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Arima

—Disculpe —llamé la atención de uno de los guardias — ¿sabe dónde queda exactamente la legión de reconocimiento? Estoy algo perdida —confesé con algo de vergüenza.

Este me miró despectivamente.

—Disculpa preciosa, no lo sé pero si me acompañas puede que recuerde —me guiñó un ojo, coqueto. Hice una cara de asco—. ¿No quieres? Todas las mujeres son iguales: Unas put-

No terminó de hablar puesto que bajé de mi caballo y le di un buen golpe en su mandíbula. Dejándolo atónito por el golpe.

Lo miré con asco, este se encontraba en el suelo, mirándolo sorprendido.

—Ten más respeto, idiota —escupí.

《¿Por qué todos son así de estúpidos? En la policía también habían muchos de estos... Corruptos y asquerosos.》

—¡Ven aquí zorra!

Evadí su golpe y le di una patada, haciendo que caiga su rostro al suelo, duramente. Clave mi rodilla en su espalda y estiré su brazo, haciéndolo crujir.

—Estás frente a un teniente de la policía militar, sucio y asqueroso bastardo. Ten más respeto, te he dicho —tiré más de su brazo, con odio.

—¡Oye! ¡Déjalo! —elevé mi vista, viendo a la gente mirarme con asombro y sus compañeros, con algo de temor.

Me levanté como si nada y sacudí mi ropa.

—Cuida de tu compañero, si no quieres que acabe entre las rejas o peor aún, en el estómago de un titán.

—¿Quién te crees que eres?

Lo miré de reojo.

—Estás hablando con una de las guardaespaldas personales del rey. Teniente Arima —amenacé y quité mi capa, dejando ver mi chaqueta con el escudo—. ¿Quieres tener problemas conmigo?

Tragó duro.

—Eso creí. ¿Dónde está el capitán Erwin?

Señaló con algo de temor la dirección.
Agradecí con un gesto y volví a subir a mi caballo.

Tal vez estuve mal mintiendo de esa manera... Ya no era teniente de la policía militar... ¡Bueno! ¡Ya es parte del pasado! Solo me salvé el trasero y le di una lección. Eso es todo...

Zoe

—¡Oh si! ¡__(tn) es muy genial! Incluso el propio rey solicitó que no se fuera...

Erwin me miraba intrigado.

—¿Y por qué quiere venir aquí?

—Si es una espía o nos trae problemas la asesinaré —Levi amenazó.

—¿Sabes? Es gracioso porque ella mide más que tú, tal vez un poco menos pero es completamente diferente a ti —reí.

— ¿Y eso que tiene que ver conmigo?

— Ya lo verás cuando la conozcas —sonreí y miré al capitán —. Volviendo al caso de __(tn), dice que quiere divertirse.

— ¿Diver...tirse?

Asentí.

— ¿Que se cree que es esto? ¿Un lugar de juegos o qué? —escupió irónico, Levi.

Negué.

—Para nada. Se lo toma muy en serio. Solo que está algo mal de la cabeza.

—Como tú —soltó el enano nuevamente.

Dudé varias segundos pero asentí.

—Algo así...

—¡Oh, genial! ¡Tenemos otra loca! —dijo exasperado Ackerman.

—¡Espera, espera! Ya la conocerás... Prometo que no los defraudará. Solo es algo... inquieta.

—Confío en ti, Zoe. Si dices que ella es una buena opción para nuestro equipo, te creo. Solo espero que no muera apenas salgamos de las murallas.

Asentí.

Tocaron la puerta donde nos encontrábamos.

—Ah, debe ser ella —fui a abrirla y ahí se encontraba mi pequeña amiga—. ¡__(tn)!

—¡Zoe! —me abrazó feliz.

Se separó de mi y entró a la habitación, cambiando completamente su actitud a una más seria.

—¡Teniente Erwin! Un gusto conocerlo al fin. Soy __(tn) Arima. Dígame, Arima, por favor —se presenté.

Este se paró y se acercó, saludando.

—Un gusto tenerla en la legión de reconocimiento, señorita Arima.

Esta sonrió feliz.

Luego su vista se posó en el enano y sus ojos se iluminaron.

—¡Tú vas a caer por mi! —lo señaló.

—Ay no...—dejé escapar.

Levi la miraba indiferente.

—¿Que dices, mocosa?

—Vas a enamorarte de mí.

Erwin y yo la mirábamos incrédulos ante la confesión de esta.

No creí que iba a tener como objetivo a Levi... ¡¿Justo al capitán Levi vas a elegir, __(tn)?!

•••
¡hola y adiós!

Vas a caer por mí || Levi Y Tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora