•| Taylor

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En la mesa me toco estar con mi mamá, su novio, que desconocía su nombre, y los papas de Mayra.

- Mira Raúl aquí hay un lugar. - llego Mayra con él.- disculpen no les importa que Raúl se siente aquí ¿Verdad? Es que hubo una terrible confusión a la hora de repartir los lugares en su mesa y pues este es el único lugar que quedaba. - ella me vio y sonrió.

- No, claro que no – dijo mi madre sonriendo.

- Gracias. - dijo Raúl quien sonreía ampliamente porque le toco a mi lado.

- Bueno con permiso, que disfruten la fiesta. - dijo mi amiga pero antes de irse pude ver como me guiñaba el ojo. Esto ya estaba planeado. Y se lo agradecí infinitamente en mi mente.

La cena transcurrió calmadamente. Hasta que mi mamá hablo.

- Raúl, ya te recuerdo, eres el ginecólogo de mi hija ¿Verdad?. - pregunto mientras yo me sonrojaba completamente.

- Si, así es. – sonrió con es sonrisa que tanto a amaba ver en su cara.

- ¿Eres familiar del novio?.- esto ya parecía un interrogatorio.

- No, soy el mejor amigo. -  contestó.

Con eso mi mamá, ya no volvió a decir nada y se la paso hablando con su novio.

Desde hace rato note que Rauw me miraba de forma rara. Tenia un expresión de un niño que estaba a punto de hacer una travesura. No le tome mas importancia y seguí comiendo.

De un momento a otro sentí una vibración en mi parte baja. Haciendo que diera un salto, pero nadie lo noto excepto Raúl, quien rio bajito.

Entonces me di cuenta, el maldito me había puesto un vibrador en los pantys.

Ahora entiendo cuando llego a mi recamara pidiéndome que usara esos pantys hoy, que según el las compro pensando en mi y en lo sexy que me vería en ellas y yo me las puse por complacerlo.

Las vibraciones se hicieron mas potentes y tuve que morderme el labio para no soltar un gemido. Voltee a ver a Raúl y pude ver que en su regazo traía el control del vibrador, claramente vi los números llegaban hasta el 5 y apenas iba en el dos.

Pase mi mirada a la suya, pidiéndole con ella que parara. Pero en ves de eso vi como sonreía mas y como su mano se posaba en el control. Lo mire con cara de " te voy a matar si lo haces" y BUUMMM.

El vibrador paso al tercer nivel.

- Mierda. - se me salió un gemido.

-  Cariño, ¿estas bien?. - dijo mi mamá.

- Si mamá... Solo... Solo me acaba de dar un... Un calambre. - dije- Pero no te preocupes... Ya se me... Se me está pasando. - sonreí.

Con eso se calmo. Sentía como el aparato seguía allí abajo, mi respiración se acelero un poco pero trate de controlarme.

Cuarto nivel. Con una de mis manos agarre el mantel y con la otra me tape la boca. Era la experiencia mas erótica de mi vida. Estaba aquí sentada con un vibrador entre mis piernas apunto de correrme enfrente de mi mamá y ella ni se daba cuenta.

Raúl paso una de sus piernas por debajo de la mesa, hasta llegar a mis piernas, coloco su pierna entre ellas y con un movimiento separo mis muslos, haciendo que el vibrador se pusiese perfectamente en mi clítoris.

Y no conforme con eso puso el vibrador en nivel cinco. Ya no pude mas.

Sentía como mi clítoris era movido por unas vibraciones cada ves mas fuertes. Creo que moriría allí.

- ¡Carajo!- grite. - Otro calambre. - Y llegue al orgasmo.

- ¿Te duele mucho cariño?. - se preocupo mi madre

- Noo... estoy bien. - dije con la voz ronca.

Le sonreí a Raúl y el también me sonrió. Después le agradecería ese genial orgasmo. Estaba por hablarle cuando. De pronto escuche una voz de una mujer.

- Rauw. - una rubia horrenda que tenia kilos de maquillaje en toda la cara y estaba operada por todos lados. Abazo a Rauw. - ven vamos a bailar.

Se lo llevo casi arrastrandolo a la pista de baile. Vi como bailaban, bueno Raúl bailaba de forma decente pero la tipa parecia que le estaba bailando el tubo. Pude ver como Rauw me volteaba a ver y con la mirada me pedia ayuda.

Estaba por ir a la pista pero unas manos me detuvieron. Me volteo y vi que era Mayra.

- Tranquila fiera, no quiero que te peles con es tipa- dijo.

- Pero es que mirala como le baila a mi hombre. - senti como la sangre me hervia por ver como esa tipa se pegaba a Raúl- ¿Quien es?.

- Mi prima. - dijo algo apenada.

- ¿Que? No me diagas, es Taylor ¿Verdad?. - Mayra me habia contado que tenia una prima que se llamaba Taylor y que siempre le robaba los novios, la tipa era un cualquiera. - ¿Por qué la invitaste?. - estaba demasiado molesta.

- Yo no la invite, solo invite a mi tia, pero ella aparecio y ya no pude hacer nada. Ademas yo tambien quiero que se vaya- dijo enojada. - se puso a coqueterar con Jef en frente de mi, pero él la mando a volar y se fue con otro hombre y ya no la vi mas.

- Ahora vuelvo. - dije enojada.

- No quiero peleas. - me advirtió.

- No prometo nada.

Me acerque a ellos.

- Disculpa, Rauw ¿Podemos bailar?. - pregunte calmada.

- Mira niñita él esta conmigo, asi que esfumate. - me contesto ella y con todo el autocontrol del mundo no la tome de los pelos y la arrastre por el piso.

- Taylor, ya bailamos mucho. Asi que si me permites voy a bailar con Beck- dijo y yo sonrei victoriosa. Ella se fue enojada a no se donde. - Gracias, ya no la aguantaba.

- ¿La conoces? y de nada- los dos nos pusimos a bailar.

- No, bueno si... Es que soy su ginecologo. - eso me callo como balde de agua fria y deje de bailar.- pero no te preocupes no he hecho nada con ella. Soy muy profecional en cuanto a mi trabajo. - dijo y yo me rei como loca.

- Asi que conmigo fuiste demasiado profesional ¿No crees? - pase mis manos por su cuello.

- Bueno es que tu eres la excepción, linda.- no me resisti y le di un beso, no me importo que mi mamá o la gente nos viera ya llevaba todo el dia sin probar sus labios. El me correspondio y paso sus manos a mi cintura.

- Atencion a todas las solteras voy a lanzar el ramo. - la voz de Mayra nos interrumpio y nos dejamos de besar- todas ponganse en la pista de baile.

Raúl se fue en cuanto vio que todas llegaban y yo me quede. A mi lado estaba Taylo, quien me miraba amenazadoramente y yo igual.

Mayra se puso en posicion y solto el ramo. Taylor me iba a aventar para coger el ramo pero fui mas rapida y di un paso adelante haciendo que se callera al suelo y yo ganara el ramo.

Sonrei visctoriosa y vi como Raúl que estaba aun lado de la pista me hizo un giño con su ojo.

Despues de un rato la fiesta todavia seguia. Yo decedi caminar por la playa y Raúl me hizo compañia. Los dos nos alejamos bastante de la fiesta hasta que llegamos a una parte de la playa que estaba completamente sola.

Nos pusimos a jugar en la orilla como dos niños, de vez en cuando Raúl me cargaba y me daba vueltas. Caimos cansados en la arena.

Por un impulso me puse arriba de él y comenzamos a besarnos.

Poco a poco nos fuimos despojando de nuestra ropa hasta quedar desnudos.

Hicimos el amor en la playa. Bueno por lo menos por mi parte yo le hice el amor a ese hombre que quise desde el primer momento en el que lo vi.

Gynecology Donde viven las historias. Descúbrelo ahora