𝚄𝚗𝚊 𝚜𝚎𝚐𝚞𝚗𝚍𝚊 𝚘𝚙𝚘𝚛𝚝𝚞𝚗𝚒𝚍𝚊𝚍 || ℓιѕσσ

Capítulo 9

Unos rayos de sol deslumbraban mi cara provocando que poco a poco empezara a abrir los ojos. Sentí un fuerte dolor de cabeza cuando abrí completamente los ojos y la luz me deslumbró.

-Auch- me queje sobándome la cíen, me senté en la cama despacio para evitar incrementar el dolor. Cuando por fin estaba en mis cinco sentidos noté donde estaba, esta no era mi recámara.- ¿Donde est...

-¿Lisa?- Una voz ronca sono a lado de mi, volteé a ver y me paré bruscamente llena de miedo al ver un cuerpo junto a mi.

-¡Ahhhhh!- Grite cuando el cuerpo se empezó a mover.

-¿Puedes callarte, idiota?- Solté un suspiro al ver que era Rosé, pero por el movimiento brusco una ráfaga de dolor invadió mi cabeza provocando que me sentara nuevamente en la cama.- ¿Dónde estamos?

-No tengo idea- Respondí con pesadez.- No recuerdo nada de ayer.

-Ni yo- Se sentó de igual forma en la cama mientras se sobaba su cabeza.-¿Y Bambam?

-No lo sé, deberíamos salir, seguro ya es tarde...- Mire el reloj de la mesa de noche y eran las 2 de la tarde, casi se me van los ojos al ver la hora- Estoy muerta...

-¿De que habl...- le enseñe la hora y de igual forma casi se le van los ojos.- Estamos muertas.

-Todo esto es por tu culpa- Le di un golpe en el hombro.

-Auch, claro que no- Hizo un puchero sobándose su hombre.- Ve el lado positivo, será una noche que recordarás para siempre.

-A si, solo olvidas ¡que no recuerdo nada!- Rodó lo ojos hastiada.

-Sabes a lo que me refiero- me miró obvia. Solté un suspiro resignada y me paré para salir de la habitación- Oye, espérame.

-Shhh, no hagas ruido- Susurre a Rose mientras caminábamos, estábamos en una recámara de una planta alta, cuando bajamos las escaleras nos dimos cuenta que estábamos en la misma casa que la de anoche.

-Que amables fueron al no echarnos- Comentó Rose mientras recorríamos la gran sala, yo concorde con ella.

-Buenos días- Una voz gruesa sonó detrás nuestra sobresaltando nos.

-Jesús...- Puse mi mano en el pecho para calmar mi respiración, al parecer ese día se la iban a pasar asustándome. Cuando alcé la mirada vi a un chico, que si no estaba equivocada era Taehyung, el chico que me había dicho Bambam que había organizado la fiesta.

-Perdónanos, no era nuestra intención andar por tu casa- Dijo Rosé un poco apenada.

-No se preocupen, por cierto soy Taehyung. -nos sonrío con una sonrisa cuadrado, algo inusual de ver.-¿Quieren comer?

-Pues... - Dije dudosa, ya era muy tarde y mi madre me iba a matar.

-Vamos, seguro están hambrientas- Insistió Taehyung sonriendo- Bambam ya está en la cocina.

¡Claro! Si llevaba a Bambam con mi mamá seguro no se enojaría tanto al saber que estuve con él todo el tiempo.

-Esta bien- Acepte finalmente y Rose y yo seguimos a Taehyung hacia la cocina, cuando entramos un olor a huevos con mantequilla, tostadas con mermeladas, hot cakes y jugo de naranja invadió mi nariz, era el paraíso.

-¡Lisa!- Dijo Bambam mientras comía.

-No hables con la boca llena- lo reprendió Rose y Bambam masticó para luego seguir hablando, algo que hizo que Taehyung riera.

-Que bueno que están aquí.- nos abrazo a ambas levantándonos un poco del suelo.

-Claro que estamos aquí, se suponía que nos ibas a cuidar- Lo empuje y el bajo la mirada avergonzado.