and you...belive in the magic? (Luke Hemmings y tu) TERMINADA

capitulo 48

Narra Luke

Estábamos todos un poco impacientes, preocupados, y nerviosos.
- ¿Creen que le habrá pasado algo?- pregunté por milésima vez.
- No lo sé Luke- dijo Calum mordiendo sus uñas- no lo entiendo, ella dijo que estaría aquí, ¿como es que aún no ha llegado? ¿como es que no contesta su celular?
- Dios mío, me estoy volviendo loco- les dije yo- No sé ustedes pero la iré a buscar a su casa
- ¿No crees que pensará que eres un acosador?-preguntó Zayn.
- ¿Que pasa si le pasó algo de verdad? ¿que pasa si no es acoso, si no que mis sospechas son reales y le pasó algo? me marcho.
- Iremos contigo- dijeron al unísono.
- Creo que deberían quedarse aquí, si realmente le pasó algo los llamaré- sonreí medio nervioso. después un rato de insistir; aceptaron.
Y es que mis miedos eran tales que pensé que me iba a morir de un segundo a otro. Me imaginaba lo peor; en mi mente era lo peor. Quería imaginar lo mejor; me repetía en mi mente una y otra vez que todo estaba bien; que ella estaba en su casa y que se había olvidado por completo de nuestra pequeña reunión; pero ya llevaba cinco horas de retraso. Normalmente si se retrasaba simplemente llegaba una hora después y avisaba por teléfono.
Mi corazón latía con fuerza; ¿y si le habían robado? o peor, ¿y si la habían secuestrado? ¡y quien no lo hubiera echo! caminando sola por la calle con esos pantalones ajustados.
Dios mío, me dieron ganas de vomitar allí mismo de tan solo pensarlo. Mientras más me acercaba a su casa, más me convencía a mi mismo de que ella no estaría allí, y sería el momento en el que mi desesperación se convirtiera en lo más pensado y menos querido.
Ya ni si quiera sabía que era lo que me pasaba con esa chica; simplemente sabía que era algo realmente grande. Si así era como se sentía el amor; pues entonces me encantaba estar enamorado, y no era tan malo como todos aseguraban, o quizás yo me fiaba mucho de las cosas que todavía no habían pasado; como pelear. Todo había sido alegría desde ese día, ¡mi vida parecía ser perfecta desde entonces! incluso hablaba más con mis padres, porque les hablaba sobre ella. Era mi tema de conversación y la razón por la cual tenía algo sobre qué hablarles, y ellos estaban encantados cada vez más; me pedían que se las presente casi todas las tardes.
Además había echo nuevos amigos. Calum, Zayn, Mike y Ashton se habían convertido en personas realmente cercanas. No eran lo que yo llamaría "mejores amigos" pero cada vez que tenía algo para mostrarles o decirles ellos estaban allí; y sentía que las personas en el colegio me miraban de otra manera también; pero yo seguía siendo el mismo. Si es que alguna vez llegaba a pertenecer a ese grupo, pues entonces era el chico bueno del grupo.
Estaba en frente de su casa. Era todo; verdad o cierto.
Era como un dulce o truco en halloween, solo que el dulce era ella, y el truco sería que le haya pasado algo. Toqué el timbre y me amarré bien la camisa que tenía puesta; era la primera vez que me presentaba ante sus padres y tenía que hacerlo de la mejor manera posible.
Mis nervios aumentaban, no sabía si estaba triste o feliz.
Toqué la puerta y sentí como unos pasos se acercaban cada vez más; a diferencia del rostro de su mamá, o el de su papá, fue otra cosa.
La miré. Su rostro se veía mal, se veía triste y había llorado, eso era seguro. Fruncí el ceño y el celular comenzó a sonar. La puerta se cerró en mi rostro y comencé a sentirme culpable por algo que no sabía que era, ¿había echo algo mal? ¿estaba enojada?
- ¿Hola?- pregunté.
- Oye, mamá dijo que _____ pasó por aquí- me dijo Calum- ¿que sucede?
- Lo averiguaré ahora- corté el teléfono y volví a tocar la puerta. No me abría, ¡maldición, maldición, maldición! me comencé a desesperar, comencé a buscar una manera de entrar, ¿que le sucedía? ¿que era lo que le había echo?
Me imaginé lo peor; pero no sabía que era lo que podría haberla echo enojar.
- ¡Abre la puerta, por favor!- le pedí, pero nada.- Vamos, ¡que te sucede! me estás matando

Nada. Nada de nada. nada de nada de nada. Estaba comenzando a preocuparme demasiado; esa chica quería matarme y parecía hacerlo de maravilla.
- ¿Podemos hablar, si quiera? - pregunté nuevamente.
- ¡Vete!- escuché- ¡no quiero verte, quiero que te vayas!- gritó. Una punzada en el corazón; era un avance, por lo menos. Ahora me gritaba; después me hablaría, quizás luego un abrazo, y un beso.
- ¿Que te sucede?
- ¡Quiero que te vayas! no lo repetiré, te odio Luke, ¡te odio!- punzada en el corazón nuevamente. Tenía que ponerme a llorar allí mismo, ¿o ir a llorar a casa? Quería desaparecer.
Me senté en el borde de la puerta y me quedé allí.
- ¿Puedo saber lo que hice?- pregunté. Media hora más pasó. - Bien, quizás no quieras hablar, pero quiero que sepas que , quizás no quieras responderme en este momento, pero desde que tu llegaste mi vida ha cambiado y solo para bien, ¡maldición, chica! Necesito besarte. Pasado mañana es la boda, ¿no irás?- nada- Te necesito- el sueño me iba consumiendo, y mis te necesito no iban a resultar- te necesito...- Yo... yo... yo te amo.