Capítulo XXXIV

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Narrador

La de Casiopea solo sonrió y corrió hacia el de aries para abrazarlo, no sabía el por qué pero solo lo hizo.

Yumire: *sonriendo. Señor Kiki, gracias por darme la razón... había perdido nuevamente mi esperanza... soy una tonta.
Kiki: *sorprendido. Hey, tranquila...

Cuando vio lo que estaba haciendo, solo lo soltó y se sonrojó.

Yumire: *jugando con sus dedos. Lo siento mucho... no quise ofenderlo... yo.. soy una simple.. amazona de plata... lo siento que irrespetuosa soy.

El de cabellos naranja solo comenzó a reír ante la actitud de la joven, que para evitar que se siguiera sintiendo mal solo le acarició la cabeza.

Kiki: *sonriendo. No te preocupes, solo estaba bromeando, además... tendrás el papel muy importante en esta guerra.
Yumire: *arqueando una ceja. ¿Cuál?..
*desviando la mirada*.¿el de estorbar?
Kiki: *sonriendo. Ia te otorgó ese polvo de rosas de cristal para que cures a tus compañeros en esta batalla.

La peli verde solo sonrió ampliamente y llamó a su armadura para portarla, tan decidida a luchar, comenzó a correr hacia la salida del templo pero esta solo fue atrapada por Kiki, quien al escuchar voces la escondió entre su capa.

Yumire: *tratando de moverse. Señor Kiki de aries... sueltenme...

El de aries solo le tapó la boca para que no la escucharan ya que temía que Marte o alguno de sus marcianos estuviese rondando a los alrededores de el templo. A los pocos minutos Kiki se percató de que solo eran los jóvenes de bronce, a quienes comenzó a llamar para ayudarlos, pero al ver que el de Pegaso estaba por atacarlo, solo descubrió a Yumire para que frente a él, pero como Koga ya no podía retroceder con su puño solo lo detuvo para evitar cualquier daño hacia la chica.

Koga: *sorprendido. ¿Y-y...?...¿Yumire?
Soma: *sonriendo. ¡Hey, tomatito!

La de Casiopea solo sonrió para después acercarse a sus amigos a quienes abrazó rápidamente.

Yumire: *sonriendo cálidamente. Yuna, Koga, Soma, Paulina, Haruto.... y... Ryuho.

Se separó de ellos para quedar enfrente del de dragón, quien al verla tranquilizó su inquieta alma y la abrazó.

Ryuho: *preocupado. ¿Te encuentras bien?
Yumire: *sonriendo cálidamente. Claro, incluso podría decir que mejor.
Ryuho: *serio. ¡No vuelvas a irte así!
Yumire: *avergonzada. Lo siento, pero debía entrenar, además... este viaje me dejó una gran enseñanza...

Después de aquel cálido reencuentro, el de aries comenzó a explicarles lo que sucedía incluso lo que haría con sus armaduras dañadas.
La de Casiopea al estar lista para la batalla, solo miró por unos momentos a sus amigos para después comenzar a caminar hacia la entrada del templo, pero sus pasos fueron detenidos por la amazona de zafiro.

Yumire: *sonriendo. No te preocupes, estaré bien.
Paulina: *seria. ¿Y volviste a usar la máscara?
Yumire: *desviando la mirada. Lo hice por mi inseguridad... además... le tome cariño a la máscara..
Paulina: *sonriendo de lado. Pero por el viaje no te cubriste el rostro.
Yumire: *suspiro. Yo se tu razón por la cual te quitaste la máscara mucho antes... pero yo... solo fue un accidente.

La peli verde solo rodeó a la castaña para seguir con su camino, pero algo que dijo la de zafiro la hizo detenerse.

Yumire: *seria. ¿Qué dijiste?
Paulina: *sonriendo. Que yo se cual es tu motivo... tal vez se rompió pero... podías conseguir otra y no lo hisiste...
Yumire: *suspiro. Para estos momentos no hay que escuchar al corazón...
Paulina: *sonriendo. Entre más lo niegues... más grande será ese sentimiento por él...
Yumire: *seria. Solo es amistad lo que hay entre nosotros dos... y nada más..

La joven de Casiopea solo se colocó la máscara nuevamente para salir del templo y vigilar, pero al percatarse de que Aria no estaba junto a los chicos, se dio la vuelta para mirarlos e interrogarlos.

Yumire: *seria. ¿Y Aria?

Aquella pregunta abrió las heridas de los de bronce, unos desviaron la mirada y otros bajaron su mirada, dándole entender a Yumire la triste noticia.

Yumire: *cabizbaja. Lo siento...
Soma: *serio. Tu no lo sabías...
Koga: *serio. No es tu culpa, debías de saberlo en algún momento.
Yumire: *desviando la mirada. Iré a fuera para evitar que cualquier marciano entre.

La de orbes celestes al salir del templo comenzó a llorar por debajo de su máscara aún que no la conocía muy bien, le había tomado cariño. Se culpaba por no haber estado en ese momento para evitarlo, pero en ese tiempo aún tenía aquel defecto para luchar... sabia que sería una carga para sus amigos e incluso en ese momento hubiesen ocurrido más pérdidas.

Yumire: *tratando de tranquilizarse. No... no debo caer nuevamente... ¡a Aria no le hubiese gustado que dejara otra vez a los chicos y menos en esos momentos!

Estaba a punto de quitarse la máscara para secar sus propias lágrimas, pero al ver a un ejército de marcianos que comenzaba a ascender las escaleras del primer templo, decidió pararse en medio de su camino para crear una distracción.

Yumire: *seria. ¿A dónde iban con tanta prisa?
Marciano: *serio. Quitate de nuestro camino si no quieres ser eliminada.
Yumire: *juntando sus manos. Oh, que miedo... estoy sola... una simple y débil joven...
Marciano: *serio. Aniquilenla y después iremos con ese traidor de aries.
Yumire: *sonriendo. No si yo se los impido.

La amazona sólo usó su cadena para atar a varios marcianos y lanzarlos lejos, pero al estar ocupada con la mitad de ejército, no se percató que los demás restantes habían comenzado a dirigirse al primer templo.

Yumire: *quitándose la máscara. Espero que estén preparados para esto... *sonriendo* mantengan la mente abierta.

La joven solo saltó en frente de los que tenía aún atados para después sonreír ampliamente.

Yumire: *sonriendo. ¡Ilusión! 🔮

Al ver que más marcianos estaban llegando al lugar comenzó a elevar su cosmos para ejecutar una nueva técnica que había aprendido durante su entrenamiento.

Yumire: *sonriendo. ¡Sobre mi maldito cadáver pasaran más a la casa de aries!

La joven solo elevo sus manos para después comenzar a marcar las estrellas de su constelación de una forma muy elegante, cosa que les hizo reír a los marcianos.

Yumire: *sonriendo. Rianse todo lo que quieran malditos...

Dijo la amazona para comenzar a desprender un humo color celeste, que comenzó a cubrir a los marcianos, pero no era una simple pantalla de humo sino que eran nebulosas.

Yumire: *sonriendo. ¡Cristalización nebulosa!💎🌌

Aquellos orbes celestes rebosaba de alegría en esos momentos, sin duda las batallas la hacían entrar a otro mundo en el cual podía ser ella misma sin temor de herir a sus seres queridos ya que los estaria protegiendo.
Solo comenzó a dar vueltas entre los marcianos para expandir las nebulosas para provocar que estos se cristalizaran.

Yumire: *riéndose. Ahora brillan más que su querido amo... pero lastima que no pueden moverse más... jajaja, *sonriendo* es una pena no poder divertirnos más... mejor voy a detener a los que se me escaparon.

La amazona sólo comenzó a saltar entre los enormes cristales de diferente color cada uno para llegar más rápido a el templo de aries.

🔮📿🔮📿🔮📿🔮📿🔮📿🔮📿🔮📿🔮
🌟En el próximo capítulo...

Yumire deberá irse y dejarle lo demás a Kiki para poder ir con sus amigos, pero al llegar a Tauro se llevará una sorpresa.

¿que sucederá en el próximo capítulo?

Ni yo lo se 🤔

🔮🌌¡Hasta el próximo capítulo!🌌🔮

♧El camino hacia la verdad♧(Saint seiya Omega)《Terminada》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora