My Guardian Angel (Mina x tú x Sana)

#18 Sachi

"Entonces... nos iremos yendo." Mina comentó, teniendo la correa de Ray en sus manos. Esta miró a la ángel. "Si tienes algún problema, sabes que puedes llamarme."

La ángel asintió y mostró una pequeña sonrisa. "No te preocupes. Yo podré."

"Ella no tendrá un problema. Yo me encargaré de eso." Sana dijo.

Mina suspiró. "Muy bien..." Esta comentó. "Nos encontramos luego para la hora de la cena en casa?"

"No te preocupes. Yo la llevaré a salvo." Sana respondió.

"Entonces me iré yendo ahora." Mina asintió. "Lisa, Ray, vamos."

La japonesa iba a salir por la puerta, pero el peso de Ray se lo impidió.

"Ray? Vamos, amigo. Tenemos que irnos." Mina le habló el canino.

Woof! Woof!

Este ladraba en señal de que no estaba de acuerdo con lo que estaba pasando.

"Vamos, amiguito. Tenemos que irnos." Lisa trató de hablar con Ray, pero este le terminó gruñendo y mostrando sus dientes.

"Ray!" Mina reprochó.

Woof! Woof!

Ray hizo un movimiento brusco, haciendo que la japonesa soltara la correa.

El canino tomó la correa entre su boca y caminó hasta donde estaba la ángel, empujando su cabecita contra las piernas de esta para llamar su atención.

"Qué sucede, Ray?" Preguntó la ángel, arrodillándose en frente del animal.

Woof

Ray le entregó la correa y la miraba al rostro con súplica.

"Quieres quedarte conmigo?" Preguntó la ángel con un tono suave.

El perro asintió efusivamente, mostrando una sonrisa.

"Mianhae, Ray-chan." La ángel se disculpó. "Pero tendrás que ir con Mina y Lisa unnie."

La expresión en el rostro de Ray cambió, y este empezó a negar repetidamente mientras lloriqueaba.

"No llores, Ray-chan." La ángel se sentía mal por el pequeño canino.

Mina al ver la escena sólo suspiró. "T/N... podrías quedarte con Ray por mientras?"

"Eh?" La ángel miró a la japonesa. "No lo quieres llevar?"

"Bueno... se nota que Ray quiere estar más contigo que conmigo, y no lo puedo obligar." Mina dijo con una sonrisa apenada.

"Está bien." La ángel asintió. Esta luego observó a Ray con una pequeña sonrisa. "Ya escuchaste, Ray-chan? Tu deseo se volvió realidad. Te vas a quedar conmigo."

Ray ladró con felicidad y lamió el rostro de la contraria con cariño.

"H-hey~ jajaj~ entiendo que estés feliz." La ángel reía por el cariño que le estaba brindando el canino.

Mina sonrió de lado, observando las pequeñas interacciones de la menor y el canino. Esta luego miró a su mejor amiga quien sonreía de igual manera, observando la escena.

"Sana-chan?" La menor llamó, haciendo que la nombrada la mirara. "No hay problema con que Ray se quede, verdad?"

Sana negó. "Se puede quedar en la cafetería. Es bastante obediente." La mayor aseguró.