¿Intentar Llevarnos Bien? ¡Imposible!... O No?

•9•

Narración general:

-¿Hicieron qué?- preguntó entre risas el uruguayo mientras subía las escaleras.

-Apostamos a que papá le ganaba en la pelea. Y ahora los boludos nos deben una fiesta.-respondió el portador del sol.

-¿Cuándo?

-Mañana en la noche. Y todavía no saben pero México ya encargó el alcohol.- Dijo en tono bajo lo último.

Ambos hermanos soltaron una risa y se separaron para entrar a las habitaciones, en las que dormirían durante estos meses, ya que estaban una frente a la otra.

Ya habían cenado.

España y Reino Unido no se dirigieron la palabra en toda la cena, aunque sus parejas intentaron iniciar conversación entre todos, incluyendo a sus hijos, al final comieron en silencio.

Usa, Canadá y Australia intentaban formar en su mente una buena excusa para que sus padres, España e Italia, se fueran de la casa la noche siguiente, para poder hacer la fiesta. Así que ellos no prestaban mucha atención a los intentos de conversación.

México, Chile y Argentina también estaban planeando cosas en su cabeza, pero no excusas, si no desastres para cuando emborrachen a los ingleses. Así que ellos tampoco estaban interesados en la conversación.

Uruguay y Nueva Zelanda habían participado de la conversación, pero ambos estaban ocupados planeando como matar al otro en el juego que estaban jugando antes de bajar. Su partida había terminado en un empate así que se prometieron la revancha.

Ahora todos estaban en sus habitaciones.

Francia, como siempre que estaban en casa, empezó a pasar por las habitaciones para desearles las buenas noches a sus hijos.

-Bonne nuit - Zeeland éteint ça. ( Buenas noch- Zelanda apaga eso.)- ordenó el francés al ver al zelandés y al uruguayo aún jugando videojuegos sobre el colchón inflable.

Con una queja el inglés obedeció y se acomodo en su cama al igual que el uruguayo.

Francia le volvió a desear las buenas noches. Zelanda le devolvió la frase. Las zarigüeyas y el pequeño kiwi del zelandés tomaron esa frase como señal para subir y acurrucarse junto al país en la cama.
Francia vio eso con una sonrisa para después cerrar la puerta, ya que la luz estaba apagada hace rato.

-Bonsoir Australie.( Buenas noches Australia.)-Dijo asomándose por la puerta viendo a Australia ya en su cama junto a Estrellita y Hugo.

-Good night.( Buenas noches.)- respondió.

El francés apagó la luz y cerró la puerta.

-Bonne nuit USA ( Buenas noches Usa.)

-Good night. (Buenas noches.) -respondió medio dormido.

Francia cerró la puerta y fue con el último que faltaba.

-Bonne nuit Canadá.( Buenas noches Canadá.)

-equally. ( Igualmente.)

Francia repitió la acción y terminó yendo a su propia habitación para acostarse con Reino Unido.

...

En la habitación de Canadá, argentina se despertó de repente porque había escuchado un ruido.

Miro a la cama de Canadá y se dio cuenta de que el dueño no se encontraba en ella.
Vio la habitación a oscuras tratando de ver si el canadiense se encontraba en ella, pero lo único que logró ver fue la cabeza del animal colgada en la pared.

A Argentina nunca le habían gustado esas decoraciones. Ver esas cabezas lo inquietaban y hasta le daban algo de miedo, así que ver esa cabeza con ojos que brillaban un poco, por la luz que entraba por la ventana, era algo que exaltó al argentino.

Se acostó de nuevo dándole la espalda a la cabeza de alce. Tal vez Canadá fue al baño, no debía preocuparse.

Empezó a escuchar ruidos y vio a la puerta descubriendo que los pasos se acercaban cada vez más.

"Seguro es Canadá" pensó el argentino.

Se volteo cuando escucho un ruido detrás de él. No era nada pero otra vez vio a la alce de la pared.

La puerta al final se abre, y quien lo hace no prende la luz, pero con la luz de la ventana el argentino logra vez una figura alta con cuernos y el mismo brillo en los ojos que el alce.

Argentina pegó un grito y revoleo una almohada golpeando a quien quiera que sea, ya que pensó que era un monstruo.

Al supuesto monstruo se le callo la cabeza la cual rodó hasta quedar frente al país asustado quien al verla volvió a gritar.

Esos dos gritos fueron suficiente para despertar a México, quien no tenía el sueño pesado como sus padres, y a Australia, quienes fueron a ver quien causó todo ese ruido.

Finalmente las luces de la habitación se encendieron dejando ver a Canadá en la puerta con la almohada en manos. México y Australia no tardaron en llegar.

-Wey ¿Porque gritas como loco?

-Ese pelotudo me asustó! ¿Por qué entras así con eso?-dijo apuntando a la cabeza de venado que estaba en el piso.

-¿Porque tienes eso?- preguntó el australiano enojado.

-Era un regalo. Creí que te había gustado la mía, porque no dejaban de mirarla, así que te traje una para darte una sorpresa.-Explicó el de rojo y blanco.

-¡Me asustaste! Y no, no la quiero!

-Per-

-¿Cuantas más de esas tenés?- Siguió con el enojo el australiano.

-Emm...

-Canadá!

-Mejor vuelvo a dormir, pendejos.- término para volver a la habitación de Usa.

Al final Usa volvió a guardar el regalo, que ya no sería regalo, y todos volvieron a dormir después de que Australia regañara a Canadá por cazar animales, otra vez.