Trouble - Jenlisa +18 G!P

Dynasty

There goes the last great American dynasty

Jennie

Primer día de instituto. Venga, Jennie, puedes con esto.

Nerviosa ni siquiera se acercaba al estado de Jennie aquella mañana cuando sonó el despertador. Se metió en la ducha, intentando recordar dónde estaban las aulas que había localizado el día de visita y preguntándose cómo de exigentes serían las audiciones de animadora.

Por suerte, Lisa no estaba en la mesa cuando bajó a desayunar con Pete y su madre. No sabía cómo era posible, pero no se la había cruzado desde la noche del ataque, un par de días atrás. Al parecer Lisa pasaba mucho tiempo fuera de casa, lo que no sabía era si siempre había sido así o se debía a su presencia y a la de su madre. En cierto modo, lo prefería. No quería que su nueva hermanastra pensara que estaba loca, o algo así. Cuanto menos supiera, mejor.

Había oído su coche salir del jardín mientras se vestía en su habitación. Supuso que las universidades también abrían sus puertas aquel día. Durante sus videollamadas con Shanon, Pete les había contado que su hija era artista.

-Buenos días, Jen - la saludó su madre.

-¡Hola! - respondió ella sonriendo cuando Pete colocó en su plato dos rebanadas de pan. Dejó la mochila con sus nuevos libros sobre la mesa.

-¿Estás nerviosa? - preguntó él.

-Un poco - musitó. Estaba aterrada -. Llegaré algo tarde hoy, por lo de las pruebas y eso.

-Oh, ibas a intentar entrar en las animadoras, ¿verdad? Seguro que te cogen, no te preocupes. Una amiga de Lisa estaba en el equipo y en el club de teatro a la vez, Chaeyoung, muy buena chica.

-Sí, creo que la conocí. La... otra noche.

-Qué bien, hija, está bien que conozcas gente.

Pete guardó silencio y bebió un sorbo de café. Se sentía mal en cierto modo por no haberle contado a su mujer lo que Lisa le dijo por teléfono el otro día, pero no había querido preocuparla en su pequeña escapada. Prometió decírselo una vez llegaran a casa, pero Jennie había parecido estar bien. Saberlo sólo la haría preocuparse, y ahora que estaban en Nueva Jersey y podían empezar de nuevo, lo último que necesitaba Shanon era pensar que no podían huir de su pasado.

-¿Quieres que te acerque en coche, Jennie?

-No, gracias Pete, pero creo que voy a coger el autobús. Ir acostumbrándome, y esas cosas.

-De acuerdo, pues yo me voy ya.

El hombre despidió a su madre con un beso en la mejilla y a ella con una pequeña sonrisa. Jennie lo agradeció. Suponía que su madre había advertido a Pete sobre lo que el contacto físico con otras personas podría provocarle, lo mismo que le provocó la cercanía de Lisa un par de noches antes. En los segundos anteriores, agarrada a sus hombros y con su cara tan cerca, Jennie podría haber jurado que iba a besarla, pero cuando pensaba en ello se decía que debió haber sido un error. No le gustaba a Lisa, y ni siquiera le caía bien, no había intentado besarla. Además, ¡eran familia! Debió ser parte de su imaginación, sólo había querido evitar que se cayera.

Pero también había una pregunta que le rondaba últimamente por la cabeza. Si Lisa la hubiera besado... ¿cómo hubiera respondido? Porque siendo honesta, en la oscuridad y la calidez de su agarre, en lo último en lo que había pensado era en que era su hermanastra. Eso es lo que hacía la gente de su edad ¿verdad?, dejando de lado todo el tema del incesto. Estaban en un nuevo estado, pero Jennie comenzaba a pensar que lo que estaba mal dentro de ella nunca se arreglaría.