Cap. 18 || Entre La Tormenta

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Varios meses después.

Corro por la pequeña callejuela que me lleva al piso alquilado de mi novio intentando mojarme lo menos posible. Esta semana ha estado muy completa entre vientos fuertes, tormentas y granizos, a pesar de estar a punto de comenzar el verano.

Cuando por fin llego abro con rapidez la puerta del portal y corro escaleras arriba para llegar al piso de Carlos. Nada más entrar me deshago de la chaqueta y de los zapatos, dejando ambas cosas en la entrada. Camino por el pasillo buscando a mi querido novio, a quien encuentro en el salón tirado en el sofá, viendo una película bastante concentrado.

Me acerco sin hacer ruido por detrás y finalmente le asusto. Carlos suelta un pequeño grito y yo empiezo a reírme hasta acabar por los suelos debido a la cara que Carlos había puesto.

– Si si, tu ríete ¡pero casi me matas, loca!

– ¡Vaya un exagerao!

Ambos nos reímos y no conseguimos decir nada, o al menos nada que se entienda bien por las risas.

Cuando el ataque de risa y los comentarios exagerados de Carlos terminan, me tumbo a su lado y seguimos viendo la película que ya tenía puesta. O al menos eso intentamos, porque nos quedamos dormidos al rato.

(...)

Me despierto en una semi oscuridad en el salón de Carlos, ambos somos únicamente iluminados por la luz de la televisión y eso me hace dudar de la posible hora que pueda ser. Llegue a casa de Carlos a las ocho y poco de la tarde, no creo que sea muy tarde.

Cojo el móvil y miro la hora.

23:45PM.

Carlos suelta un bostezo que me asusta levemente al no esperarlo y me mira con los ojos medio cerrados.

–¿Qué pasa? ¿Qué hora es?

– Son las doce menos cuarto, nos quedamos dormidos viendo la peli.

– Vaya... – Carlos mira por la ventana y ambos nos fijamos en qué sigue lloviendo – Ponte la chaqueta y las zapatillas, enseguida vuelvo.

Carlos se levanta de un salto del sofá y desaparece por la oscuridad del pasillo. Yo le hago caso aún si saber que tiene pensado.

Al poco tiempo vuelve, ya vestido y dejando atrás el pijama que llevaba antes. Cuando iba a preguntarle cual es su idea, Carlos me agarra de la mano y sale corriendo hacia la puerta de entrada mientras que coge las llaves del piso con gran agilidad mientras corre.

No se cuanto corremos, ni cuanto tiempo pasamos mojandonos por las calles de Madrid debido a la lluvia, solo sé que cuando paramos nos encontramos en mitad de un parque completamente vacío y levemente iluminado por unas pocas farolas.

La lluvia, que sea tarde y entre semana explica que no haya nadie más por aquí.

Cuando llegamos justo al centro del parque Carlos para. Ambos miramos al cielo por un buen rato, aún con las manos entrelazadas y la ropa empapandose aún más. Y no sé porqué, pero me empiezo a reír. Mi novio me mira extrañado por unos segundos pero luego se rie conmigo.

Ambos nos quedamos cara a cara riéndonos y de la nada dejamos de hacerlo, pero las sonrisas no se borran de nuestras caras.

Pongo los brazos sobre los hombros de Carlos y con una de las manos le acaricio la nuca, mientras que él rodea mi cintura con sus manos.

– ¿Qué acaba de pasar?

– No lo sé.

– Tú empezaste esto ¿Qué se te pasó por la cabeza?

– Simplemente vi la lluvia y me pareció buena idea, tan solo supe que me seguirías y por eso lo hice.

– ¿Como sabías que te seguiría el plan?

– Simplemente lo supe.

Ambos sonreímos y nos quedamos en esa misma posición durante un buen rato, sin importar la hora, la lluvia o que probablemente nos pongamos enfermos tras esto.

Porque sólo nos importa la persona que tenemos enfrente en este momento.

💜
Adoro el capítulo, no se porqué✨

Volver a Verte // Julright🌸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora