•| ¡Te Atrapé!

8K 279 7
                                    

- ¡Oh Beck! Tomaste una excelente decisión. - La felicito Mayra.

- Si eso parece, estoy tan emocionada por que ya sea sábado, enserio de solo pensar en todo lo que haremos... - Dijo mordiendose el labio. - Pero no creo que necesite todo esto  - Dijo dudosa.

Ambas están en una tienda de lencería muy muy sexy. Mayra había insistido en ir y comprarle ropa a su amiga para su gran noche.

- Claro que si, te veras super sexy con uno de estos conjuntos. - Le dijo mientras le entregaba otra prenda a su amiga. - Ahora escoge varios de todos estos para que podamos escogerlo en tu talla y comprarlos.

Beck se observo con atención los conjuntos que su amiga me había entregado, mirando cada detalle. Su amiga le decía que era bueno llevar lencería sexy, era para atontar a los hombre y excitarlos mas, pero Beck como no sabia casi nada del sexo pues estaba siguiendo los consejos de su pervertida amiga. Después de cómo una hora al fin se decidió por uno.

Lo pagaron y se fueron a tomar un café.

Llego el tan esperado sábado, Beck estaba en su cuarto haciendo una pequeña maleta para la noche. Ya estaba arreglada con su vestido para la cena y debajo trala su sexy lencería. Eran las 7:55, faltaban 5 min para que Raúl llegara por ella, se entretuvo haciendo su maleta en esos 5 min. Cuando le llego un mensaje.

"Estoy afuera bellaquita, me muero de ganas por verte."

Con una sonrisa Beck bajo con su mochila y se despidió de su mamá, obvio su madre no sabia nada, le dijo que se iba a ir de fiesta con Mayra y que se quedara con ella a dormir.

Al salir sintió el frio que hacia pero se le quito al ver a Raúl con su traje de gala, recargado en su auto, se veía tan sexy, que no se contuvo y se le tiro encima para darle un beso. Raúl le corresponde y la ayudo a subir al auto.

- ¿A dónde me llevarás?. - Pregunto con una sonrisa.

- Es una sorpresa, no seas curiosa.

En el camino todo estuvo en silencio pero no era uno de esos silencios incomodos. Llegaron al restaurante.

se quedo asombrada al ver que el restaurante tenia una hermosa vista a la ciudad, tomaron asiento y se pusieron a platicar.

- ¿Te gusta?. - Raúl la interrumpió en sus pensamientos.

- Si, la vista es impresionante. - Le dedico una mini sonrisa.

- Que bueno que te guste.- Tomo su mano y la beso. - Bueno, ahora cuéntame de ti hermosa. Por que solo se tu nombre y que eres jodidamente caliente. - Beck río.

- Pues no hay mucho que contar. Tengo 17 años, no tengo hermanos, solo tengo a mi mamá, me gusta ver películas de terror, escuchar música y quisiera estudiar fotografia. - Dijo. - ¿Que hay de ti?.

- Oye, ¿No me dijiste que querias estudiar para ser ginecóloga?. - Le reprocho.

- Bueno digamos que fue una mentira piadosa. - Soltó una pequeña risa. - Además quería una excusa para hablarte.

- Eres una niña mala Beck. - Hubo silencio en la mesa por unos segundos. - ¡Eso me gusta!.  - Dijo sonriendo y mirándola a los ojos. - Y bueno, pues yo tengo 27 años, solo tengo una hermana, mis papas están divorciados, me gusta también la música. - Dijo. - Y me gusta el sexo oral, para que tomes nota nena. - En cuanto lo dijo los dos se rieron.

Y Asi paso la cena, entre risas y uno que otro piropo pervertido por parte de los dos. Antes de entrar al auto, Raúl la beso tan apasionadamente que les fue difícil separarse, pero lo hicieron por la falta de oxigeno.

Raúl condujo rápido a su casa, le abrió la puerta a Beck. entraron y antes de que Beck inspeccionara su casa con la mirada, Raúl ya le estaba comiendo la boca.

Gynecology Donde viven las historias. Descúbrelo ahora