La televisión no ha sido tu primera opción de entretenimiento en mucho tiempo ya. Pero cualquier buen día tomarás el mando, lo encenderás y buscarás algún canal familiar, tal vez con la ilusión de hallar una vieja película de la disfrutaste hace años, con suerte alguna serie que conozcas o incluso averiguar qué están viendo los niños de hoy en día.
Pero ¿Ahora?
Ahora no quieres ni verla.
Mucho menos en horario de noticias.Hay tantas cosas sucediendo a la vez. Tu cerebro no puede manejarlas, tu cabeza te dice que pongas pausa.
Alto.
Es demasiado.
Detente.Por favor.
Escuchar lo que pasa en tu ciudad es suficiente.
¿Saber que ocurren cosas tanto similares como peores en las ciudades aledañas? ¿En el otro extremo del país?El estómago se te revuelve ¿Lo notas, verdad?
Ese nudo en tu vientre. Parece hecho de masa en un horno, porque empieza a crecer de forma incontrolable.Y sigue. No se detiene.
Te llega hasta la garganta. Y te arde, como si hubieras gritado tus penas al viento, pero ni de lejos te da la misma satisfacción.
No.
Todo lo contrario.
Te ahoga. Te hunde.
Pero siguen llegando.
Huracanes. Tormentas tropicales.
Terremotos. Explosiones.Violencia en todas partes.
Muertes que se gritan a los cuatro vientos. Y otras muchas que nadie nunca sabrá.
Abusos que crecen en silencio. Violaciones que nunca saldrán a la luz.Los ojos te pican. El dolor de extiende desde tu sien al resto de tu cabeza.
El ruido blanco en tus oídos a la hora de dormir es más eficiente que cualquier cantidad de cafeína.
Y no lo entiendes. De ninguna manera.
Tu pecho se aprieta cada vez que escuchas a la gente decir que esto pasará, que todo va a mejorar.
Que algún día el mundo volverá a ser como antes.
No sabes... No entiendes como la gente dice esas cosas.
¿No ven ellos lo mismo que tú?
¿No escuchan lo mismo que tú?
Una pregunta contundente continúa dando vueltas en tu mente.
¿No ven que el inminente Fin del Mundo, el Apocalipsis que está desarrollndose lentamente frente a sus propios ojos?
Casi un año desde mi última entrada aquí... Vaya. Estoy sorprendida.
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Desahogue
RandomHistorias que surjen entre la lluvia, el llanto, la tristeza, la luna, el dolor, la traición... ¿Qué? ¿Falta el amor y la alegría? ...Dejame decirte que son las más jodidas de experimentar