Capítulo XXIX

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Narrador

La joven peli verde solo seguía en silencio a Ryuho quien solo pensaba en el reactor.

Yumire: *desviando la mirada. 💭 ¿Como estarán los chicos?, ¿Poseidón castigará a Itsuki por mi culpa?... *frunciendo el ceño*. Si... es mi culpa, yo lo hice hacerlo, hice que luchara por que le dije de su madre... pobre..

La joven se encontraba caminando detrás de Ryuho hasta que se detuvo.
Mientras que en otro lugar se encontraba un hombre de cabellos azules sentado en lo que parecía ser un trono, su mirada no tenía brillo y su voz transmitía superioridad y temor al joven de cabellos plateados que se encontraba arrodillado.

??: *serio. ¡No cumplieron con su palabra!
??2: *preocupado. Mi emperador, yo...
??: *serio. ¡Calla Sorrento!, tu estás perdonado pero este miserable de Athena....

El general marino solo frunció el ceño al escuchar a su dios llamar así a su hijo pero no podía hacer nada por él, ya que ese que estaba hablando en esos momentos era su dios y no debía llevarle la contraria a sus ideales, así que no le quedo más que tragarse la amargura y soportar ver a su niño ser castigado a manos de su emperador.

Julián: *serio. Itsuki, habla si no quieres que tu castigo sea severo.

El menor solo bajó su mirada para evitar contacto visual con el dios, aquel acto indigno al rey de los mares que solo con su tridente le dio un fuerte golpe en el hombro del peli plata quien solo hizo un gesto de dolor.

Julián: *serio. ¿Te estás burlando de mí?
Itsuki: *cabizbajo. No mi señor... jamas  quise hacer algo para ofenderlo...
Julián: *serio. Entonces, ¿por que no me miras a los ojos?, ¡¿acaso eres un cobarde?!

El dios volvió a darle un golpe pero esta vez fue en el otro hombro.

Julián: *serio. ¡Habla hijo de la Luna!

El general al escucharlo solo corrió hacia donde estaba su hijo y lo ayudó a levantarse para después abrazarlo.

Sorrento: *preocupado. Mi señor, no siga más...
Julián: *serio. ¿Qué?, ¿qué este niño fue reclamado por Artemisa?, ¿qué cuando su madre estaba embarazada de él fue visitada por Artemisa?, ese secreto que quedó entre tu, ella y mi contenedor...
Sorrento: *preocupado. El no tiene la culpa de los errores que cometimos en el pasado...
Julián: *serio. Ese niño... sabes que.... ahora que su madre ya no va a renacer por que llegó el fin de Hades... este niño recibió la bendición de Artemisa...

Aquellas palabras provocaron que el joven de lira sintiera una punzada en su pecho, haciéndolo caer al suelo de rodillas.

Julián; *serio. Por el momento esa diosa no te reclamara... por eso..
Itsuki: *cabizbajo. Atravieseme con su tridente... si no soy de Athena... ni de usted... no merezco vivir...
Sorrento: *preocupado. Hijo...
Itsuki: *cabizbajo. Por poco hago que usted cayera en la oscuridad de Marte... e incluso dejé que el puesto de mi madre me afectara .... luche por que sentía que era lo correcto....
Julián: *serio. ¿Y estas satisfecho?
Itsuki; *cabizbajo. No, mi señor... no lo estoy.

El de cabellos celestes solo tomó su tridente y le proporcionó otro golpe al menor, haciendolo caer.

Julián: *serio. Entonces, ¡quieres morir a mis manos?
Itsuki: *en el suelo. Con tal de no meter en problemas a mi madre y a mi padre... inclusive a usted y a los amigos de Yumire... seria un gusto.

El dios solo pisoteo al menor y después elevo su tridente para prepararse.

Sorrento: *preocupado. ¡¡¡Nooo!!

♧El camino hacia la verdad♧(Saint seiya Omega)《Terminada》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora