El Secreto de los Dragneel {Natsu, Zeref y tú}

Padres e hijos

La pelea entre Zeref y Natsu continuaba, ambos parecían estar a la par y no parecía que ninguno quisiera ceder; en cierto punto de la pelea, Mavis pidió a Gray que se reuniera con Lucy u Happy fiera del gremio para encontrarse con ella, por lo que obedeció al ver que ___ no tenía intención de dejarlos solos, confiando en que la pelirroja podría ayudar a Natsu.

-Qué divertido es esto, Natsu -habló Zeref tras tomar distancia- Si no te derroto, la humanidad no tiene futuro. Pero aún así me estoy divirtiendo mucho. ¿Será otro efecto de la maldición? Ni yo entiendo lo que siento

-Cierra la boca -se quejo Natsu

-Pero esto es divertido

-Oye...

Las palabras de Natsu quedaron en el aire cuando esté comenzó a tambalearse, parecía agotado de repente, cuando ___ se acercaba para ayudarlo, notó una cuarta presencia en la habitación. Larcade, todo magullado entraba tambaleante por la puerta usando su magia para obligar a Natsu a dormir; secretamente, ____ se alivió de ver que quien la llamaba "madre", seguía con vida.

-Duerme...

-¿Quién eres tú?

-Larcade... -susurró la pelirroja

-Papá... Llegué a tiempo

-¿"Papá"? -Natsu se tambaleó y con molestia comenzó a golpearse para mantenerse despierto- ¡Despierta! ¡No puedes dormirte!

-Adelante, papá. ¡Mátalo y líbrate de la maldición de tu hermano! ¡Las almas blancas viajan al libre cielo! -dijo abriendo los brazos hacia el cielo- Hazlo, papá.

___ soltó un grito horrorizado cuando vio como Zeref atacaba a Larcade, furioso de la indeseable intromisión en su batalla contra su hermano menor; de igual forma, Natsu se giro para ver el cuerpo de Larcade caer al frío piso.

-No te entrometas...

-¿Por qué? ¿Por qué, papá? -Zeref piso la herida de Larcade con furia- Yo no tengo hijos

-Pero... pero yo soy...

-Eres un demonio de los libros de Zeref -habló interrumpiendo al rubio- Un experimento para que pudiera crear a Natsu. Te concedí el apellido Dragneel porque eras el mejor experimento. Eso es todo.

-Aun así...

-¿Cómo osas interrumpir mi pelea con Natsu? -bramó con una tranquila furia- Estaba disfrutándola. ¡Eres un inútil!

Natsu miró el intercambio sin sorpresa, Zeref era exactamente la clase de persona que él esperaba; a sus oídos llegaron unos sollozos, dirigiendo su mirada hacia la pelirroja, quien cubriendo su boca veía la horrible escena con lágrimas en los ojos, horrorizada.

-Ya basta -soltó enfadado

-Continuemos, Natsu

-La... ¡LARCADE! -la pelirroja corrió hasta el cuerpo del rubio protegiéndolo de Zeref- ¡Podrás no verlo como tu hijo, pero yo si lo hago!

-Ma... Madre... -susurro Larcade

-Tranquilo... Aquí está mamá... -lo abrazó en un mar de lágrimas- Quédate conmigo, ¿si? Quédate con mamá

-___... -Natsu dio unos pasos hacia ella preocupado- Oye...

-Papá, duele... Papá...

-Ya basta. Yo no tengo hijos. Yo no tengo familia -soltó enfadado- Eres solo un libro que escribí

-Papá... -estiro su mano hacia el azabache

-¡Desaparece de mi vista! -gritó activando su magia hasta hacerlo desaparecer de los brazos de ___