EL GATO DE LOS CACHORROS

3. Conociendo El Pasado

!Defsoul!— grito YoungJae buscando desesperado a su gatito. El apenas tenía unos meses y lo había obtenida gracias a su mamá.

El gatito maullo dando a entender su ubicación, el pequeño YoungJae corrió desesperado hasta encontrar a su mejor amigo.

Su relación era bastante estrecha y de hecho estuvo presente en su primera transformación a un humano. Un humano con lindas orejas y una cola larga y negra.

Def, deberías acompañarme, me siento solo sin ti— hablo su amigo, el gatito movió sus orejas y maullo— conviértete en humano ¡Quiero salir contigo!— se quejo. Apenas tenía dos años de haberlo conseguido.

Bien, vamos— le hizo caso a su dueño después de todo era su humano. Sabía que a este le gustaba mucho verlo de esta manera aunque no entendía muy bien porque.

Cuándo Def obtuvo su primer celo se asustó. Jamás se había sentido tan atraído por su humano. De hecho YoungJae lo ayudo bastante. Esos días de celo YoungJae tocó más de la cuenta.

Pero en cuanto llegó Zelo a la vida de su humano todo cambio. Ahora YoungJae se la pasaba en el hogar del otro. El gato se sentía extraño, jamás tuvieron algo más, pero se sentía celoso. Muy celoso.

Lo siento Def— una noche como cualquiera, YoungJae le reveló que lo dejaría— ya no puedo cuidarte. Siento mucho tener que hacer esto. Si te soy sincero me mudaré con Zelo a un lugar donde no admiten híbridos... Pero no te preocupes, te buscaré otro hogar— hablo el humano con algo de culpabilidad. Estaba asustado, no quería que su gato jamás le volviera a hablar.

Def por su parte se trago sus lágrimas. Ya había escuchado a su humano hablar con sus papás. Pero quiso creer que había escuchado mal. Ahora sabía que no... Quería dejarle de hablar, le dolía todo eso. Había crecido al lado de su humano. Y habían compartido muchas cosas, además de que había planeado decirle sus sentimientos.

Lo siento... También lo hago porque el departamento queda más cerca de mi escuela— YoungJae sonrió intentando hacer que el gato no se sintiera culpable.

Unas semanas después YoungJae hablo con su hermano Kihyun, y este le dijo que su amigo podría cuidar de Def.

¡Def ya te conseguí un hogar!— llegó todo emocionado y el gato maullo, no había querido transformarse desde que se enteró que prácticamente lo regalarían— supongo que lo conoces, es amigo de mi hermano. Se llama Hyunwoo— comenzó a preparar las cosas.

Def no contesto, solo vio como su humano guardaba todas sus cosas con emoción. Supuso que tenía prisa, se recostó a dormir y al día siguiente despertó en una casa completamente desconocida. Se asustó al principio y se molestó pensando que YoungJae no había tenido ni siquiera el descaro de despedirse.

Al fin despiertas— sonrió su nuevo humano— YoungJae me habló de ti y por cierto este se acaba de ir. Estaba esperándote, pero no despertabas así que dijo que regresaría en la tarde para despedirse de ti— se sentó. Y el gato maullo en disconformidad.

Hyunwoo no sabía que hacer. Se sentía algo incómodo ante el silencio. Comenzó a ver hacia todos lados, jugando con sus manos un poco sudorosas. Hasta que al fin se le vino otra pregunta.

¿Te llamas Defsoul?— preguntó, era algo estúpido. Era obvio que ya sabía del nombre de este, pero no encontraba mejor manera que esa para iniciar conversación

¿Puedes cambiarme el nombre?— fue lo primero que dijo. Si ya no iba a volver con YoungJae de nada le servía ese nombre.

¿Por qué? Digo si puedo, pero es algo extraño. ¿No ya estás acostumbrado al otro?— aunque preguntó supuso que le había dolido al híbrido que lo abandonara su dueño.