"Gloria" (Sebaciel)

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Las sedes shinnigamis eran enormes, con distintos departamentos para cada especialidad, para medir la vista, para preparar los lentes hechos por "Padre", el departamento de recursos humanos, los patios de descanso, y donde empieza todo, el despacho para retirar su guadaña personalizada.

-Buenas tardes, vengo a retirar mi Death Scythe, aquí tiene mi registro-Hablo dulcemente un joven pasando el registro firmado y registrado por sus superiores.

-Oh, claro, dame un momento-La recepcionista tomo el papel y salio en busca de aquel artefacto.

Los Shinnigamis que pasaban veían al joven ahí parado, muchos susurraban, otros murmuraban y otros simplemente fruncían el ceño al verlo esperando.

"El nuevo" Le llamaban apenas de que había pasado cierto tiempo desde que llego a ese extraño mundo.

Ciel Phantomhive, ese era el nombre en el cual estaba registrado, un joven Shinnigami de apenas 14 años quien tenia un registro perfecto, en todas las especialidades había sacado una AAA, el mayor rango, en su examen final como recolector de almas fue el mejor a pesar de que tuvo que ayudar a su compañero quien entro en pánico en plena recolección, pero aun así, todo salio perfecto.

Por su gran promedio los directivos le dejaron tener aquellos ojos especiales ¿Los verdes? No, esos no, Ciel gano conservar sus hermosos ojos zafiro, aun que usaba un parche la mayor parte del tiempo por una gran herida que se hizo en uno de sus ojos, aun así llevaba las condenadas gafas, aveces le molestaban pero quedaba ciego sin ellas, aun que solo le sirvan para uno ojo, que mas daba.

-Aquí tiene joven-Regreso la mujer con una gran sonrisa pasandole un hacha, un mango perfecto de madera con detalles azulados como pidió en su dibujo personalizado, un filo perfecto al cortar acariciándolo con cuidado.

-Muchas Gracias-Agradeció alejándose del lugar guardando su nueva arma en un costado de su cinturón especial.

No le importaban las miradas, los susurro y quejas de los demás compañeros que tenia, realmente se acostumbro a ellos, no los necesitaba, no necesitaba a ninguno de esos hipócritas, a los únicos que necesitaba eran...

-¡Ah! ¡Ahí esta mi dulce bebé!-Un grito lo saco de sus pensamientos antes de ser tomado en brazos con fuerza, casi ahogadolo-¡Oh! ¡Por fin!~ Que hermosa arma tienes ahí ¡Ah! ¡Rápido! ¡Ronald! ¡Mi cámara! -Chillaba Grell mientras apretaba contra su pecho al menor quien trataba de respirar de nuevo.

-Suttcliff senpai, creo que lo estas matando-Dijo el rubio entre los tres sonriendo divertido antes de sacar la condenada foto que le pedía el mayor, Grell le dio un dulce beso en la mejilla al menor antes de soltarlo riéndose al ver su sonrojo.

-¡¿Por que?!-Chillo el menor avergonzado, los demás shinnigamis se reían a sus espaldas.

-¡¿USTEDES QUE MIRAN!?-Con furia Grell gritaba ahuyentando a los demás subordinados.

-Felicidades pequeño, ahora tienes tu arma mortal, podrás salir de caza con nosotros-Hablaba divertido Ronald, otro joven Shinnigami siendo de menor rango contra el pelirrojo.