La única razón® #Wattys2020

Owen! Owen!

Aún seguía con esas locas ideas, la vida me estaba golpeando de la peor manera, un bebé que no esperaba, la sombra de un pasado que me condena, el amor de un chico que jamás podré tener y un ángel al que tengo que ayudar, eso era demasiado para mí...

En fin, todas las cosas que pasaban por mi mente me hacían sentir débil, no tenía fuerzas para levantarme de la cama, tenía mucho sueño, hasta los huesos me dolían, este bebé me quitaba hasta el aliento y aunque tal vez no era del todo malo no podía tenerlo, no debía tenerlo, si ya con un par de meses me sentia mal como llegaría al último mes?

_quién soy yo? tú que crees Owen?  - le hablé a mi gato y el solo me miraba maullando y ronrroneando

Me puse de pie frente al espejo con la poca fuerza que tenía y empecé a tocar mi vientre, levantando mi blusa, imaginando como sería de aquí a unos meses cuando ya se vea mi vientre abultado

Tal vez esta historia fue escrita para Adam y para mí, pero.... Reik! donde quedaría él? Todo era confuso, no podía ni imaginar eso

Además Adam era un ser celestial y aunque su alma pudiera alcanzar la redención jamás podríamos estar juntos porque yo soy una mujer común y corriente, el viviría eternamente y yo moriria como cualquier mortal

Continúe mirándome frente al espejo viendo mi abdomen que ya parecía crecer, como era posible que estuviera viviendo mi propia historia fantástica, era una película al estilo romance trágico, jamás tendría un final feliz, al menos para yo no...

Me hubiese gustado tanto tener el final de Bella en Amanecer II, si tan solo tuviera esa oportunidad, me metí en mi cama ya no quería pensar en el futuro aunque era inevitable...

Faltaban pocos días para el viaje de Reik, pronto estaría lejos de aquí, lejos de mi, de solo pensar en eso, sentia que se me rompía el corazón en pedacitos, sin querer terminaríamos contando la misma historia que nuestros abuelos Marcela Jonz y Ricardo Dazza

Ya era hora de dormir, de lo contrario terminaría saqueando la cocina en un ataque de hambre, eso era obviamente consecuencia del embarazo

Después de aquella noche pasaron 2 días más, intenté calmar mi ansiedad, entre clases, tareas y las visitas de Adam todo parecía empeorar mi salud

Tenía que buscar la manera de llevar a Adam con Jazmín pero sin que lo sepa con certeza porque de lo contrario no iría, al menos ir a clases me despejaba la mente

Ya casi a la salida de aquel día de clases, el director entró a las aulas y muy a mi pesar y aunque ya me lo esperaba igual fue doloroso y triste saberlo, dio la noticia de que Jazmín se encontraba internada en una clínica postrada por una enfermedad terminal, los que no la conocieron fueron indiferentes pero los que sí la conocían y la querian, por ejemplo yo,  nos afectó la noticia

Ya había terminado el discurso del director y salimos, en ese momento sentí el impulso dentro de mi, ese valor que no tenía antes, pensar en Jazmín me daba fuerzas, si ella podía enfrentar todo eso con obediencia y tanta paz, yo porque no podía hacerle frente a mis problemas

Llamé a mis padres y les dije que tenía algo que hacer y que llegaría un poco tarde, me temblaban las piernas, me sudaban las manos, el corazón me latía a mil por hora pero nada detendría mi decisión, salí de la academia sin despedirme de mis amigas y tomé un taxi, no quería que me hicieran preguntas que terminaran por hacerme cambiar de opinión, debía ser firme, debía ser capaz de asumir esto

Desde que subí al taxi me sentía observada, vigilada, como si alguien me estuviese siguiendo, no sé porque me sentía así, tal vez Dios me estaba viendo, ya, ya tenía que dejar de lado esas ideas