Era un día muy lindo en mi planeta natal, ideal porque era mi cumpleaños. No lo llamábamos así pero después de tanto hablar con humanos se me pegó. Sí, no soy humano. Soy de la raza wicz. Déjame que te cuente mi historia.
Como dije era mi "shaina", así llamábamos a lo que los humanos conocen como cumpleaños. En realidad shaina significa cumpleaños y regalo al mismo tiempo, es una palabra del lenguaje antiguo de mi gente, en fin.
Ese día estaba en casa con mi familia, mi hermano y la gente que amaba. Y lo que menos pensaba era lo que me estaba por pasar, si bien yo no era la mejor persona del mundo no era malo, me ganaba la vida.
En mi planeta se acostumbraba a dar los regalos donde termina el límite de la nación y comienza la otra, esto es así debido a la guerra interna que hay y este es un símbolo de reconciliación que algunos hacemos desde que inició la misma.
Si no entendieron les contaré. En mi planeta la tierra estaba dividida por naciones y dependiendo de la kinesis natal se determinaba a la nación a la cual pertenecías. Algo muy estúpido la verdad. Era algo de años, en el pasado hubo una guerra muy grande que nos llevó a dividirnos y desde ese momento simplemente nos separamos.
No veía a nadie de otra nación desde mi nacimiento, la gente con la que convivía era toda igual: alta, de ojos negros o azules, o de piel blanca, gris o azul claro. Excepto mi hermano, él por alguna razón tenía un ojo de color rojo aunque nadie sabía porque, en fin, me estoy desviando.
Por eso se acostumbra que cuando llega el shaina el regalo sea entregado justo al límite de la nación, algo un poco arriesgado la verdad porque si pasas al otro lado un guardia no tardará en matarte.
Llegó la hora del shaina y el que me lo iba a entregar era mi hermano, entonces salimos y mi familia se quedó en casa. Apenas salimos mi hermano tuvo un mal presentimiento y yo veía a lo lejos en la nación Pyro llamaradas gigantescas, pero no nos importó. Quizás era una especie de ritual de ellos o algo así, los pyros están un poco locos siempre se escuchan cosas extrañas por ese lado.Por cierto, casi me olvido. Mi nación es electro.
Por precaución nos dirigimos al otro límite que teníamos, que era Hydro. Al llegar mi hermano Orthi me dio el regalo:
—Papá me dijo que ya estás preparado para tener un arma así como la mía —dijo sonriendo.
—¿¡Enserio Orthi?! —salté entusiasmado.
—Así es Arth.
Y sacó el regalo más ansiado que cualquier entrenador de kinesis podría desear. Una wand. Con este objeto ya podría ser soldado de mi nación, podría hacer justicia algo que siempre había querido, además mi poder crecería y podría cuidar a quienes amo.
Pero apenas toqué la wand se sintió un fuerte estallido el cual venía justo desde mi casa y ahí ocurrió. Había empezado todo...
Mi hermano y yo corrimos en dirección a mi casa y lo único que había era...Nada. Todo se lo había llevado o comido algo, y caí de rodillas deseando haber estado ahí para mi familia. Entre todo el estruendo escucho a mi hermano:
—¡ARTH! ¡LEVÁNTATE! ¡NOS ATACAN!
—¡DÉJAME!...dije sollozando... ¡YO DEBÍ HABER ACABADO ASÍ!
Orthi se agachó, me miró a los ojos y dijo:
—¿Qué acaso me vas a dejar solo? ¿Cómo piensas que me sentiré si mi única familia muere aquí?
Esas palabras me despertaron.
Desde ese momento juré venganza por el que había causado todo esto, juré que lo encontraría y lo mataría con mis propias manos.
Me levanté con mi hermano y corrimos hacia un lugar seguro. En un momento logré divisar una nave que nos seguía. Poco a poco nos empezó a pisar los talones, así que tomé mi wand e hice lo que había aprendido en el entrenamiento. Pude derribarla mientras Orthi hacía una barrera de rayos que nos protegía de los láser y misiles que nos disparaban.
Entre todo el estruendo escuché que mi hermano me decía algo.
—¡Creo que nos atacan Toarest!
—¿Cómo lo sabes? —dije gritando, no se oía nada.
—¡Por qué les caemos mal, somos lo contrario a ellos, nos envidian y además porque acabo de ver un TRAM!
—¡¿Un TRAM?! ¡Esos son leyendas!
—Acabo de ver uno ¡CORRE!
—Pero, ¿Qué TRAM es?
—¡Un TIGRE!
Al escucharlo, corrí lo más rápido que pude.
Los TRAM, según las leyendas, son animales procedentes de otros planetas con la capacidad de razonar o algo así, pero lo único que tenía que saber era que las leyendas decían que el TRAM más peligroso era el tigre.
—¿Y por qué nos atacarían? ¿Por esa estupidez de que les caemos mal iniciarían una guerra? —pregunté con la voz cada vez más cansada.
—No lo sé, Arth...
Mientras mi hermano volvía a hacer las barreras yo tenía que encontrar el lugar seguro, y lo hice. Encontré una escotilla, la cual abrí instintivamente. Había una escalera y ambos bajamos.
Llegamos al lugar seguro y para mala suerte de nosotros nos dimos cuenta que estábamos entre hydros. Entre todas las explosiones, disparos, y gritos no nos dimos cuenta de que habíamos cambiado de nación.
Todos nos apuntaron con sus armas.
—¿Quiénes son ustedes? —dijo un hombre desde el fondo con una voz fuerte y grave.
—Afuera...tram...cierra...todo —dijo mi hermano con la voz entrecortada, estaba muy cansado y se desplomó.
—¿Qué cosa?¡No entendí nada! ¿Quién es este bicolor? ¿Qué hacen aquí?
—El bicolor es mi hermano y ¡¿Qué acaso no escuchan todas las explosiones?!— les grité.
—¡Tranquilo chico! —dijo el hombre, haciendo una seña para que los demás bajaran sus armas.
Pasó un silencio eterno y luego el hombre dijo:
—Parece que un tercero nos ataca, y no podemos seguir con esta tonta guerra interna.
—¿¡Pero general?! —se escuchó la voz de un soldado.
—NADA —levantó el tono, el general desafiante—. Creo que empezó una guerra, de verdad —y miró el techo—. Yo por lo menos haré las paces con la nación Electro.
El general se volvió hacia mí y preguntó:
—¿Cómo se llaman?
—Mi nombre es Arth y el dormido es Orthi.
—Así que dos electros, sus nombres son todos iguales —rió sarcásticamente.
Y todos rieron con él, luego se quedó serio y se me acercó.
—Me llamo Khar —dijo señalándose con el pulgar—. Y soy general y gobernador de la nación Hydro.
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Elements "Relatos de Oíkanguy"
Science FictionEn un sistema solar, dentro de una galaxia exiliada por el espacio exterior. Los elementos han formado extraños compuestos que han dado como resultado una vasta cantidad de vida "alienígena", pero la diversidad de estos hará que los conflictos abun...