Capitulo 13

23 5 6
                                    


Brooke.

Alguien abre la puerta del baño y me saca.

—Estaba en el baño, que está pasando...

—Tengo un problema—porque todos vienen hacia mi cuando tienen problemas.

—Y yo tengo hambre.

—No todo en la vida es comida mujer.

—Hare como que nunca escuche eso y esperare a que me cuentes tus problemas—Summer suspira y juega con sus manos.

—Creo que me gusta alguien—la observo de arriba a abajo y me acerco a tomarle la temperatura.

—Creo que tienes fiebre, debo llevarte a la enfermería—ella golpea mi mano.

—Estoy bien, deja de ser ridícula—se arregla el cabello y se mira en el espejo.

—Espera—ella voltea y me observa.

—Que, ¿acaso tengo algo en la cara? —se toca el rostro y hago que me observe.

—No, sigues igual de fea—voltea a verme mal—Es que te peinaste.

—Siempre me peino.

—Nunca te peinas—ella arruga el rostro.

—Es cierto nunca lo haces—Amy sale de un cubículo y Summer la mira sorprendida.

—Cuanto llevas ahí.

—Lo suficiente para escuchar, que a ti te gusta alguien—se acerca a Summer y lo toca el pelo—Y que tu estas peinada, eso es raro.

—Ves que nunca te peinas—ella rueda los ojos.

—Pueden dejar mi pelo en paz.

—Es cierto, mejor enfoquémonos en algo más importante—dice Amy y asiento.

—Que servirán mañana en la cafetería.

—Quien te gusta—hablamos al mismo tiempo y me observa negando con la cabeza.

—Que no piensas en algo más que no sea comida.

—No he comido desde las 6 de la mañana, claro que solo estaré pensando en eso—Amy ríe y recuerdo lo que estamos haciendo aquí.

— ¿Responderás a mi pregunta?

—No les responderé nada.

—Vamos dime quien te gusta—le digo jalando su brazo.

—Deja de comportarte como una niña Brooke.

—Me estás diciendo inmadura—empiezo a llorar.

—No llores—Summer intenta consolarme y niego con la cabeza.

—Ni siquiera sé porque estoy llorando—ella ríe y deja de abrazarme.

—Está bien es normal—me deja de abrazar y me limpio las lágrimas.

—Ustedes son más dramáticas que Nolan—ruedo los ojos.

—Nadie es más dramático que mi primo—digo mientras me dirijo al lavamanos.

—Confirmo—afirma Summer.

—Porque dicen eso, él es perfecto—me paralizo y giro mi rostro como la niña del exorcista.

—Estas bien Amy—pongo mi mano en su frente revisando su temperatura.

—Era sarcasmo—empieza a retroceder y a sacar su espejo para verse.

El porqué de tus reglas (Reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora