— ¿Qué fue lo que paso? — pregunto Hardy a su hijo, observándolo con seriedad y la preocupación visible en su semblante. Se encontraban todos reunidos en el saloncito verde en que Beck solía usar para sus lecturas, esta estaba en su habitación junto a su doncella siendo revisada por el medido de confianza de la familia real. Este no habia permitido que nadie más que la doncella de confianza de la princesa que quedara en la habitación.
— Alguien nos disparó mientras estábamos cabalgando — contesto Caleb, soltando un suspiro y apretando su agarre alrededor del cuerpo de su esposa. Ambos se mantenían abrazados y de pie junto a uno de los ventanales. Helsin en cuanto se habia enterado de lo sucedido habia corrido asustada a sus brazos y no lo habia vuelto a soltar. Su pequeño cuerpo temblaba con nerviosismo a la espera de noticias sobre la salud de su cuñada. — No vimos bien que fue lo que sucedió, simplemente oímos el disparo y luego Beck cayó, No tomó por sorpresa, pero los guardias fueron a investigar —
Su madre, sentada en el sofá ubicado en el centro del salón sollozó. Aún no recibía noticias sobre el estado de su pequeña, lo que la tenía en un silencio intranquilo y poco común en ella.
— ¿Cómo es posible que alguien haya podido traspasar la seguridad del castillo? — pregunto Alexa, rompiendo el silencio que se habia formado en el saloncito. Su mirada se dirigió a su esposo, quien se pasó las manos por el pelo con exasperación y nerviosismo.
—Llegaremos al fondo de esto — le aseguro, acercándose y con suavidad dejando un beso en una de las delicadas manos femeninas que temblaban levemente por la situación. — Nadie atenta contra la vida de mis hijos y queda impune, no bajo mi mando — su rostro se endureció en una mueca de frialdad que habría asustado al más temerario de los hombres.
Dylen, quien se habia mantenido en silencio y un tanto alejado del núcleo familiar, dirigió su mirada a Caleb. Este le devolvió la mirada, asintiendo de manera casi imperceptibles. Ambos tenían una idea de quien habia sido el perpetrador del disparo y hacia quien iba dirigido. Beck habia tenido la mala suerte de cruzarse frente a su hermano cuando se acomodaban para su carrera frustrada. Aún así agradecía al cielo que el proyectil solo hubiese asustado al caballo y no hubiese logrado su cometido en el cuerpo equivocado.
El doctor se acercó a la familia a paso lento, luego de haber terminado con su revisión y haber dejado a su paciente a cargo de las doncellas, quienes se encargarían de cambiarla y acomodar todo para que la princesa pudiera descansar tranquilamente.
— Majestad — se dirigió a Hardy. — la princesa se encuentra bien dentro de lo que cabe, ya recupero la conciencia. El golpe en la cabeza por suerte solo le causo el desvanecimiento y a pesar de que no presenta ningún otro síntoma alarmante me gustaría seguir monitoreando su situación. Por ahora solo debe descansar y tomar los analgésicos que le deje con su doncella, pues durante los próximos días sentirá un poco de dolor e incomodidad a causa de la caída. —
— Comprendo — Hardy asintió hacia el doctor. — muchas gracias. Nuestro mayordomo lo acompañara a la salida — el profesional se limitó a asentir, y hacer la reverencia requerida ante la familia real.
—Si me disculpan, iré a ver como se encuentra mi hija — Alexa se apresuró a caminar, casi correr, hacia la habitación de la que el doctor acababa de salir.
Dylen observo como uno a uno prácticamente corrían por los pasillos para ver a la princesa. Él por su parte se mantuvo dónde estaba, rezagado. No se sentía con el derecho de correr a los aposentos de la dama, aunque el impulso estuvo ahí, se decidió a reprimirlo y en su lugar fue de vuelta a las caballerizas, resuelto a averiguar que habia sucedió y a tratar de buscar la manera de que no volviera a repetirse.
Una vez sentado cómodamente sobre su montura se dirigió a trote ligeramente veloz al preciso lugar en el que junto a los príncipes habia estado en la mañana. Allí se sorprendió por la cantidad de guardias o los que parecían serlo, habia ciertos que por su forma de vestir parecían estar sobre la cubierta de un barco en lugar de en uno de los parques privados del castillo. Los muchos rumores del pasado un tanto oscuro del Rey se le hacían cada vez más creíbles.
— Milord — uno de los hombres vestidos como marineros, se acercó al verlo. Su rostro y contextura osca le dio a saber que estaba frente a un hombre de temer. — Hemos encontrado esto mientras recorríamos el lugar — le entrego una capucha negra, normalmente utilizada por asaltantes para cubrirse la cabeza a la hora de delinquir. — al parecer el dueño de esto salto la valla protectora luego de haber noqueado al guardia de turno, encontramos a Albert inconsciente con un golpe en la cabeza. —
Dylen asintió, procesando la información proporcionada por el hombre al mismo tiempo que analizaba el objeto que sostenía en sus manos. Era una capucha simple, negra y un tanto sucia. No servía de mucho para identificar al causante de los problemas.
— ¿La bala ya fue encontrada? — pregunto, aún sin alejar la vista de sus manos.
— No, milord — el hombre suspiró, aunque su trabajo habia sido exhaustivo aquel objeto que el lord escoces tenía en sus manos era lo único que habían podido encontrar. — seguiremos buscando hasta encontrarla, si hubo un disparo hay una bala —
—Muchas gracias, le haré llegar esta información al rey —
A pesar de no tener pruebas ni nada que respaldara las sospechas que se estaban formando en su cabeza, él ya tenía una idea de quien podría estar detrás de aquel atentado.
Su padre estaba cerca y al parecer su locura no tenía límites.
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19-08-2020
Gracias por leer!
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Magic [Royalty#3]
Narrativa Storica👑 Porque la magia del amor puede derretir el corazón más frió...nadie mejor que una ávida y apasionada lectora para afirmarlo y re-afirmarlo.👑 Atrévete a conocer la historia de Beck Southford. Tercera parte de la saga Royalty: Una familia, tres r...