My Guardian Angel (Mina x tú x Sana)

#1 "Quién eres?"

En una cafetería posicionada en unas muy transitadas calles de Seúl, trabajaba una japonesa de nombre Myoui Mina.

Esta chica era muy hermosa, y bastante popular en la universidad en la que iba. Muchos hombres al igual que mujeres se le confesaban día a día, pero ninguno era aceptada por la japonesa.

Cuál era la razón?

Myoui Mina no creía en el amor. Esta siempre pensó en el amor como algo estúpido y una pérdida de tiempo, pero eso no significaba que ella iba a tratar a todos sus pretendientes de una mala manera.

No. No.

Myoui Mina los trataba con una amabilidad que hacía que los demás cayeran aún más rendidos a sus pies sin que ella se diera cuenta.

Era una noche tranquila, y la pequeña japonesa de cabello negro estaba cumpliendo con su horario de trabajo en aquella cafetería llamada 'TWICE&ONCE'. Esta siempre estaba repleta por personas que eran atraídos por la belleza de la japonesa aunque esta nunca se diera cuenta de aquello.

"Otro duro día de trabajo, eh?" Preguntó una de sus compañeras de trabajo, Im Nayeon.

"Si... no sé por qué siempre viene tanta gente cuando me toca trabajar." La japonesa dijo con un suspiro.

"Por qué será?" Mina escuchó a alguien decir desde la puerta.

Esta volteó y vio a una de sus mejores amigas, Minatozaki Sana. "Ya estás preparada para irte?" Preguntó esta.

Mina colocó su bolso sobre su hombro y asintió. "Si, ya estoy lista."

"Están seguras de que no necesitan que las lleve?" Nayeon preguntó con preocupación. "Ya es tarde, y ustedes saben que estas calles no son muy seguras."

"No te preocupes, Nayeonnie. Todavía hay gente andando afuera así que no tendremos problemas." Sana tranquilizó a su mayor.

Nayeon suspiró. "Bien, pero llamen apenas lleguen a sus casas." La mayor ordenó. "No quiero que nada les pase a mis mejores amigas."

"Ne~ unnie." Ambas japonesas dijeron al mismo tiempo.

"Bueno, unnie. Nos vamos yendo~" Mina, al igual que Sana, se despidieron de la mayor y salieron de la cafetería para ir en camino a sus respectivas casas.

La rutina siempre era la misma. Ir a la universidad. Después al trabajo. Y por último volver a casa con Sana para luego partir caminos.

Sana y Mina iban por el mismo camino de vuelta a casa, pero luego tenían que separarse unas calles antes de llegar a la casa de la menor debido a que Sana tenía que hacer un cruce para poder llegar a su casa.

Cuando llegaron a la intersección, Sana se despidió de Mina.

"Bye bye, Mitang." Sana se despidió de la menor. "Nos vemos mañana en la uni."

"Bye bye, Sana-chan." Mina se despidió de la peli-naranja. "Nos vemos mañana~"

Ambas japonesas partieron camino, y Mina siguió caminando de regreso a casa.

Mientras iba de camino, empezó a escuchar unos pasos detrás de ella. Al principio esta pensó que era un transeúnte, pero al examinar la calle y ver que ella era la única ahí, la hizo empezar a ponerse nerviosa.

Mina normalmente no tomaba atajos a su casa debido a que estos eran bastante peligrosos. Sin embargo, ese día lo hizo por querer perder a la persona que la estaba siguiendo.