Capítulo 46

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           Un gran asesino

Amaneció un día más en la
Factoría de Dani.
Los "Tramperos" se disponían a salir , a revisar
las trampas.
-Dani por favor , no te arriesgues , que últimamente estás perdiendo algún hombre
y es peligroso.
Lo dijo Laura con un mohín de disgusto y preocupación.

¡Que vayan los demás , tu quédate aquí que siempre hay cosas importantes también.
¡Deja todo ésto por favor , a ti no te hace falta!
Ya tienes bastante con el canalla ese del Risitas.
Céntrate en él o al final , acabará contigo.

-No puedo Laura ,Vine de España a explorar y trabajar con la exportación
de animales.
Me da igual , de la parte del mundo que sea yo amo esto aunque comprendo que no es para siempre.
Mi padre me enseñó a cuidar y querer a los pobres animales.

Dani la dio un beso y partió con cinco hombres
en la gran barcaza.
María se entretenía a ratos
con un Machete de grandes
dimensiones a afilarlo repetidas veces , y luego se lo escondía entre sus refajos. No se fiaba de nadie , El Risitas era terrible y nunca se sabía...
En él era posible casi todo.
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Dani iba surcando las aguas de los manglares ,y
de vez en cuando se bajaba en una orilla. Se bajó y...
unos ojos fríos de hielo le observaban ,  cuando Dani se bajó de la embarcación.
Una víbora de Coral , que estaba entre unos juncos.
Empezó a reptar acercándose peligrosamente hacia Dani.
Pero Dani la escuchó el crugir de sus escamas con la hierba.

La vio aparecer entre unas piedras y entre los juncos.
Con mucha rapidez , sacó
su machete , y cuando iba
sacudirse del primer ataque.
Dani la golpeó en la cabeza, con el mango de su machete.
Se echó un par de metros hacia atrás y sacó su pistola que llevaba carga de unos dardos adormecedores.
Cuando el gran Ofidio se lanzó de nuevo, a morder a Dani , éste disparó al cuerpo del animal y tras unos movimientos violentos , se quedó quieta.

La cogió con mucho cuidado . Era grande como de unos dos metros y bellos colores.
Es muy venenosa , mortal.
La cogió con cuidado y
la llevó a la embarcación.
Allí la cogieron, y después de apresarla, la vendaron la boca para que no mordiera.
La metieron en una jaula cuando se empezaba a mover.

Dani volvió a tierra , y siguió mirando con mucha
preocupación a todos los lados.
Vio a lo lejos un Gato montés  precioso , pero estaba muy distante.
Volvió a la barcaza se adentraron en los manglares y estuvieron mirando las trampas.
Capturaron un pequeño Caimán de unos doscientos
kilos.
Muy belicoso, tuvieron que
matarle.

Después salieron de la barcaza,  y se acercaron a la sombra de unos árboles.
Uno de los indígenas que iba un poco más despacio ,
Se encontró con una Babita
( Cría recién nacida) del Caimán le cogió con cuidado pues con apenas unas horas de vida  ya tenía en su sangre la actitud del ataque

-Se te dijo.que no se capturará a ninguna cria.
Traería problemas.
Dijo Dani
-Venga guardarle , que ya le venderemos o algo así.
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Mientras tanto Yulios iba en su caballo hacia donde él creía que tenía atrapado
a Raúl.
El no sabía que se había escapado, a raíz de la inmensa Riada y que hubiera muerto ahogado, si no se hubiesen apenado de él .
Llevaría como una hora al trote galopando. Tenía una rara sensación.
Tuvo que parar para revisar la cincha del caballo , cuando....

Entre la hojarasca y la espesa hierba , oyó un ruido , y como un llanto.
-Pero...¿Quién eres tú criatura y que haces por aquí ?
Era el niño(Tarsius) se llamaba , que había huido
del bestial Risitas .
Iba llorando y con sangre
en las piernas , con las ropas hechas jirones.

El niño que lloraba sin parar, y con un ataque de histeria tremendo , quiso salir corriendo de allí.
Yulios le sujeto y le abrazo,
le secó las lágrimas y le consoló cariñosamente.
-No te voy hacer daño ¡Calmate un poco y cuéntame qué te ha pasado.

Saco una cantimplora que llevaba en el caballo , y le dió de beber.
Tarsius se fue calmando y cogiendo confianza.
Le contó todo lo que había pasado , y su huida , casi todo un día , entre la espesura de aquel monstruo , que le había matado a sus padres y hermano.
Yulios también le dio de comer , algo de conserva y poco después así le dijo:

Te llevaré conmigo a Caracas a pedir ayuda a los Gubernamentales y a mis amigos los "Cazadores.
¡Tenemos que capturar a ese canalla , como sea!
- Monta en el caballo conmigo, y en unas dos o tres horas estaremos en Caracas a salvo.

Te dejaré de momento en casa de unos primos míos
y después , ya veremos qué
puedo hacer contigo.
-¡No tengas miedo Tarsius
cónmigo estás a salvo!

Poco después salieron de allí al galope.
Tras un par de paradas más, llegaron a Caracas.
Yulios sin perder tiempo ,
se personó en las oficinas del Gobierno y  después , se encontraba en el despacho del secretario del
Presidente.
Yulios le puso al tanto de todos los crímenes del Risitas , y le pidió más ayuda .

El secretario le prometió
que al momento le iba a ayudar con más soldados
Y que le quería Raúl vivo o muerto.

Yulios salió de allí y quedó en volver en una media hora .Tenía que solucionar
lo del niño Tarsius.
Se dirigió a casa de sus primos .

-Yo quiero ir contigo , vengar a mis padres y hermano.
-Serás como mi hermano mayor , y cuidaremos el uno del otro.
-¡Por favor Yulios , no me digas que no!
-La semana que viene cumplo diez años , ya no soy tan pequeño.

-Mira yo te entiendo, pero hay que ser muy fuerte, y aguantar muchas cosas.
Hambre frío peligros animales salvajes y ...
¡Esa mala bestia del Risitas.
cómo así se le conoce!
Aquí estarás seguro hasta que yo vuelva , y veremos
que podemos hacer contigo.
- Yulios le dió una tableta
de chocolate con unas galletas.

-Yo es que quiero estar contigo hermano ; ¿ Mr dejas llamarte hermano Yulios?
Iré contigo donde sea , y te obedecere en todo , ¡Por favor!.

-Y... ahora quiero ir contigo.
-Mira tengo el Tirador de mi hermano .
Sabiéndolo usar bien , es un arma mortífera.
-Tengo sólo diez años , pero sé más que cualquier niño de la Ciudad.
Yo también te ayudaré y te defenderé. Se  muy bien montar a caballo , no seré
un problema para tí.
-¡Por favor Yulius. déjame ir contigo!
- Y cuando acabe todo...
dijo Yulios,  ¿que haré contigo , querido hermano
Tasius?.
-Vivire contigo y trabajaré
para tí.
No tengo a nadie en el mundo.
Te quiero a ti Yulios.

-¡Está bien Tarsius!  me tendrás que hacer caso de todo. ¿Está claro , hermanito?.
Tarsius , saltó de alegría y
se abrazó a la cintura de Yulios.
-¡Bueno , bueno , pero anda y límpiate la boca que la tienes llena de chocolate.

Está bien , Tarsius porro recuerda que te tienes que cuidar tú solo porque ..  - Ya sé ,  dijo el niño , que te
tenés que dedicar a tu tropa a los soldados y que no tendrás tiempo para mí.
- Pero en fin .
-¡A tus órdenes mi Capitán!
seré todo oídos , y lo que tú no oigas o veas , seré yo el que te lo vaya diciendo
Y diciendo ésto, Tarsius se empino ligeramente y le dió un beso en la cara a
Yulios.
Éste se quedó algo perplejo
y boquiabierto , ante tanto
desparpajo y claridad de ideas de Tarsius.

Cuando volvieron al Cuartelillo , y en un patio
estaban preparados unos
ochenta hombres , y muy
bien armados por cierto.
Estaban muy bien aleccionadora por la Comandancia.
Eran buenos rastreadores.
Estaban acostumbrados a ser
dirigidos.

Al día siguiente salieron todos de Caracas , con una sola idea:
Llevar vivo o muerto al Risitas.
Cabalgaron hasta donde se tragaron las aguas aquel pueblecito de Indígenas , los cuales huyeron monte
arriba para construir otro.
Se abrió un círculo de
unos treinta kilómetros para "Peinar" la zona.




          Dani. el CazadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora