One Shots | Los Toys |

02- Markitos

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| 02 |"Markitos" |
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—¿Cuál es el resultado?— Pregunté nerviosa al mismo tiempo en que agitaba mis manos al aire.

—Es... Po-positivo...—La habitación se tornó en un incómodo silencio al momento en que mi mirada y la de Kevin se chocaron. Mordí mis labios y quité de sus manos el pequeño aparato que nos daba esta noticia.

4 Semanas- Aseguraba el test de embarazo. Internamente lo agradecí, estaba claro que este bebé es de Marco y no de su hermano con quien había tenido un desliz poco menos de dos semanas.

Por mi mente sólo pasaban preguntas sin respuestas y miles de escenas trágicos hijas de la desesperación, angustia, rmeordiente e inseguridades con las que cargaba desde hace un mes, justo cuando Marco me pidió un tiempo después de haberme llevado a la cama por última vez.

 ¿Cómo le diré a Marco que seremos padre estando distanciados? ¿Aceptará a un hijo en el mejor momento de su carrera? ¿Querrá siquiera oírme?

—¿Qué harás, Jazmín?

Negué mientras me sentaba en la cama y colocaba mi cabeza entre mis manos. Un escalofrío corrió por mi espalda cuando las manos de quien fue mi cuñado por tres años, la recorrieron.

-No lo sé Kevin.—Admití con mi mirada perdida en algún punto del dormitorio.—Marco está feliz con sus emprendimientos y el éxito que está teniendo, está feliz de haberse distanciado de mí, no puedo decirle de este embarazo.—La congoja se apoderó de mi voz haciéndola inestable y débil.

-¿Porqué no?

—No le arruinaría su momento.

—Un hijo es una bendicion, Ja..

—No Kevin. Un hijo no planeado jamás es una bendición como dice la gente, o son algo planeado o son un problema, pero jamás un milagrito caído del cielo como una bendición.—Él negó llevando sus manos hasta cruzarlas detrás de su cabeza, totalmente en desacuerdo con mis crudas palabras.

—¿Y entonces?

—No quieor que piense que le quiero arruinar su c...

—¿Qué dices Jazmín? ¿Arruinarle?—Mi ex-cuñado me reprochó, en su tono de voz y con su mirada severa.—¿Acaso no sabes cuanto desea mi hermano tener hijos? A quien  dedicarle su tiempo, a enseñarle a hacer lo que a él mas le gusta o a cuidar de una princesa. ¿Porqué le arruinarías el momento que para ustedes será el más feliz?

—¿Será porque me pidió un tiempo?-pregunté con un hilo de voz—¿Y si decide largarse de una vez, dejarme sola y no verme nunca más?

—Entonces no era para ti.—Sus palabras se clavaron en mi pecho como una daga. Kevin pareció notarlo y suspiró antes de acercarse a mí y rodearme con sus brazos. Besó mi cabeza y volvió a hablar.—En este cuerpecito chulo hay dos vidas, la tuya y la del bebé, que no sabe tu nombre, que solo está tranquilo allí absorto a todo.—Un sollozó se escapó de lo mas profundo de mi ser al igual que pequeñas lágrimas, Kevin siempre era tan tierno que hasta me hacía dudar de demasiadas cosas que no debería.—Sé que no esperabas ser madre a esta edad y sucedió en el momento que no pensabas, sin embargo, esa criatura solo espera nacer, no es culpable de nada, solo espera conocer a su mamá. ¿Sabes por qué?-Negué aferrándome a él, a su cuerpo y sus brazos que me abrazaban de manera cálida.—Porque los niños no entienden de leyes, de peleas de adultos. No, nada de eso, solo saben dar amor y buscan recibirlo.

—Y pañales sucios, generar que gaste mi dinero,..

—¡Jazmín!—Rodé mis ojos cuando me retó. Miré mi estomago cubierto por mi blusa.— Se lo confundida y dolida que estás en lo profundo de tu corazón, en estos momentos es terrible tomar una decisión, por ello sólo te diré que no tomes una decisión drástica, date más tiempo para pensar.