra vez para que ella regrese a casa. Fantástico.

– ¿Cómo rayos haré par-?

Fue interrumpida por el sonido de su teléfono, le estaba llamando un número desconocido, algo desconfiada, atendió la llamada, pero antes de hablar, alguien más la interrumpió.